Melilla celebra sus 515 años como ciudad española con la mirada puesta en un gran pacto social que afiance sus principales señas de identidad

Hoy 17 de septiembre Melilla celebra su 515 aniversario como ciudad española, y para conmemorarlo, como sucede cada año, Melilla la Vieja ha acogido el tradicional homenaje a la bandera española que se lleva a cabo junto a la estatua que recuerda a Pedro de Estopiñán.

 

El acto, al que han asistido numerosas autoridades y un nutrido grupo de melillenses, ha dado comienzo con puntualidad inglesa a las 20.00 horas con la llegada al lugar del presidente de Melilla, Juan José Imbroda, que junto al comandante general, Álvaro de la Peña, ha pasado revista a la tropa en formación compuesta por la Compañía de Mar y miembros del Regimiento de Alcántara de Caballería.

Tras la entrada de la bandera española, Imbroda y De la Peña, acompañados por el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, han procedido a izarla, al son del himno de España, en el mástil ubicado junto a la estatua de Pedro de Estopiñán, donde han colocado una corona de laureles.

A continuación, el presidente de Melilla se ha dirigido a todos los presentes para recordar lo mucho que ha avanzado la ciudad desde aquel primer 17 de septiembre en el que «los anteriores moradores de aquella Melilla decidieron entregar la Ciudad a la Corona de Castilla». Pero si es cierto que el avance es patente, también es cierto, ha dicho, que hay que seguir dando pasos hacia adelante, y aunque ha reconocido que la convivencia pacifica es una de las señas de identidad de la ciudad, se ha referido a la necesidad de sentar más bases de diálogo «que nos lleven a la tranquilidad de un horizonte estable en lo social y ajeno a los sobresaltos de todo tipo».

En este sentido, ha apostado por dar forma en ese diálogo a un pacto social que recoja principios y límites «en los que tenemos que desenvolvernos los que tenemos responsabilidades públicas y no me refiero sólo a los políticos». Para ello, aboga por un diálogo «franco», así como por potenciar la Mesa Interconfesional y desarrollar esfuerzos en pro del diálogo intercultural. «El Gobierno dará el primer paso», ha asegurado.

En otro orden de cosas, Juan José Imbroda ha destacado el apoyo decidido que el Gobierno de la ciudad presta, en momentos como los actuales, a los colectivos con más necesidades, como las familias con escasos recursos, para las que existen numerosas ayudas económicas y para las que ha anunciado una ayuda especial para aquellas que tengan unos ingresos mínimos de 2.000 euros al mes y tengan hijos en Secundaria. La ayuda, ha dicho, ascenderá a 400 euros por hijo.

El presidente de Melilla, también se ha referido a los jóvenes como uno de los sectores más perjudicados por las altas tasas de paro, y sobre este último aspecto ha dejado claro que «si queremos conquistar el futuro tenemos que apostar aún más por los jóvenes y en esto un pilar fundamental es la formación». Por ello el Gobierno de la Ciudad ha trabajado duro por lograr una serie de acuerdos con el Ministerio de Educación que permitirán poner en marcha acciones formativas que ayuden a los jóvenes a asegurarse un futuro.

Así las cosas, el presidente de la Ciudad ha anunciado la inminente firma de un convenio con el Ministerio de Educación para la realización de un programa de formación y preparación para la reincorporación a la Formación Profesional de 300 jóvenes de 18 a 30 años, que además serán becados con unos 400 euros mensuales. Además, habrá otro curso igualmente becado para universitarios que empezará este año, e inmediatamente después habrá otro curso de formación en general para 525 alumnos más, igualmente becados.

Del mismo modo, para los más jóvenes se firmarán otros tres convenios de formación. Uno financiado por el Ministerio de Educación con la finalidad de combatir el fracaso escolar y también de recuperar a jóvenes en su integración a la enseñanza reglada profesional, y otros dos financiados por la Ciudad Autónoma para la apertura de algunos colegios por las tardes para completar la formación académica de los alumnos con profesores que se contratarán al efecto, y para la apertura, también por las tardes, de las instalaciones deportivas de los colegios para que con los monitores contratados al efecto se ahonde en la formación física y deportiva. En ambos casos los jóvenes tendrán su apoyo alimenticio.

