LOS LAGOS DE SIERRA NEVADA SERVIRÁN COMO ‘ECOMARCADORES’ PARA ESTUDIAR EL CAMBIO CLIMÁTICO GLOBAL

LOS LAGOS DE SIERRA NEVADA SERVIRÁN COMO ECOMARCADORES PARA ESTUDIAR EL CAMBIO CLIMÁTICO GLOBAL

Científicos del Instituto del Agua de la Universidad de Granada lideran un estudio internacional que pretende analizar los ecosistemas de alta montaña como los del macizo granadino. El objetivo es determinar si el incremento en las tormentas de polvo africano, como consecuencia del cambio climático, puede afectar a lagos remotos y utilizarse como sensores del clima.
Carolina Moya

Los investigadores, en plena faena
Lluvia de grandes gotas marrones con alto contenido de tierra que ensucia coches y cristales. Esta estampa cada vez más frecuente en verano se debe a las tormentas con intrusiones de polvo sahariano. La procedencia del fenómeno meteorológico da a las precipitaciones su característico color marrón. Sin embargo, además de las molestias para aquellos que se afanan en dar brillo a su automóvil, estas partículas suspendidas en la atmósfera procedentes de África pueden tener repercusiones para los ecosistemas de alta montaña europeos e incluso para el hombre.

Un equipo internacional de científicos pretende analizar la incidencia de estos procesos atmosféricos procedentes del Sáhara en los lagos de alta montaña. Esos ecosistemas aislados constituyen un peculiar laboratorio natural, para estudiar qué consecuencias podrían tener los cambios en la intensidad y frecuencia de tormentas de polvo sahariano, asociadas a un aumento progresivo de las temperaturas en todo el planeta.

En este grupo de investigadores participan científicos del Instituto del Agua, perteneciente a la Universidad de Granada. Y es que Sierra Nevada constituye uno de esos ecomarcadores de alto valor ecológico que delatan las consecuencias del cambio climático global extrapolables a todo el mundo. A los investigadores granadinos se suman científicos nacionales e internacionales que analizarán lagos de los Alpes, los Pirineos, la Antártida, el Ártico y la Patagonia.

Cada uno en su ecosistema, los expertos intentan contestar a la misma pregunta: ¿Qué consecuencias tiene el polvo sahariano en los lagos de alta montaña? Según explica la responsable del grupo de investigación, Isabel Reche, las polvorientas nubes procedentes del continente vecino trasportan nutrientes minerales y microorganismos procedentes del suelo africano, que se depositan en los lagos de los macizos montañosos.

Esta migración de partículas, cada vez más frecuente, puede modificar las poblaciones de bacterias autóctonas, transformar el ecosistema por completo e incluso tener consecuencias negativas para la salud humana. “Por el momento, sólo analizamos las bacterias y más tarde abordaremos las consecuencias de éstas. Sin embargo, los microorganismos invasores pueden generar problemas respiratori0s además de resultar focos de infecciones, porque proceden del suelo”, aclara la investigadora.

Filtrar el aire

Toma de muestras
El equipo internacional formado por físicos de la atmósfera y biólogos especialistas en el análisis molecular de los microorganismos está investigando las partículas que transporta el polvo sahariano. De toda la columna de aire separan los microorganismos y determinan su viabilidad para averiguar los que pueden llegar vivos a los lagos.

Para materializar este proceso, los científicos filtran el aire de la atmósfera a 3.000 metros de altura mediante colectores atmosféricos de alto volumen. El siguiente paso consiste en la purificación del ADN de los organismos incluidos en la columna de aire. De ahí se obtienen pequeñas cantidades de material genético que, por su escasez, resulta necesario amplificar. “El análisis de los genes nos permite determinar a qué microorganismo pertenecen”, afirma Reche.

Una vez analizados los microorganismos que llegan a los lagos se procederá a especificar sus consecuencias para los ecosistemas locales. Y es que la globalización no sólo afectan a la Economía y las comunicaciones, los procesos biológicos también se hacen universales, porque las fronteras son difusas en el mundo de los seres vivos.

