Los creadores más jóvenes dan a la ciudad el arte que no se ve
De cómo acotar un cruasán reúne en el Palacio Condes de Gabia las propuestas plásticas de los alumnos de la Facultad de Bellas Artes
maría de la cruz
recorrido. La muestra De cómo acotar un cruasán muestra las diferentes propuestas plásticas de los creadores andaluces más jóvenes.
B. DURÁN
@ Envíe esta noticia a un amigo
granada. El arte más joven en Granada hace ya tiempo que dejó de ser una promesa para convertirse en una realidad que goza de un futuro prometedor. La Facultad de Bellas Artes, situada siempre a la cabeza de las vanguardias plásticas, muestra hasta el próximo 24 de septiembre en el Palacio de los Condes de Gabia De cómo acotar un cruasán, una exposición que reúne los trabajos de los alumnos de último curso como exponentes del nuevo arte que, poco a poco, se está haciendo con un espacio en el amplio panorama artístico contemporáneo.
Pinturas, esculturas, fotografías, instalaciones y videocreaciones conviven entre las propuestas creativas de unos jóvenes autores con mucho por decir en el arte. La Facultad de Bellas Artes produce mucho arte que habitualmente no se ve y del que la ciudad no puede disfrutar abiertamente. La exposición que cada año exhibe el Palacio de los Condes de Gabia se está consolidando como una de las opciones más recurrentes para dar salida a los artistas más jóvenes de Granada y de toda Andalucía, explicó Víctor Borrego, profesor de Escultura y vicedecano de la Facultad de Bellas Artes de la UGR.
La selección de los trabajos responde a una forma lógica de mostrar las distintas facetas de un arte en ebullición y con múltiples rostros que parten de la realidad pero van evolucionando hacia diferentes caminos. Así, la pintura figurativa de escenarios urbanos de Irene Sánchez Molero puede llegar a dialogar con la serie La venganza de Goliath de Iván Izquierdo, las propuestas de pinceladas de color y cinta adhesiva de Alan Sastre o los esbozos de dibujos con que Alberto Marcos Barbado trata de captar aquellas Imágenes de lo humano.
El tratamiento de la realidad a través de las fotografías se convierte en otra de las grandes constantes en De cómo acotar un cruasán, ya sea a través del juego irónico con los autorretratos –Guadalupe Sánchez González–, mediante una serie de retratos –Pedro Chacón, J. Diego Fajardo y David Vinagre– o desconstruyendo la realidad para convertirla en un todo abstracto –Virginia Sánchez y Alegría Castillo–.
El proyecto plástico de Relax creado por Ana Belén Rivero Fernández y la propuesta de Luis Alhama, Fátima Montero y Leticia Vázquez por crear una Naturaleza geométrica se completan con el estudio audiovisual del individuo y su entorno que realizan Rosana Cámara y Violeta Iriberri en sus proyectos y el inevitable viaje hacia la autodestrucción de los Soldados de Helí García.