Por otra parte, Imbroda se ha referido a un acuerdo alcanzado con la Universidad de Granada y el Ministerio de Educación para la implantación en el curso 2013-2014 de nuevas titulaciones que ayudarán a dar más oportunidades a los jóvenes, y que además favorecerán el desarrollo económico de la ciudad.

También se ha referido Imbroda a la necesidad de que la ciudad esté preparada para que, una vez superada la crisis, pueda experimentar el crecimiento económico necesario que rebaje sustancialmente las cifras de paro. «Es por eso que es muy reconfortante saber que la ampliación del Puerto tiene un horizonte real de inicio de 2015 en la programación de Puertos del Estado», ha dicho.

Aunque ha reconocido que la frontera y su flexibilidad son temas que preocupan también al Gobierno local, Imbroda ha dejado claro que la educación, la formación y el empleo «son nuestras preocupaciones más importantes», y teniendo en cuenta que «desbordan nuestras competencias», ha asegurado que la Ciudad Autónoma tiene la intención decidida de trabajar con la administración central y con los agentes sociales «para mejorarlas».

Juan José Imbroda ha concluido su discurso asegurando que «Melilla es una ciudad hermosa, de las más bonitas de España, con una rica historia y con gran proyección de futuro, marcado por el sentir de sus gentes, que la hacen día a día ejemplo de que es posible vivir varias culturas, musulmanes, judíos y cristianos en paz y solidaridad, sabiendo que todos somos iguales y que nos iguala el orgullo de ser melillenses, de ser españoles, y de nuestra Constitución».

El acto ha concluido con los himnos de Melilla y de España, y con el desfile de las fuerzas militares en formación.

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Melilla celebra sus 515 años como ciudad española con la mirada puesta en un gran pacto social que afiance sus principales señas de identidad

Hoy 17 de septiembre Melilla celebra su 515 aniversario como ciudad española, y para conmemorarlo, como sucede cada año, Melilla la Vieja ha acogido el tradicional homenaje a la bandera española que se lleva a cabo junto a la estatua que recuerda a Pedro de Estopiñán.

 

El acto, al que han asistido numerosas autoridades y un nutrido grupo de melillenses, ha dado comienzo con puntualidad inglesa a las 20.00 horas con la llegada al lugar del presidente de Melilla, Juan José Imbroda, que junto al comandante general, Álvaro de la Peña, ha pasado revista a la tropa en formación compuesta por la Compañía de Mar y miembros del Regimiento de Alcántara de Caballería.

Tras la entrada de la bandera española, Imbroda y De la Peña, acompañados por el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, han procedido a izarla, al son del himno de España, en el mástil ubicado junto a la estatua de Pedro de Estopiñán, donde han colocado una corona de laureles.

A continuación, el presidente de Melilla se ha dirigido a todos los presentes para recordar lo mucho que ha avanzado la ciudad desde aquel primer 17 de septiembre en el que «los anteriores moradores de aquella Melilla decidieron entregar la Ciudad a la Corona de Castilla». Pero si es cierto que el avance es patente, también es cierto, ha dicho, que hay que seguir dando pasos hacia adelante, y aunque ha reconocido que la convivencia pacifica es una de las señas de identidad de la ciudad, se ha referido a la necesidad de sentar más bases de diálogo «que nos lleven a la tranquilidad de un horizonte estable en lo social y ajeno a los sobresaltos de todo tipo».

En este sentido, ha apostado por dar forma en ese diálogo a un pacto social que recoja principios y límites «en los que tenemos que desenvolvernos los que tenemos responsabilidades públicas y no me refiero sólo a los políticos». Para ello, aboga por un diálogo «franco», así como por potenciar la Mesa Interconfesional y desarrollar esfuerzos en pro del diálogo intercultural. «El Gobierno dará el primer paso», ha asegurado.

En otro orden de cosas, Juan José Imbroda ha destacado el apoyo decidido que el Gobierno de la ciudad presta, en momentos como los actuales, a los colectivos con más necesidades, como las familias con escasos recursos, para las que existen numerosas ayudas económicas y para las que ha anunciado una ayuda especial para aquellas que tengan unos ingresos mínimos de 2.000 euros al mes y tengan hijos en Secundaria. La ayuda, ha dicho, ascenderá a 400 euros por hijo.