Más información:

Isabel Reche
Tlf: 620050357

Email: ireche@ugr.es

www.ecosensor.org

Descargar


Una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas

Una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas
GRANADA • E.P.

Una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas, convirtiéndose en un acto patológico tan grave como el alcoholismo, la drogadicción, la ludopatía o la adicción a Internet, según afirmó la profesora del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada (UGR) y experta en adicciones psicológicas, Francisca López Torrecillas.

Esta experta sostiene que el excesivo consumismo de estas fechas está asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral en el caso de los hombres, así como a una baja autoestima en el caso de las mujeres.

Se trata de personas que no reconocen su problema y que lo ocultan a sus familiares, alertó López Torrecillas, quien precisó que los hombres que gastan grandes cantidades de dinero en estas fechas lo hacen por desencanto laboral, porque no se encuentran satisfechos con su posición económica o no se consideran lo suficientemente valorados.

Descargar


Una de cada 10 personas sufre compras navideñas compulsivas

ESPECIALISTAS SEÑALAN QUE SE TRATA DE UNA PATOLOGIA
Una de cada 10 personas sufre compras navideñas compulsivas
Es un fenómeno asociado a problemas de depresión. Se considera una adicción con efectos similares a los del alcoholismo.

* enviar
* imprimir
* añade a tu blog
* Aumentar el tamaño del texto
* Reduce el tamaño del texto

28/12/2006 EFE

Numerosas personas de compras en una calle comercial esta Navidad.
Foto:CORDOBA

El abuso de las compras navideñas se convierte en una patología tan grave como el alcoholismo o la drogadicción en una de cada diez personas, fenómeno asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral, en el caso de los hombres, y de baja autoestima en el de las mujeres.

Entre los síntomas de esta adicción están adquirir productos con la excusa de regalarlos para quedárselos después, esconder las compras a los familiares o comprar comida en exceso que luego se pudre, según explicó ayer la profesora de la Universidad de Granada y experta en adicciones psicológicas Francisca López.

CONSECUENCIAS Las consecuencias de este problema psicológico a largo plazo pueden ser nefastas en la salud mental de las personas, ya que se trata de una adicción con efectos similares a los del alcoholismo, la ludopatía o la dependencia de Internet, según esta investigadora.

Además, advirtió de que la publicidad y el adelanto de las rebajas no ayudan en absoluto a solucionar el problema, más aún, enganchan cada vez a más personas, por lo que abogó por que las administraciones ejerzan un mayor control sobre este ámbito, como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia.

Los motivos de este comportamiento adictivo varían en función del sexo, ya que en los hombres suele corresponderse con casos de desencanto laboral, insatisfacción con su posición económica o sentimientos de infravaloración. Sin embargo, en las mujeres se relaciona habitualmente con un bajo nivel de autoestima o insatisfacción con su cuerpo.

ROPA Y BELLEZA Las mujeres que compran compulsivamente optan por adornos, prendas de ropa y productos de belleza o bien productos alimenticios, mientras que ellos se decantan por los aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches.

Tras unas compras exageradas aparece en estas personas un fuerte sentimiento de culpabilidad y arrepentimiento, ya que en muchas ocasiones el dinero gastado está muy por encima de las posibilidades del consumidor.

La especialista recomendó, en este sentido, que se acuda a especialistas o a alguna asociación que pueda ayudarles a atajar este grave problema, en muchos casos de importantes consecuencias.

