Crónica sobre el encuentro internacional en Granada
Tres días de encuentro antagonista
Revista Laberinto
En Granada los días 26, 27 y 28 de abril se ha celebrado el I Encuentro Internacional por una Izquierda Antagonista.
El encuentro tuvo lugar gracias a la organización del Secretariado de Extensión Universitaria de la Universidad de Granada, habiendo sido promovido por la Revista Laberinto y la Asociación Universitaria por el desarrollo de la Filosofía de la Praxis, y contando con la colaboración del Departamento de Economía Aplicada de la Universidad de Málaga. Un reto que nos propusimos hace tiempo dentro de la estrategia de la propia revista de ir más allá que la pura publicación de artículos. Queremos crear lazos, vernos, pensar, escuchar y debatir entre todos aquellos que reivindicamos el pensamiento científico de clase como el necesario para la transformación de esta sociedad a una sociedad mejor.
El Aula Magna de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociología se abarrotó desde el primer día para oir las intervenciones y los debates en los que participaron James Petras (Universidad de Binghamton, NY), Luciano Vasapollo (Universidad La Sapienza de Roma), Francois Chesnais (Universidad París XIII), Diego Guerrero (Universidad Complutense de Madrid) y Juan Carlos Rodríguez (Universidad de Granada).
El primer día del Encuentro, lunes, abrió la sesión la Secretaria de Extensión Universitaria de la U. de Granada, la doctora Ángela Olalla. A continuación intervinieron José Juan Martínez, representante de la Asociación para el desarrollo de la Filosofía de la Praxis, Francisco Fajardo en representación de la Universidad de Málaga y de la Revista Laberinto, para dar paso a las ponencias de James Petras y Luciano Vasapollo.
El profesor Petras articuló su intervención sobre dos ejes: por una parte la pertinencia del concepto de imperialismo para pensar la situación actual mundial frente a otras temáticas como centro-periferia, sistema-márgenes, hegemonía, etc. y por otro, un análisis de algunas de las regiones del planeta donde se producen situaciones de guerra abierta, de retroceso político y económico y otras donde están abiertos procesos que se podrían denominar prerrevolucionarios. La detallada exposición de Petras no obvió entrar en comentarios muy agudos sobre las relaciones de poder entre el equipo actual que sostiene al presidente Bush, la política agresiva de grupos de influencia sionista en los USA y la proyección exterior en el conflicto de Oriente Próximo. Tanto en su intervención como en el posterior debate, Petras demostró además estar al día y perfectamente informado de la situación española.
Luciano Vasapollo centró su intervención sobre las formas de desestructuración actual propiciadas por el capitalismo posfordista y las posibilidades de resistencia y recomposición política de las clases trabajadoras. El vivo debate que suscitó incidió sobre las diferencias y similitudes entre la situación española y la italiana con especial incidencia en la cuestión del empleo precario.
El martes la participación de Chesnais y Guerrero provocó un aluvión de preguntas sobre las virtualidades de impulsar una Europa Unida de Estados Socialistas que propuso Chesnais. La participación de los asistentes fue tan activa que llegado el momento de terminar muchas manos quedaban pendientes de hablar. Diego Guerrero destruyó una serie de lugares comunes y burdos argumentos de las ideologías antimarxistas y puso de relieve cuestiones tan importantes como la antítesis entre empresa y democracia, la mano invisible del mercado y la mano visible del Estado, la interpretación del fenómeno de la extensión de la salarización, la ley del valor y la competencia. Hubo también un intercambio de objeciones entre Chesnais y Guerrero que hizo más enriquecedor el debate.
El miércoles 28, antes de la mesa redonda final, Juan Carlos Rodríguez abordó algunos puntos e implicaciones de su teoría de la producción ideológica siguiendo el hilo conductor del yo, y del yo soy, tras analizar la subjetivación en el esclavismo, en el feudalismo y en el capitalismo. Llamaron mucho la atención la diferencia que planteó entre afiliación y filiación (ésta nos encadena a identidades heredadas -por ejemplo, religiosas o nacionalistas-), aquella nos conduce a la asunción de nuestra propia identidad como conquista liberadora en lucha con la ideología que nos domina, y la propuesta de ser bilingüe en nuestra propia lengua, puesto que el lenguaje no es algo neutro sino que es algo que no nos pertenece y siempre está determinado por aquellos que detentan los distintos poderes en las sociedades de clases.
Unos días magníficos en Granada donde pudimos escuchar voces antagonistas a la ideología del capital y tuvimos la ocasión de compartir y conocernos aquellos que creemos que las clases trabajadoras necesitan de una política propia e independiente, insumisa a las clases dominantes y su ideología. Gracias al compromiso de la revista Laberinto podremos leer las intervenciones realizadas en un próximo número que editará.
El éxito de la convocatoria animó a la mesa y los asistentes a perseverar en la preparación para el año próximo de otro encuentro por una izquierda antagonista. Dicho esto, nos despedimos hasta la próxima.