Edición especial Universidades Grupo Coimbra: Univ. de Genève (Suiza), Univ. Tartu Viljandi (Estonia), Univ. de Salamanca (España), «A. Ioan Cuza» Univ. (Rumanía), F. Shiller Univ. Jena (Alemania), Univ. of Bristol (Reino Unido) y Univ. de Granada. Organiza: Secretariado de Extensión Universitaria. Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras. Fecha: 12 al 19 de noviembre de 2010.
La Universidad nos devuelve a los ciudadanos un espacio simbólico que vuelve a ser real. Gracias a la tenacidad de la directora del Secretariado de Extensión Universitaria, Mª José Sánchez Montes, y equipo -Decanato, Aula de Teatro, Vicerrectorado, Técnicos, Administrativos, estudiantes…- el III Festival Internacional de Teatro Universitario de Granada coincide con la recuperación de uno de los espacios escénicos emblemáticos de la ciudad: el Aula Magna de la Facultad de Filosofía y Letras. La Universidad, la ciudad, gana un espacio real (de exhibición y una programación) a la vez que retoma una tradición teatral que había quedado relegada a la memoria (imposible volver a poner un pie en esta sala sin rememorar el Festival Internacional de Teatro de Granada, el Centro Dramático Elvira o la nómina de obras, talleres, compañías, personas vinculadas al teatro que se dieron cita ahí).
Esa rica y valiosa historia interrumpida se retoma de golpe al abrir sala, la noche del 12 de noviembre -sin los grandes aspavientos de lo inaugural, con la determinación y brillantez del trabajo concienzudo- ofreciéndonos siete espectáculos cuyo denominador común es la dramaturgia de fuerte impacto visual, la amplia diversidad estética desde la que se articula cada pieza y, por supuesto, la calidad artística.
Cada día de Festival el público llena la sala y cada pieza resulta atractiva en un lugar singular. El recurso al guiñol suizo, las técnicas brechtianas incrustadas en el teatro de texto salmantino. El drama sentimental subido a escena con delicada contención gestual y férrea complicidad interpretativa entre la pareja de actores rumanos dejando constancia de la elocuencia de los lenguajes espectaculares (movimiento, gesto, luz, sonido, atrezzo…) al margen del idioma. Con Heavenly Story, el grupo estonio deleitó armando una sola partitura poética a partir de materiales tan diversos como los relatos y la música (interpretada en directo) del folklore popular, el teatro de sombras, el claqué o la música electrónica. El peso pesado que el Reino Unido es -teatralmente hablando- a nivel internacional dejándose ver, no defraudó, en el montaje Dream On!, pasados Shakespeare, junto a Facebook y el Messenger Chat del pastiche textual por Pina Baus. Mención aparte merece el estreno del grupo anfitrión de la UGR, Zwölf (Doce). Valiente creación colectiva, dirigida por Sara Molina, subiendo a escena un artefacto artístico -y todo un proceso creativo- dispuesto para ofrecer y compartir con el espectador la difícil e inaplazable pregunta de ¿Qué debe ser un espectáculo hoy? Convoca una suerte de extrañamiento lúcido, no exento de belleza ni humor. Lo simbólico y lo real se dan la mano en el ejercicio de esa pregunta, para ello se abre sala.