Descargar


Consumir hasta enfermar

Consumir hasta enfermar
Consumir hasta enfermar
ABC
GRANADA. Que las Navidades incitan al gasto innecesario es una obviedad indiscutible; es más, tratamos de combatirlo consumiendo, comiendo y comprando menos, aunque no siempre se consigue. Que puede llegar a ser una enfermedad es ya algo preocupante. Sin embargo, ésta es la conclusión de la profesora del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada, Francisca López Torrecillas, que sostiene que una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas, convirtiéndose en un acto patológico «tan grave como el alcoholismo, la drogadicción, la ludopatía o la adicción a Internet».
Depresión y baja autoestima
Esta experta sostiene que el excesivo consumismo de estas fechas está asociado a problemas de depresión en el caso de los hombres, y una baja autoestima, en el caso de las mujeres.
«Se trata de personas que no reconocen su problema y que lo ocultan a sus familiares», alertó López Torrecillas, quien precisó que los hombres que gastan grandes cantidades de dinero en estas fechas «lo hacen por desencanto laboral, porque no se encuentran satisfechos con su posición económica o no se consideran lo suficientemente valorados».
En el caso de las mujeres, esta profesora de la Universidad de Granada apuntó que la adicción a las compras «se debe un bajo nivel de autoestima, provocado muchas veces porque no se encuentran satisfechas con su cuerpo o a que sufren problemas de sobrepeso, que les causan depresión y ansiedad».
López Torrecillas señaló, además, que las mujeres «enganchadas» al consumismo navideño adquieren, fundamentalmente, «adornos, productos de belleza y ropa», mientras que los hombres se decantan «por aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches».
Además, advirtió de que este tipo de pacientes «esconden las compras a los familiares, compra comida en exceso que luego se pudre y adquieren gran cantidad de productos con la excusa de regalarlos para después quedárselos».
«Detrás de un hábito tan frecuente como las compras navideñas puede llegar a esconderse un serio problema psicológico, cuyas consecuencias a largo plazo en la salud mental de las personas son nefastas», prosigue la profesora, que agrega: «Si casi todos los españoles tienen adicción al consumismo exacerbado tan típico de estas fechas, lo cierto es que para uno de cada diez esta costumbre se convierte en un serio problema».
Esta experta sostiene que la publicidad y el hecho de que las rebajas comiencen cada vez antes «no ayudan a solucionar el problema, más aún, engancha cada vez a más personas».
Buscar ayuda psicológica
Para Torrecillas, las distintas administraciones deberían ejercer un mayor control sobre este ámbito, «como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia, puesto que la publicidad tiene mucha culpa de esta adicción psicológica». Así, señaló que, tras estas compras «exageradas», en estas personas se despierta «un fuerte sentimiento de culpabilidad y arrepentimiento, al comprobar el dinero que se han gastado, con frecuencia muy por encima de sus posibilidades».
«Como con otras adicciones similares, los adictos a las compras deben dirigirse a un especialista o a alguna asociación que pueda ayudarles a atajar este grave problema», recomienda la experta granadina.

Descargar


Enloquecidos por comprar

NAVIDAD
Enloquecidos por comprar
El abuso del consumismo en estas fechas se convierte en una patología tan grave como el alcoholismo o la drogadición en uno de cada 10 españoles
AGENCIAS / GRANADA
Una de cada 10 personas es fiel consumista de las compras navideñas, lo que puede convertirse en una patología tan grave como el alcoholismo, la ludopatía, la adicción a internet o la drogadicción, según advierte la profesora del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada y experta en adicciones psicológicas, Francisca López Torrecillas.

Si casi todos los españoles tienen simpatía al gasto exacerbado tan típico de estas fechas, para uno de cada 10 esta costumbre va más allá. «Se trata de personas que no reconocen su problema, y que lo ocultan a sus familiares. Los enfermos de las compras navideñas adquieren productos compulsivamente, con la excusa de regalarlos, pero muchas veces se los quedan finalmente para ellos mismos», apunta la investigadora andaluza.

López Torrecillas destaca que, aunque el dispendio navideño en exceso está asociado a un estado depresivo, se debe a distintos motivos, en función del sexo del sujeto. «Los hombres que gastan grandes cantidades de dinero lo hacen por desencanto laboral, porque no se encuentran satisfechos con su posición económica o no se consideran lo suficientemente valorados. Esto les hace refugiarse en el alcohol, las drogas o en adquirir productos de forma compulsiva», explica.

cuestión de género. En el caso de las mujeres, apunta que la adicción a las compras «se debe a un bajo nivel de autoestima, provocado muchas veces porque no se encuentran satisfechas con su cuerpo o por cuestiones de sobrepeso, que les causan depresión y ansiedad».

López Torrecillas señala que hombres y mujeres enganchados compran de forma diferente. «Ellas adquieren adornos y productos de belleza, como ropa, pintura y cosméticos, mientras que ellos se decantan por aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches». En el caso de las mujeres, muchas de ellas dirigen su patología a gastar en productos alimenticios.

