Falta espacio para los alumnos y para los profesores. La Facultad de Ciencias del Trabajo de la Universidad de Granada (UGR) arrastra problemas en las infraestructuras en su actual sede desde hace años.
Han pedido aulas prestadas, a veces con más éxito y a veces con menos, en los centros colindantes, y a los equipos de gobierno del Rectorado les han solicitado un lugar digno, pero la respuesta se ha hecho esperar. No han sido ni un año, ni dos ni tres. Han sido lustros.
En la sede de la calle Rector López Argüeta lo tienen muy complicado los alumnos y los docentes, que muchos de ellos no tienen ni despacho en el centro. Las tutorías, por ejemplo, han tenido que pasarlas durante muchos años en otras facultades y escuelas en las que sí tienen despacho.
La vicerrectora de Infraestructura y Campus de la Universidad granadina, Begoña Moreno, explica que están trabajando con la posibilidad de que el personal y el alumnado de Ciencias del Trabajo se traslade a la ahora Facultad de Ciencias de la Salud. ¿Cuándo sería eso? Habrá que esperar a que los estudiantes y docentes de Enfermería, Fisioterapia y Terapia Ocupacional se muden al Parque Tecnológico de la Salud (PTS). «Probablemente la solución sea Ciencias de la Salud. Ellos ya lo saben», dice la mandataria universitaria granadina.
Una puntualización, el edificio de Ciencias de la Salud necesitaría, en un principio, algún repaso a su infraestructura. El traslado al PTS tampoco es inmediato porque la obra va bien, pero hay que equipar el nuevo edificio.
En el antiguo inmueble de la calle Rector López Argüeta han estudiado el curso pasado 661 alumnos de la diplomatura de Relaciones Laborales, 332 de la licenciatura de Ciencias del Trabajo y 997 del grado en Relaciones Laborales y Recursos Humanos. En ese mismo edificio también se forman los futuros trabajadores sociales, concretamente 550 han cursado el grado y 114 la diplomatura.
La Facultad de Ciencias del Trabajo es de los pocos centros, por no decir que por el momento el único, que no cuenta con una respuesta firme a sus problemas de espacio. A facultades como Ciencias Económicas y Empresariales se les ha dado respuesta y en meses, salvo que haya demoras, se estará inaugurando un nuevo módulo que terminará, al menos por el momento, con las estrecheces de este centro. En la Escuela de Informática y Telecomunicaciones se han ido, al menos parcheando, algunas de las vicisitudes y en otros centros los problemas no han sido tan acusados o se resolvieron antes. Por ejemplo, en la Facultad de Derecho, que tenía esos mismos quebraderos de cabeza se resolvieron hace años. Solo queda por rehabilitar el antiguo edificio de la calle Duquesa que albergará la biblioteca.
Estos contratiempos y estrecheces han llevado a que la Universidad granadina, concretamente algunos departamentos y facultades, hayan tenido que alquilar durante años diferentes apartamentos en zonas cercanas. En Derecho, por ejemplo, se alquiló un piso en la propia calle Duquesa para un departamento. En la Escuela de Informática y Telecomunicaciones se alquiló otro piso para los doctorando.
Nuevas ocupaciones
Con el traslado de las facultades de Ciencias de la Salud se liberarán además de Ciencias de la Salud la Facultad de Medicina y las de Farmacia y Odontología. Para que Ciencias de la Salud y Medicina se queden vacías queda menos, pero para que ocurra lo mismo en el campus de Cartuja aún restan varios años. Aún está sin resolver qué se hace con el emblemático edificio de Medicina. Algunos miembros del actual equipo de gobierno, incluido el rector, han indicado que ese espacio se dedicaría a los estudios de posgrado y actividades culturales, pero no está nada cerrado. En alguna ocasión, en los últimos meses, incluso se ha valorado por parte de algún mandatario que esa decisión corresponderá ya al nuevo equipo de gobierno.
Hay que recordar que este debate ya estaba en plena efervescencia cuando estaba David Aguilar al frente del Rectorado. Se plantearon incluso algunas opciones y también se dijo, al final, que debería ser el nuevo equipo el que pusiera sobre la mesa qué hacer. Han pasado un seis años con Francisco González Lodeiro como rector y se repite la historia. Será una negociación intensa. El avance más importante en estos años es que las facultades de Medicina y de Ciencias de la Salud ya están muy avanzadas en el Parque Tecnológico de la Salud. Para las que no hay dinero ni fecha son las de Farmacia y Odontología, dos facultades que tendrán que esperar todavía para mudarse al moderno Campus de la Salud.