Los alumnos de Zoología Marina de la UGR se sumergen en el mar para realizar sus prácticas

Los alumnos de Zoología Marina de la UGR se sumergen en el mar para realizar sus prácticas

El próximo día 27 de marzo comienzan en Almuñécar las prácticas de “Aula en el mar”, un proyecto único en España que coordina el profesor Luis Sánchez Tocino, del departamento de Biología Animal y Ecología de la UGR.

Los alumnos de Zoología Marina de la UGR comienzan el próximo día 27 de marzo sus prácticas en el “Aula en el mar”, un proyecto único en España sobre aprendizaje de zoología marina.

Situados a pie de playa, en el mar de Alborán, estos laboratorios naturales cuentan con profesores que a su vez son titulados en buceo deportivo, a fin de participar en las actividades que exigen natación e inmersión, con las que se muestra a los estudiantes la rica fauna de la costa granadina.

Se trata, en realidad, de un proyecto de innovación docente, que coordina el profesor Luis Sánchez Tocino, del departamento de Biología Animal y Ecología de la UGR, en el que destacan las prácticas de litoral en la docencia de zoología marina. Con este programa se planifican las clases de forma que los alumnos realizan algunas de las prácticas de la asignatura sumergidos en el mar, en pequeñas inmersiones.

Para que los alumnos de la asignatura de Zoología Marina conozcan en directo los aspectos biológicos y ecológicos de una parte de la fauna representada en el ecosistema marino, con un marco de estudio en la costa de Granada, la UGR desarrolla su proyecto de innovación docente utilizando como recursos determinadas prácticas en las que los alumnos, provistos del equipo necesario, se introducen en el medio marino para consolidar los conocimientos adquiridos previamente en el aula o en el laboratorio.

Con este proyecto, único en España, los estudiantes tienen acceso, primero en laboratorio -con la observación de muestras vivas que son recogidas periódicamente y mantenidas en un acuario refrigerado- y luego en directo, en el mar, donde se establecen grupos -cuatro alumnos con un profesor- para realizar pequeñas inmersiones para observar la vida en el mar. En este caso se llevan a cabo en el mar de Alborán, en las costas de Almuñécar, donde la fauna es de una riqueza singular.

Profesores y buceadores

Los profesores que imparten la asignatura poseen la titulación de buceo deportivo, al igual que una parte de los alumnos, aunque para realizar estas prácticas los únicos requisitos necesarios que deben cumplir los estudiantes es saber nadar y estar interesados en conocer los aspectos biológicos de los principales integrantes de las comunidades submarinas de nuestro litoral, teniendo en cuenta el papel de cada uno de ellos dentro de su comunidad y de la cadena trófica de la que forman parte. Así, a pie de playa y dentro del agua, se sitúan los laboratorios naturales que constituyen un aula en el mar.

En este proyecto participan, junto al coordinador Luis Sánchez Tocino, los también profesores de la UGR Rafael Morales Baquero (Ecología), Pedro M. Sánchez Castillo (Biología Vegetal) y Antonio Checa González (Paleontología), quienes afirman que, posiblemente, la dificultad que plantea el medio marino para su estudio haya sido la causa de que, pese a nuestra cercanía a la costa y la ya larga historia de la Universidad de Granada, no se hayan puesto con anterioridad asignaturas relacionadas con la Biología Marina , aunque, en los últimos años en que se impartió la asignatura de Invertebrados Artrópodos, en el antiguo plan de estudios, se realizaba una práctica de litoral a final de curso. Ésta consistía en observar desde la orilla las especies más características de las comunidades del supra y medio litoral y, en superficie, provistos de gafas y aletas, las de los primeros metros del infralitoral. Además, siempre se contaba con algún buceador que recogía ejemplares de distintos taxones que habitan en aguas más profundas y que, tras enseñárselos a los alumnos en bateas con agua de mar preparada para tal fin, eran devueltos al mar.