«Hay quien llena el frigorífico a rebosar durante esta época, con la excusa de los banquetes en días señalados, y adquiere mucha más comida de la que finalmente se llega a consumir en su casa. Este es otro de los síntomas de este trastorno psicológico».

La experta afirma que la publicidad y el hecho de que las rebajas comiencen cada vez antes «no ayudan en absoluto a solucionar este problema cada vez más extendido, e incluso engancha cada vez a más a las personas».

La profesora granadina apuntó por último que las distintas administraciones deberían ejercer un mayor control sobre este ámbito, «como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia».
Descargar


El deseo perdido

VIVIR
El deseo perdido
La inapetencia sexual se vive muchas veces con un sentimiento de culpa. El 30 por ciento de las mujeres y el 15 por ciento de los hombres dicen tener la libido por los suelos
TEXTO: ISABEL IBÁÑEZ / ILUSTRACIÓN: ARCHIVO / MADRID/
El deseo perdido
Imprimir noticiaImprimirEnviar noticiaEnviar

Publicidad

REVISTAS femeninas que convencen a las mujeres de que con una gasa colorada sobre la lámpara, el Je taime de Jane Birkin en el CD y un picardías recuperarán las ganas y obtendrán un revolcón en vez de una carcajada. Encuestas sobre la frecuencia sexual. Mujeres con hijos que trabajan dentro y fuera de casa, compitiendo por ser la más atractiva y lista de la oficina y rugiendo como leonas en la cama mientras piensan en cambiar de anticelulítico. Ancianos que pasaron la vida escondiendo su deseo y que ahora se ven abocados a ser saltimbanquis sexuales… Los últimos en llegar son los jóvenes europeos -sobre todo ellas-, que, al parecer, lejos de entregarse al desenfreno en la oscuridad de un parque, están perdiendo el apetito por miedo a no encarnar el inalcanzable canon de belleza actual.

Para muchos, cada vez que llega la hora de ir a la cama aflora el miedo a responder con una negativa a la pareja, que en el peor de los casos no se dará por enterada. «Insistir es peor, provocará más problemas», dice Juan Carlos Sierra, profesor de Evaluación Psicológica de la Universidad de Granada. Los expertos avisan, de todos modos, de que la cosa quizá no sea tan grave y quieren tranquilizar a aquéllos que se preocupan porque la frecuencia de sus coitos poco tiene que ver con las hazañas que oyen.

Así lo explica Félix López, catedrático de Psicología de la sexualidad en la Universidad de Salamanca: «Hasta hace poco, lo ideal era no desear, y hoy se ha convertido en un campeonato. Hay encuestas que hacen ver problemas donde no hay. El neuro-psiquiatra Javier Aizpiri, de la Clínica Indautxu y el Ambulatorio Médico Terapéutico, en Bilbao, abunda en este aspecto: «La apetencia sexual está latente por todas las esquinas y muchos lo viven con sentimiento de culpa por estar agotados. Y encima se les culpabiliza».

Las mujeres cargan con el peso de la pérdida de la libido. Una de cada tres no sabe ya qué diablos era eso del deseo, aunque algunos especialistas aseguran que la proporción es mucho más grande: «Hoy es un milagro dar con una mayor de 40 años que tenga deseo, y es normal, porque están agotadas con los hijos, trabajando dentro y fuera de casa…», dice el neuro-psiquiatra Javier Aizpiri. «Los últimos mil años de cultura cristiana en Occidente han ido en contra del deseo, hemos criado mujeres con poco apetito hasta hace 20 años. Y esto no es Brasil, donde valoran la actividad sexual; es al revés».

Sí, son ellas las de me duele la cabeza, pero también hay hombres que se alegran de oír la excusa, se dan media vuelta y a dormir. Llegan al 15%. «La mujer demanda más actividad hoy, y muchos se sienten presionados, sobre todo a ciertas edades, cuando ya no tienen tantas ganas», aporta Juan Carlos Sierra. Efectivamente, en el último Congreso Europeo de Medicina Sexual celebrado en Viena se habló de la emergencia de un nuevo perfil de mujer, la vitasexual. Para ella, el sexo es imprescindible para el bienestar de la pareja y sus tres piezas claves son: espontaneidad en las relaciones íntimas, satisfacción de su compañero y comunicación. Al parecer, el 48% de las mujeres se ven reflejadas en esta definición.

