Si un granadino tuviera que pedir hoy una ayuda para el alquiler o para arreglar su infravivienda, clamaría en el desierto. La crisis ha hecho desaparecer todas las ayudas que la Junta de Andalucía (administración que ostenta las competencias en vivienda) tenía en este área y ha dejado a las economías más débiles sin ningún tipo de apoyo para poder vivir en una casa digna.
La concejal de Urbanismo, Isabel Nieto, presentara hoy una moción en pleno para exigir a la Junta de Andalucía que acometa con urgencia un plan de vivienda «realista y con los pies en el suelo», apuntó Nieto, y le pidió encarecidamente a la Administración autonómica «que no esté enfocado a construir y vender, como ha ocurrido en los últimos cinco años, sino que vaya dirigido a otorgar subvenciones al alquiler y a la infravivienda».
En los últimos años han desaparecido todas las ayudas y programas que existían, se ha ido legislando y creando programas nuevos pero al mismo tiempo éstos se han ido paralizando. En 2010 se hizo una nueva ley andaluza de vivienda pero desde el año 2009 los programas están paralizados, lo cual no parece muy operativo.
«Este nuevo plan debe estar volcado en aquellas personas que no tienen capacidad para acceder a una vivienda digna, que no pueden acceder a un derecho social básico, constitucional. Para llevar una vida digna hay que tener una vivienda digna, y para tener un proyecto de vida hay que tener una vivienda, y no estoy hablando de vivienda en propiedad», manifestaba la concejal horas antes de que se conociera la noticia del suicidio del vecino de La Chana que iba a ser desahuciado. Durante el pleno de hoy el Ayuntamiento también pedirá a la Junta que haga un calendario de pago de las ayudas al alquiler que están pendientes de pago y que asciende a 75.560 euros.
El último estudio encargado por el Ayuntamiento a la Universidad de Granada sobre el número de viviendas vacías en la capital revelaba que había en torno a 14.000 hogares sin habitar. Eso sí, el mismo informe alertaba de que el 50% son inhabitables. «En el último salón de la vivienda que se organizó en Granada vimos que en la capital el stock de casas nuevas vacías prácticamente ha desaparecido, la gran mayoría están en el Cinturón y en la Costa. Granada no necesita nuevo suelo ni nueva construcción, lo que hay que hacer es arreglar lo que tenemos y en eso estamos todos», apuntó la concejal de Urbanismo. «Tenemos tal cantidad de desahucios y de gente que necesita un alquiler y una ayuda que creo que hay que tomar medidas», apuntó. Sólo en el año 2010 se produjeron 17.000 desahucios en Granada.