Los príncipes inauguran el Parque de las Ciencias de Granada
Las nuevas instalaciones del Parque de las Ciencias de Granada han abierto oficialmente sus puertas en un acto, presidido por los Príncipes de España y al que no han faltado numerosas autoridades políticas y científicas del país.
Todos los presentes se mostraron sorprendidos por el diseño arquitectónico del Macroscopio, un gigantesco edificio de casi 25.000 metros cuadrados que quiere ser una oferta turística más en una ciudad que recibe millones de visitantes cada año.
«El Parque de las Ciencias quiere convertirse en un museo de referencia en España y en Europa y su crecimiento es fruto de una necesidad real, de una demanda de la sociedad», señalaba la presidenta del Consorcio, y consejera de Educación andaluza, Teresa Jiménez, en el acto.
Durante el recorrido por los cinco nuevos pabellones del Macroscopio, tanto Don Felipe como Doña Letizia no dejaron de interactuar con los artefactos que se encontraron a su paso, a la vez que exclamaban «qué bonito» ante algunas de las piezas expuestas, según algunos testigos.
Se entretuvieron con un robot que, desde el mismo \’hall\’ de entrada, recibe a los visitantes recitando poesías de Lorca o textos de Shakespeare; practicaron con un \’agujero negro\’ del Universo y conocieron el taller de óptica que un equipo de la Universidad de Granada tiene en el mismo edificio.
La princesa, en el pabellón Viaje al Cuerpo Humano, incluso se atrevió a intentar practicar una endoscopia al cadáver de un perro que está plastinizado, una nueva técnica de conservación de órganos.
No hubo más declaraciones oficiales en el transcurso del acto, ni siquiera cuando se \’encendió\’ la placa conmemorativa de este nuevo Parque de las Ciencias. Ni del presidente andaluz, Manuel Chaves, ni de la ministra de Ciencia y Tecnología, Cristina Garmendia, ni del alcalde de Granada, José Tomás Hurtados.
Los directores de otras importantes instalaciones de divulgación científica españolas, en declaraciones a elmundo.es, sí que manifestaron su satisfacción y su sorpresa por las dimensiones de este nuevo museo.
Ramón Núñez, que dirige el Museo Nacional de Ciencia y Tecnología, destacaba que «la arquitectura del Macroscopio es un ejemplo porque tiene el exterior lleno de luz y las salas de exposiciones son opacas». De los contenidos le llamó la atención especialmente el pabellón destinado al cuerpo humano «por la gran riqueza de sus piezas».
A Javier Armentia, del Planetario de Pamplona, le sorprendió «una propuesta tan atrevida como es incluir un pabellón dedicado a la prevención de riesgos para la salud». Armentia hizo hincapié en la \’mirada periférica\’ que está adquiriendo la divulgación científica en España, con la proliferación de grandes museos científicos en puntos como Galicia, Barcelona o Granada.
El director del contenidos del Museo de las Ciencias Príncipe Felipe de Valencia, Domingo Escutia, se mostró entusiasmado con la ampliación. «Esto no es competencia nuestra, muy al contrario es positivo que haya más museos de ciencia. Además, me llama la atención la versatilidad de este edificio», comentaba.
Similar impresión tenía el director del Museo Nacional de Ciencias Naturales, Ángel Navas: «Siendo lo que es Granada para la historia, creo que es fundamental que la ciencia se convierta también en atracción turística, porque es una parte del cultura que a menudo no se tiene en cuenta y cuantos más museos haya mejor», aseguraba.
Entre los asistentes extranjeros mencionar la presencia del director del Museo de Historia Natural Americano, David Harvey, quien no dudó en calificar el diseño arquitectónico del edificio de «espectacular». «Es una excelente oportunidad para disfrutar de exposiciones y, además, poder formarse. Y su contenido es muy completo porque aúna la historia con los últimos avances científicos», declaró.
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