Félix López confirma, sin embargo, que a las féminas les afecta más la falta de deseo «porque son más exigentes a la hora de la relación sexual: Hay hombres a los que les bastan relaciones esporádicas, pero en la mujer es más raro; por lo general necesita sentir que hay algo más en la relación». Y aunque hay teorías que apuntan a que la pérdida del deseo está creciendo entre los hombres, López no puede asegurarlo, simplemente porque anteslos varones nunca reconocían el problema».

Pero las consultas están llenas de hombres. En la del sexopatólogo Marcos Villacorta son el 90% de los pacientes que dicen tener un problema de falta de libido. «La razón es obvia: un hombre que no tiene deseo no puede cumplir con su función sexual, mientras que una mujer sí». En esta tesitura, muchos de ellos se ven obligados a buscar rápido una solución, mientras que ellas pueden ir tirando, tanto si este tipo de arreglo es satisfactorio, como si se contentan con hacerlo como un favor. Además, hablan de que les da «pereza» ponerse a la tarea, aunque, una vez en el ajo, se lo pasan bien, es decir, que pueden llegar al orgasmo.

En lo que todos coinciden, aparte de que en esto no hay tasas de normalidad ni recetas comunes, es en que la pérdida del deseo sexual es un problema complejo por la cantidad de factores implicados. El neuropsiquiatra Javier Aizpiri considera la función sexual como «la más exquisita del funcionamiento cerebral». Los expertos hablan de:

-Genética.

-Estado neuro-fisiológico: enfermedades de todo tipo que conllevan pérdida de la libido, periodos vitales ligados a irregularidades hormonales como menopausia, andropausia y postparto, ingesta de medicamentos como anticonceptivos y antidepresivos…

-Educación: represión que crea un concepto negativo o de culpa.

-Agresiones en la infancia.

-Relación de pareja: roces, incomunicación, rutina…

-Disposiciones cognitivas que se dividen en rasgos de la personalidad y estados emocionales transitorios (depresión, ansiedad, cambios de ánimo, agotamiento).

-Estímulos sexuales que desencadenan el deseo (fantasías…)

Las fantasías son el elemento clave de muchas terapias para recuperar el deseo, pero lo cierto es que hay partidarios y detractores, en principio porque tampoco se conoce muy bien cómo funcionan. La Universidad de Granada está a punto de terminar un estudio con 615 personas de 14 a 43 años que concluye que la tercera parte de los casos de inhibición del deseo en los hombres «se explica por actitudes sexuales negativas y la presencia o ausencia de determinadas fantasías». En la mujer, este porcentaje se queda en el 18%, lo que, a juicio del investigador Sierra, significa que «el deseo femenino es mucho más complejo, además de que está más condicionado por los estados de ansiedad».

Fantasías

Los investigadores dividieron las fantasías en cuatro tipos: íntimas -relación con una pareja que puede ser la propia o no-, exploratorias -orgías o sexo con personas de otra raza-, impersonales -acordarse de una película porno-, y sadomasoquistas -que implican la violencia consentida-

Y los expertos encontraron que las íntimas son las preferidas.

Cuando una persona acude al especialista, lo primero es construir un historial que profundice en su relación de pareja -lo ideal es que ambos acudan a la consulta- y analice qué le gusta y qué no. Es fundamental saber si, aunque no se desee el coito, es posible llegar a él con caricias, tocamientos e intimidad. También aconsejan buscar otros centros de placer, e incluso cambiar de escenario (escapadas de fin de semana…) La comunicación es esencial, y mostrar los afectos, aunque sean sólo besos y abrazos. Lo que tampoco se puede hacer es forzarse a llevar el ritmo sexual anterior al problema. Y por supuesto, nunca debe ser una obligación. A los hombres quizás les venga bien la pornografía, pero las mujeres, por lo general, prefieren la literatura erótica. «Claro que para esto es necesario tener buen ánimo, porque si no tú me dirás cómo les pedimos que se pongan a leer novelitas… El camino del deseo puede ser complejo y no necesariamente exitoso», avisa Félix López.

