Desde el pasado mes de julio, todos los estratos que conforman el amplio espectro docente del sistema educativo valenciano llevan sufriendo un recorte tras otro por parte de la Generalitat: profesores de IES, Primaria o Formación Profesional cuentan con menos plazas y partidas presupuestarias más bajas.

Sin embargo, ninguna mira ha apuntado a los funcionarios que imparten clases en las universidades públicas de la C. Valenciana. De hecho la ley de financiación de Universidades promulgada por el Consell -con un capítulo de 7.000 millones de euros a gastar en siete años- ha sido una de las pocas novedades positivas del año.

Ahora, un reciente estudio coordinado por seis profesores de la Universidad de Granada sitúa a la C. Valenciana como la tercera autonomía con mayor gasto por profesor universitario funcionario y titular, abarcando un total de 234.022 euros por docente.

El estudio, titulado «Relación entre productividad y eficiencia en investigación con la financiación de las comunidades autónomas españolas», defiende que el dispendio por maestro de la Generalitat supera en 25.892 euros a la media nacional (208.130 euros). Parece que la crisis no se nota en la esfera superior de la educación valenciana.

El escalafón nacional lo lideran Castilla La-Mancha (323.022 euros) y La Rioja (236.429 ?).Por el contrario, las últimas posiciones de la relación están protagonizadas por Aragón (171.699 euros), Canarias (171.463 euros) y Asturias (154.967 euros).

El informe también lanza algunas de las cifras globales que ilustran el compromiso de las administraciones con el sistema público de universidades: en España contamos con 1,7 centros por cada millón de habitantes y una institución por cada 48,500 jóvenes en edad universitaria. A su vez, centra su enfoque en el «profundo cambio» experimentado por la educación española en los años 90, con la transferencia de la gestión de las universidades a las comunidades autónomas.

Los autores exponen que «en el nuevo contexto competitivo que surge con el Espacio Europeo de Educación Superior (EEES), el mayor desafío es conseguir la máxima eficiencia posible con los recursos existentes».

Productividad y eficiencia
El cálculo de la inversión por profesor lleva a los autores a establecer un ránking de productividad y eficiencia. En ambos casos el sistema universitario valenciano sale bastante bien parado: somos los segundos en productividad (76,01 puntos) y los cuartos en eficiencia (55,48); situándonos terceros en resultados globales. En el primero de los campos sólo nos supera Cataluña. A su vez, los centros catalanes, madrileños y andaluces son más eficientes que los valencianos.

Para relativizar ambos segmentos los autores del trabajo se han basado en el «ranking en investigación de las universidades públicas españolas» del año 2009. El texto se basa en siete ejes diferentes: artículos ISI, tramos de investigación, proyectos I+D, tesis doctorales, becas de formación del profesorado, doctorados con mención de calidad y patentes.

Los artículos ISI hacen referencia a la proporción de textos publicados en los medios escritos que integran el índice Institut for Scientific Information por profesores titulares. La Miguel Hernández es la segunda a nivel nacional en este aspecto, llegando al cuarto lugar en tramos de investigación. En proyectos I+D, la Miguel Hernández vuelve a ser el centro valenciano en mejor posición, ocupando el octavo lugar.

Si hablamos de tesis doctorales, la UPV es la mejor institución valenciana (6º escalón). La universitat de València (UV) se sitúa décima en en ranking de Becas de Formación de Profesorado (FPU). Los doctorados con mención de calidad son una laguna para el sistema levantino, ya que la UPV solamente logra entrar en la 16ª posición.

La UPV encabeza el listado universitario con más patentes

Si por algo se ha caracterizado el sistema público universitario de la Comunitat Valenciana en los últimos años ha sido por el lanzamiento de patentes. Tanto en el informe sobre productividad y eficiencia como en el ranking en investigación -ambos llevados a cabo en Granada- las instituciones valencianas lideran esta esfera educativa. De los cinco centros de nuestra autonomía -Alicante, Jaume I, Miguel Hernández, Politécnica de Valencia (UPV) y UV- es la UPV la que se lleva la palma. De esta forma, el centro ubicado en la capital del Turia lideró el escalafón nacional, por delante de La Rioja y la Politécnica de Cataluña. La Universidad Miguel Hernández se sitúa en cuarto lugar, la universidad de Alicante en el 17º puesto, la de Valencia en el 38º y la Jaume I en el 41. Los registros globales sitúan a la C. Valenciana como la primera.

El personal no funcionario pide un convenio colectivo
Las buenas noticias que parecen envolver al docente universitario funcionario de la C. Valenciana contrastan con la dinámica que vivensus compañeros «independientes». De hecho, los profesores contratados -no funcionarios- de las instituciones valencianas son, junto los que trabajan en Asturias, los únicos del estado que no cuentan con un documento que regule sus condiciones de trabajo de forma genérica. La falta de un convenio colectivo para el personal docente e investigador (PDI laboral) es una de las peticiones que causa que los sindicatos hayan demandado de forma reincidente la creación de una mesa sectorial de universidades en la C. Valenciana. Susana Díez, secretaria de Universidades de FETE-UGT, comentó que «hablamos de un instrumento de negociación y diálogo necesario para tratar con la administración». La problemática afecta a cerca de 5.500 personas, entre personal docente y administrativo. Díez recordó que «los sindicatos tenemos el tema denunciado en el Síndic de Greuges a la espera de respuesta». El futuro convenio deberá regular la jornada de trabajo, las figuras contractuales y las retribuciones, «las más bajas del Estado». Por ello, la portavoz declaró que «la existencia del convenio es clave, pero no hay interés institucional para crearlo».

Descargar