Inmersiones

Con las prácticas de litoral, los alumnos se introducen en el medio con traje de neopreno y equipo ligero. Es decir: gafas, tubo, escarpines y aletas. Así, observan la fauna desde la superficie del agua o realizando pequeñas inmersiones en apnea. Sin embargo, los alumnos que previamente al comienzo de la asignatura -asignatura de segundo cuatrimestre- o durante el desarrollo de la misma, realizan un curso de buceo –se ha establecido un concierto con un Centro de Buceo, en el que el alumno puede realizar un curso y obtener su titulación de buceador deportivo, que les prepara y habilita para bucear con escafandra autónoma– que a la postre les permite observar la fauna marina que habita en comunidades más profundas.

Los profesores, que realizan muestreos de forma semanal, compaginan la obtención de datos para su investigación con la recogida de material vivo para las prácticas de la asignatura, e igualmente realizan vídeos y fotografías que se utilizan en guiones de prácticas y en exposiciones en clase.
Descargar


Infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico, principales causas de muerte del siglo XX

Infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico, principales causas de muerte del siglo XX

Las infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico (debidas, sobre todo, a tuberculosis y bronquitis) fueron las principales causas de fallecimiento en el siglo XX en Granada capital, donde fallecieron más casados que solteros principalmente entre las 12,00 y las 18,00 horas. Seguir leyendo el arículo

Se trata de algunas de las conclusiones de una tesis doctoral realizada en el Laboratorio de Antropología de la Universidad de Granada (UGR), que ha analizado las defunciones producidas en la ciudad y su causas más frecuentes, relacionándolas con variables como el sexo, la edad, la profesión o el estado civil.

Para la elaboración de la investigación se han tomado como muestra los fallecimientos ocurridos en Granada capital en los años 1900, 1925, 1941, 1955, 1965 y 1975, utilizando como fuente las inscripciones de defunción del Registro Civil, informó la UGR en una nota.

La tesis \’Las defunciones en Granada y sus causas. Años 1900, 1925, 1941, 1955,1965 y 1975\’, realizada por Rosa María Rando Acuña, y dirigida por el profesor Miguel Botella López, ha revelado además que el mayor año de defunciones en Granada en el siglo XX fue 1941, cuando fallecieron en la ciudad 2.705 personas. Por el contrario, 1955 fue el año con menos muertes, con «sólo» 1.261.

El estudio realizado en la UGR ha desvelado que los fallecimientos también están relacionados con los barrios de la ciudad: fallecen más personas en El Sagrario, seguido de El Campillo y, por último, El Salvador.

En función del estado civil, la investigación concluye que mueren más casados que solteros, viudos o separados en total, y que los casados y viudos fallecen más por alteraciones del aparato cardiovascular, mientras que los solteros lo hacen en su mayoría por infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico.

La muerte también entiende de temperaturas. En el siglo XX, el mayor número de defunciones en Granada se produjo en los meses de temperaturas más bajas. El estudio también ha demostrado que es más frecuente morirse entre las 12,00 y las 18,00 horas, y después de 6,00 a 12,00 horas. La gente se muere menos por la noche, de 00,00 a 6,00 horas, y de 18,00 a 00,00 horas. El lugar más frecuente para morir es, según esta investigación, el propio domicilio.

Para realizar esta trabajo, los investigadores subdividieron los datos obtenidos del Registro Civil en otras dos muestras: una de mayores de un año de edad y otra de menores de un año de edad. En ambos grupos el porcentaje de varones fallecidos es superior al de mujeres. Además, por meses mueren más menores de un año de julio a septiembre y de enero a marzo, mientras que en el caso de los mayores de un año, mueren más personas de enero a marzo y de octubre a diciembre.
Descargar


Diseñan moléculas con mayor capacidad de exterminio ante células cancerosas

Diseñan moléculas con mayor capacidad de exterminio ante células cancerosas

Investigadores del Departamento de Quí­mica Farmacéutica de la Universidad de Granada, dirigidos por Joaquí­n Campos Rosa, han obtenido un nuevo tipo de moléculas que han demostrado en cultivos in vitro una alta efectividad ante células cancerosas y, al mismo tiempo, una muy baja toxicidad ante las células normales del organismo. Este importante descubrimiento en el campo de la terapia contra el cáncer, ha sido el resultado de un Proyecto de Excelencia de la Consejerí­a de Innovación, Ciencia y Empresa en su primera convocatoria, incentivado con 102.400 euros