Y, cómo no, también recomiendan las fantasías, que en el caso del varón, «con una sexualidad más simple, pueden dar mayor resultado». Pero expertos como el sexopatólogo Marcos Villacorta echan pestes de ellas como fórmula para recuperar el deseo. Cree que sería como «intentar curar a una anoréxica poniéndola delante una mesa llena de comida».

Villacorta sostiene que hay que buscar causas biológicas y eliminarlas: «Si una mujer tiene insuficiencia hormonal, puede haber depresión y pérdida de libido. Si un hombre sufre insuficiencia cardiaca, diabetes y agotamiento, pierde las ganas. Si se conoce la causa física, no es complicado el éxito».
Descargar


El 52% de los alumnos que hacen un curso del Centro de Formación Continua encuentra trabajo

GRANADA
El 52% de los alumnos que hacen un curso del Centro de Formación Continua encuentra trabajo
A. G. P./GRANADA
Imprimir noticiaImprimirEnviar noticiaEnviar

Publicidad

El Centro de Formación Continua de la Universidad de Granada (UGR) no ceja en su empeño de mejorar la calidad de los cursos complementarios, másteres y títulos propios que oferta durante todo el año a la comunidad universitaria y al resto de profesionales. El citado centro está inmerso en un proceso de evaluación y de realización de encuestas para saber qué deben mejorar y qué es lo que demanda la comunidad a la que se dirigen.

En la realización de una encuesta telefónica al pasar un año de hacer el curso, con la intención de conocer el nivel de inserción laboral de los alumnos, uno de los resultados más llamativos es que el 52% de los estudiantes encuestados ha encontrado trabajo relacionado directamente con el curso que hizo. Al margen de las encuestas que se pasan a los alumnos en los cursos, Formación Continua también ha encargado al Centro Andaluz de Prospectiva un estudio con el objetivo de conocer la demanda de formación de posgrado del sector productivo andaluz.

El Centro de Formación Continua ya ha recogido todos los datos y espera que los resultados se puedan publicar en 2007. La intención es, entre otras cosas, comprobar si se corresponde la oferta con las peticiones de las empresas andaluzas.
Descargar


Una experta afirma que una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas, convirtiéndose este acto en una patología

Una experta afirma que una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas, convirtiéndose este acto en una patología

Francisca López Torrecillas, experta en adicciones psicológicas, sostiene que el excesivo consumismo de estas fechas está asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral en el caso de los hombres y a una baja autoestima, en el caso de las mujeres

Granada, 28 de diciembre de 2006 (Europa Press)

Una de cada diez personas es adicta a las compras navideñas, convirtiéndose en un acto patológico tan grave como el alcoholismo, la drogadicción, la ludopatía o la adicción a Internet, según afirmó la profesora del departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada (UGR) y experta en adicciones psicológicas, Francisca López Torrecillas.

Esta experta sostiene que el excesivo consumismo de estas fechas está asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral en el caso de los hombres, así como a una baja autoestima, en el caso de las mujeres.

Se trata de personas que no reconocen su problema y que lo ocultan a sus familiares, alertó López Torrecillas, quien precisó que los hombres que gastan grandes cantidades de dinero en estas fechas lo hacen por desencanto laboral, porque no se encuentran satisfechos con su posición económica o no se consideran lo suficientemente valorados.

En el caso de las mujeres, esta profesora de la UGR apuntó que la adicción a las compras se debe un bajo nivel de autoestima, provocado muchas veces porque no se encuentran satisfechas con su cuerpo o a que sufren problemas de sobrepeso, que les causan depresión y ansiedad.

López Torrecillas señaló, además, que las mujeres enganchadas al consumismo navideño adquieren, fundamentalmente, adornos, productos de belleza y ropa, mientras que los hombres se decantan por aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches.

Además, advirtió de que este tipo de pacientes esconden las compras a los familiares, compra comida en exceso que luego se pudre y adquieren gran cantidad de productos con la excusa de regalarlos para después quedárselos.

