– Andalucía lidera por vez primera el ranking nacional de spin-off.
En cinco años, el panorama andaluz de empresas de base tecnológica creadas en el seno del mundo universitario ha experimentado un giro de 360 grados. Si en el año 2002 Andalucía contaba con una única spin-off , en 2007 la comunidad puede presumir de haberse situado en cabeza de España en la creación de empresas ligadas al ámbito universitario con un total de 67 firmas. Así, si hace un lustro, Andalucía sólo aportaba el 1,5 por ciento de estas empresas existentes en España, en 2007 el porcentaje se ha elevado al 27 por ciento del total, una cifra que aúpa a la comunidad a un envidiable primer puesto, adelantando por vez primera a Cataluña, según se desprende de los datos del último Informe de la Fundación Cotec y del balance anual que elabora la Red Oficinas de Transferencia Tecnológica de las Universidades.
En la actualidad, todas las universidades andaluzas cuentan con alguna spin-off. Entre ellas, destaca sobre todo la de Málaga, con 17 jóvenes empresas de base tecnológica, seguida por las universidades de Almería, Granada y Sevilla, con 12 firmas cada una.
Por sectores, las materias que lideran la creación de estas empresas en la región son las de Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (29 empresas), Ciencias de la Vida, Salud y Biotecnología (20) y el sector Energía y Medio Ambiente (6 empresas). Pero entre ellas también hay spin-off ligadas al desarrollo del sector aeroespacial, la localización de personas con problemas de edad o salud, la elaboración de cartografía aérea y los servicios de traducción.
Un buen ejemplo de la velocidad de crucero que ha marcado la evolución de este tipo de empresas se encuentra en el auge que experimentó este campo el pasado año en el marco de la Universidad de Sevilla. A lo largo de 2006, a las cinco spin-off que ya existían en la Universidad -Green-power Tecnologies, Yflow, Ingeniatrics, Indysis y Biomorphic- se han sumado siete nuevas firmas: Geographica Studio, que diseña mapas con información para empresas como la que gestionan los autobuses urbanos; Icinetic, dedicada al desarrollo de software de forma semiautomática; Prextor, que genera burbujas de agua y facilita el aprovechamiento de la energía proveniente de las olas; Tecfarmade, una de las pocas de España que liga la investigación farmacéutica a la Universidad; Teams, que ya tiene contratos con Airbus y CASA; Vigiatech, que diseña sistemas de seguimiento de objetos e individuos y Visión Sistemas de Localización, que comercializará a finales de mes dispositivos propios de búsqueda de personas dependientes.
Buena parte del cambio experimentado en Andalucía en la creación de empresas universitarias radica en el cambio de mentalidad de los investigadores de las facultades y escuelas andaluzas, que se han atrevido a dar el salto de la Universidad a la empresa, sin por ello descuidar su trabajo en las aulas. Un salto que a comienzos de la década se hacía casi a ciegas, pero que desde hace tres años cuenta con una tupida red tejida por el programa Campus de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta.
Con un presupuesto que supera los cinco millones de euros, la iniciativa Campus nació en 2004 con el objetivo de fomentar la creación de spin-off universitarias. Desde el pasado año, el 100 por ciento de las spin-off andaluzas se acogieron a un programa que toma el dinero a través de Invecaria, el fondo de capital riesgo de la Consejería de Innovación. La agilización de los trámites para conseguir estos incentivos de la Junta, así como la implicación en el desarrollo de los proyectos de las Oficinas de Transferencia Tecnológica de las Universidades han ayudado a popularizar este programa entre los investigadores.