El hallazgo, realizado mediante sustancias naturales nunca antes utilizadas como tratamiento frente a tumores, se ha obtenido al modificar la estructura quí­mica de un fármaco muy usado frente al cáncer, el 5-fluoruracilo , uno de los primeros fármacos utilizados en oncologí­a , por otra sustancia parecida denominada uracilo . El uracilo es una sustancia presente de forma natural en nuestro organismo, que forma parte del ARN de las células. Tras los buenos resultados obtenidos con el uracilo, éste fue sustituido por otras moléculas del mismo tipo, pero más efectivas aún (guanina y citosina).

A partir de éstas se han obtenido las nuevas moléculas que presentan como principal caracterí­stica un mayor í­ndice terapéutico , que es el cociente entre la afección sobre células cancerosas y la correspondiente sobre células sanas. En concreto, su toxicidad para el organismo es diez veces menor a la del 5-fluoruracilo.

La efectividad de las moléculas obtenidas, se relaciona con una alta capacidad de las mismas para inducir la apoptosis en las células cancerosas. La apostosis es aquella función del organismo que se encarga de programar la muerte de las células más viejas, que ya no tienen utilidad. Al igual que nacen nuevas células de forma constante en nuestros tejidos, deben de ir muriendo aquellas que son más viejas y ya no realizan adecuadamente su función. Por ello, la apoptosis es un mecanismo de defensa del organismo, pues también se produce sobre aquellas células que suponen una amenaza por fallos en su actividad normal.

Cuando la capacidad de una célula para realizar la apoptosis se encuentra dañada (por ejemplo, debido a una mutación) o si el inicio de la apoptosis ha sido bloqueado (por un virus), la célula dañada puede continuar dividiéndose sin mayor restricción, dando lugar a un tumor que puede ser de carácter canceroso.

Estos buenos resultados obtenidos para las moléculas diseñadas por este grupo de la UGR, se explican por la capacidad de éstas para producir la muerte celular de las células vinculadas con el cáncer. En este sentido, se ha abierto un nuevo horizonte de investigación muy importante, relacionado con la identificación de los mecanismos moleculares a través de los que se induce la apoptosis.

De ahí­ que de ahora en adelante, estos investigadores centren su trabajo en genómica, con objeto de profundizar en los mecanismos de actuación de estas moléculas en su interacción con genes pro-apoptóticos, ya que presentan un enorme potencial para tener aplicación como fármaco.
Descargar


La mayorí­a de las muertes producidas en Granada durante el siglo XX tuvieron lugar entre las 12 y las 18 horas

La mayorí­a de las muertes producidas en Granada durante el siglo XX tuvieron lugar entre las 12 y las 18 horas

Una tesis doctoral realizada en el Laboratorio de Antropologí­a de la Universidad de Granada ha analizado las defunciones producidas en la ciudad y sus causas más frecuentes, relacionándolas con variables como el sexo, la edad, la profesión o el estado civil. Las infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico (debidas, sobre todo, a tuberculosis y bronquitis) fueron las principales causas de fallecimiento en el siglo XX