Detrás de un hábito tan frecuente como las compras navideñas puede llegar a esconderse un serio problema psicológico, cuyas consecuencias a largo plazo en la salud mental de las personas son nefastas, prosigue la nota, que agrega que, si casi todos los españoles tienen adicción al consumismo exacerbado tan típico de estas fechas, lo cierto es que para uno de cada diez esta costumbre se convierte en un serio problema.

Esta experta en adicciones psicológicas sostuvo, igualmente, que la publicidad y el hecho de que las rebajas comiencen cada vez antes no ayudan en absoluto a solucionar el problema, más aún, engancha cada vez a más personas.

Mayor control por parte de las administraciones

Para López Torrecillas, las distintas administraciones deberían ejercer un mayor control sobre este ámbito, como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia, puesto que la publicidad tiene mucha culpa de esta adicción psicológica.

Así, señaló que, tras estas compras exageradas, en estas personas se despierta un fuerte sentimiento de culpabilidad y arrepentimiento, al comprobar el dinero que se han gastado, con frecuencia muy por encima de sus posibilidades.

Al igual que ocurre con otras adicciones similares, como la ludopatía, los adictos a las compras navideñas deben dirigirse a un especialista o a alguna asociación que pueda ayudarles a atajar este grave problema, concluyó.

Descargar


Enganchados a las compras navideñas

Enganchados a las compras navideñas
Por : Metro

“Esconden las compras a los familiares, compran comida en exceso que luego se pudre y adquieren gran cantidad de productos con la excusa de regalarlos para después quedárselos”. Así se comporta el 10% de la población en Navidad, según Francisca López Torrecillas, profesora del Departamento de Personalidad, Evaluación y Tratamiento Psicológico de la Universidad de Granada (UGR) y experta en adicciones psicológicas.
Las causas que cita son similares a las de cualquier comprador compulsivo: ansiedad, insatisfacción y soledad.
“Detrás de un hábito tan frecuente como las compras navideñas puede llegar a esconderse un serio problema psicológico, cuyas consecuencias a largo plazo en la salud mental de las personas son nefastas”, explica la psicóloga. “Tras la compra compulsiva, aparece un sentimiento de culpa”. Ese es el síntoma de que hay que acudir a un especialista.
Descargar


El abuso de las compras de Navidad puede ser tan grave como la droga

EN UNA DE CADA DIEZ PERSONAS Leer más
28 de Diciembre de 2006

El abuso de las compras de Navidad puede ser tan grave como la droga

GRANADA.- El abuso de las compras navideñas se convierte en una patología tan grave como el alcoholismo o la drogadicción en una de cada diez personas, fenómeno asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral, en el caso de los hombres, y de baja autoestima en el de las mujeres.

Entre los síntomas de esta adicción están adquirir productos con la excusa de regalarlos para quedárselos después, esconder las compras a los familiares o comprar comida en exceso que luego se pudre, según explicó ayer la profesora de la Universidad de Granada y experta en adicciones psicológicas Francisca López.

Las consecuencias de este problema psicológico a largo plazo pueden ser “nefastas” en la salud mental de las personas, ya que se trata de una adicción con efectos “similares a los del alcoholismo, la ludopatía o la dependencia de Internet”, según López.
Descargar


La tarjeta del Parque de las Ciencias

ESPECIALISTAS SEÑALAN QUE SE TRATA DE UNA PATOLOGIA
Una de cada 10 personas sufre compras navideñas compulsivas
Es un fenómeno asociado a problemas de depresión. Se considera una adicción con efectos similares a los del alcoholismo.

* enviar
* imprimir
* añade a tu blog
* Aumentar el tamaño del texto
* Reduce el tamaño del texto

28/12/2006 EFE

Numerosas personas de compras en una calle comercial esta Navidad.
Foto:CORDOBA

El abuso de las compras navideñas se convierte en una patología tan grave como el alcoholismo o la drogadicción en una de cada diez personas, fenómeno asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral, en el caso de los hombres, y de baja autoestima en el de las mujeres.

Entre los síntomas de esta adicción están adquirir productos con la excusa de regalarlos para quedárselos después, esconder las compras a los familiares o comprar comida en exceso que luego se pudre, según explicó ayer la profesora de la Universidad de Granada y experta en adicciones psicológicas Francisca López.

CONSECUENCIAS Las consecuencias de este problema psicológico a largo plazo pueden ser nefastas en la salud mental de las personas, ya que se trata de una adicción con efectos similares a los del alcoholismo, la ludopatía o la dependencia de Internet, según esta investigadora.

Además, advirtió de que la publicidad y el adelanto de las rebajas no ayudan en absoluto a solucionar el problema, más aún, enganchan cada vez a más personas, por lo que abogó por que las administraciones ejerzan un mayor control sobre este ámbito, como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia.

Los motivos de este comportamiento adictivo varían en función del sexo, ya que en los hombres suele corresponderse con casos de desencanto laboral, insatisfacción con su posición económica o sentimientos de infravaloración. Sin embargo, en las mujeres se relaciona habitualmente con un bajo nivel de autoestima o insatisfacción con su cuerpo.

ROPA Y BELLEZA Las mujeres que compran compulsivamente optan por adornos, prendas de ropa y productos de belleza o bien productos alimenticios, mientras que ellos se decantan por los aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches.

Tras unas compras exageradas aparece en estas personas un fuerte sentimiento de culpabilidad y arrepentimiento, ya que en muchas ocasiones el dinero gastado está muy por encima de las posibilidades del consumidor.

La especialista recomendó, en este sentido, que se acuda a especialistas o a alguna asociación que pueda ayudarles a atajar este grave problema, en muchos casos de importantes consecuencias.

Descargar


El `shopping´ navideño puede ser patológico

SOCIEDAD | Una compulsión relacionada con trastornos depresivos
El `shopping´ navideño puede ser patológico
Foto
Ampliar Compras. Casi nadie pasea ya sin bolsas por el Centro Histórico. gregorio torres
SERVICIOS
Enviar esta noticia Enviar esta página
Imprimir esta noticia Imprimir esta página
Contacte con nosotros Contactar
Anterior Volver Siguiente
Multimedia
Imágenes Imágenes

EFE. GRANADA.

El abuso de las compras navideñas se convierte en una patología tan grave como el alcoholismo o la drogadicción en una de cada diez personas, fenómeno asociado a problemas de depresión relacionados con el desencanto laboral, en el caso de los hombres, y de baja autoestima en el de las mujeres.
Entre los síntomas de esta adicción están adquirir productos con la excusa de regalarlos para quedárselos después, esconder las compras a los familiares o comprar comida en exceso que luego se pudre, según explicó ayer la profesora de la Universidad de Granada y experta en adicciones psicológicas Francisca López.
Las consecuencias de este problema psicológico a largo plazo pueden ser nefastas en la salud mental de las personas, ya que se trata de una adicción con efectos similares a los del alcoholismo, la ludopatía o la dependencia de internet, según esta investigadora, quien, además, advirtió de que la publicidad y el adelanto de las rebajas no ayudan en absoluto a solucionar el problema, más aún, enganchan cada vez a más personas. Por ello, abogó por que las administraciones ejerzan un mayor control sobre este ámbito, como ya han empezado a hacer con el tema de la anorexia.
Los motivos de este comportamiento adictivo varían en función del sexo, ya que en los hombres suele corresponderse con casos de desencanto laboral, insatisfacción con su posición económica o sentimientos de infravaloración, mientras que en las mujeres se relaciona con un bajo nivel de autoestima o insatisfacción con su cuerpo.
Las mujeres que compran compulsivamente optan por adornos, ropa y productos de belleza o bien productos alimenticios, y ellos se decantan por aparatos electrónicos, material deportivo y complementos para sus coches.
Tras unas compras exageradas aparece en estas personas un fuerte sentimiento de culpabilidad y arrepentimiento, ya que en muchas ocasiones el dinero gastado está muy por encima de las posibilidades del consumidor, por lo que recomendó que se acuda a especialistas o alguna asociación que pueda ayudarles a atajar este grave problema.

Descargar