¿Cuáles han sido las causas de muerte más frecuentes en Granada capital en el siglo XX? í‰sta es la pregunta de la que ha partido una investigación realizada en el Laboratorio de Antropologí­a de la Universidad de Granada , que ha tomado como muestra los fallecimientos ocurridos en Granada capital en los años 1900, 1925, 1941, 1955, 1965 y 1975, utilizando como fuente las inscripciones de defunción del Registro Civil. Este trabajo, pionero en la provincia, ha revelado datos tan curiosos como que las infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico (debidas, sobre todo, a tuberculosis y bronquitis) fueron las principales causas de fallecimiento en el siglo XX, o que las horas más frecuentes para morirse han sido entre las 12 y las 18 horas.
La tesis doctoral «Las defunciones en Granada y sus causas. Años 1900, 1925, 1941, 1955,1965 y 1975» ha sido realizada por Rosa M ª Rando Acuña, y dirigida por el profesor Miguel Botella López. Este trabajo ha servido para relacionar las causas de muerte más frecuentes e importantes en Granada capital con otros factores como el sexo, la edad, la profesión, el estado civil.
La muerte va por barrios
Así­, este trabajo ha revelado que el mayor año de defunciones en Granada en el siglo XX fue 1941, cuando fallecieron en la ciudad 2.705 personas. Por el contrario, 1955 fue el año con menos muertes, con «sólo» 1.261. El estudio realizado en la UGR ha revelado que los fallecimientos también están relacionados con los barrios de la ciudad: fallecen más personas en El Sagrario, seguido de El Campillo y, por último, El Salvador.
En función del estado civil, la investigación revela que mueren más casados que solteros, viudos o separados en total, y que los casados y viudos fallecen más por alteraciones del aparato cardiovascular, mientras que los solteros lo hacen en su mayorí­a por infecciones del aparato respiratorio y otorrinolaringológico.
La muerte también entiende de temperaturas. En el siglo XX, el mayor número de defunciones en Granada se produjo en los meses de temperaturas más bajas. El estudio también ha demostrado que es más frecuente morirse entre las 12 y las 18 horas, y después de 6 a 12 horas. La gente se muere menos por la noche, de 0 a 6 horas, y de 18 a 24 horas. El lugar más frecuente para morir es, según esta investigación, el propio domicilio.
Para realizar este trabajo, los investigadores subdividieron los datos obtenidos del Registro Civil en otras dos muestras: una de mayores de un año de edad y otra de menores de un año de edad. En ambos grupos el porcentaje de varones fallecidos es superior al de mujeres. Además, por meses mueren más menores de un año de julio a septiembre y de enero a marzo, mientras que en el caso de los mayores de un año, mueren más personas de enero a marzo y de octubre a diciembre.
Referencia: Rosa M ª Rando Acuña y Miguel Botella López. Laboratorio de Antropologí­a de la Universidad de Granada . Tfno: 958 24 33 55.
Correo-e: rosayjulio07@hotmail.com
Descargar


Público

Pág. 27: El paro contra Bolonia logra un apoyo mínimo
Pág. 44: Cine / Raoul Walsh
Descargar


El País

Pág 37: Miles de alumnos \»anti-Bolonia\» exigen en la calle un referéndum
Pág. 41: Fallados los premios nacionales de Investigación
Descargar


ABC

Pág. 44: Miles de alumnos anti-Bolonia vuelven a la calle para exigir interlocución directa con Garmendia
Descargar


20 Minutos

Portada: La mayor parte de los granadinos muere en invierno, en casa y entre las 12 y 18 h
Pág. 2: Muerte más común: hombre casado y con problemas de corazón
Pág. 20: \»Un día en Mongolia\»
Descargar


El Mundo

Pág. 18: Miles de \»anti Bolonia\» exigen un debate público a Garmendia
Descargar


Ideal

Pág. 12: La mayoría de las muertes en Granada se producen al mediodía y en casados|13.000 documentos y ocho años de trabajo|Los estudiantes salen de nuevo a la calle a decir no a Bolonia|América Latina y Europa estrechan lazos a través de la Universidad
Pág. 53: Excelente acogida del curso de la UGR \»Toros, cultura y sociedad\»
Pág. 59: El mercado de las Bellas Artes
Descargar


Granada Hoy

Portada: Los \»antibolonia\» se echan a la calle en toda España
Pág. 11: Los estudiantes vuelven a decir no al Plan Bolonia
Pág. 12: Cuándo, cómo, dónde y por qué se moría la gente en Granada
Pág. 21: \»Gentleman Jim\» en el Cine Club Universitario
Descargar