El presidente de Melilla, también se ha referido a los jóvenes como uno de los sectores más perjudicados por las altas tasas de paro, y sobre este último aspecto ha dejado claro que «si queremos conquistar el futuro tenemos que apostar aún más por los jóvenes y en esto un pilar fundamental es la formación». Por ello el Gobierno de la Ciudad ha trabajado duro por lograr una serie de acuerdos con el Ministerio de Educación que permitirán poner en marcha acciones formativas que ayuden a los jóvenes a asegurarse un futuro.

Así las cosas, el presidente de la Ciudad ha anunciado la inminente firma de un convenio con el Ministerio de Educación para la realización de un programa de formación y preparación para la reincorporación a la Formación Profesional de 300 jóvenes de 18 a 30 años, que además serán becados con unos 400 euros mensuales. Además, habrá otro curso igualmente becado para universitarios que empezará este año, e inmediatamente después habrá otro curso de formación en general para 525 alumnos más, igualmente becados.

Del mismo modo, para los más jóvenes se firmarán otros tres convenios de formación. Uno financiado por el Ministerio de Educación con la finalidad de combatir el fracaso escolar y también de recuperar a jóvenes en su integración a la enseñanza reglada profesional, y otros dos financiados por la Ciudad Autónoma para la apertura de algunos colegios por las tardes para completar la formación académica de los alumnos con profesores que se contratarán al efecto, y para la apertura, también por las tardes, de las instalaciones deportivas de los colegios para que con los monitores contratados al efecto se ahonde en la formación física y deportiva. En ambos casos los jóvenes tendrán su apoyo alimenticio.

Por otra parte, Imbroda se ha referido a un acuerdo alcanzado con la Universidad de Granada y el Ministerio de Educación para la implantación en el curso 2013-2014 de nuevas titulaciones que ayudarán a dar más oportunidades a los jóvenes, y que además favorecerán el desarrollo económico de la ciudad.

También se ha referido Imbroda a la necesidad de que la ciudad esté preparada para que, una vez superada la crisis, pueda experimentar el crecimiento económico necesario que rebaje sustancialmente las cifras de paro. «Es por eso que es muy reconfortante saber que la ampliación del Puerto tiene un horizonte real de inicio de 2015 en la programación de Puertos del Estado», ha dicho.

Aunque ha reconocido que la frontera y su flexibilidad son temas que preocupan también al Gobierno local, Imbroda ha dejado claro que la educación, la formación y el empleo «son nuestras preocupaciones más importantes», y teniendo en cuenta que «desbordan nuestras competencias», ha asegurado que la Ciudad Autónoma tiene la intención decidida de trabajar con la administración central y con los agentes sociales «para mejorarlas».

Juan José Imbroda ha concluido su discurso asegurando que «Melilla es una ciudad hermosa, de las más bonitas de España, con una rica historia y con gran proyección de futuro, marcado por el sentir de sus gentes, que la hacen día a día ejemplo de que es posible vivir varias culturas, musulmanes, judíos y cristianos en paz y solidaridad, sabiendo que todos somos iguales y que nos iguala el orgullo de ser melillenses, de ser españoles, y de nuestra Constitución».

El acto ha concluido con los himnos de Melilla y de España, y con el desfile de las fuerzas militares en formación.

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Las fantasías sexuales: estimulantes del erotismo

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra, son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes que todos guardamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

 

Según un estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas». Para su investigación, los expertos han encuestado a 2.250 personas de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento. Pero, según la UGR, existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes». Por su parte, los hombres piensan más a menudo que ellas en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Un condimento para el deseo

Un estudio de la Universidad de Lethbridge, UoL, en Alberta (Canadá), ha concluido que la mujer tiene una mayor proporción de sueños eróticos durante los días fértiles del mes. Para su experimento, los investigadores solicitaron a 27 mujeres solteras, en su gran mayoría estudiantes universitarias, que fueron detallando sus fantasías sexuales en un diario online, a los largo de treinta días.

Al analizar sus apuntes diarios, los expertos descubrieron que la imaginación sexual de las participantes aumentaba, hasta casi duplicarse, durante los tres días previos y posteriores al momento de la ovulación. Durante ese lapso de fertilidad, aquellas mujeres que normalmente tenían una media de 0,77 fantasías sexuales cada jornada, pasaban a experimentaron 1,3 fantasías eróticas diarias. Además, en el trabajo canadiense, las mujeres reconocieron que durante su ovulación sus visualizaciones sexuales eran más excitantes, menos explícitas pero con más contenido emocional. Los investigadores también observaron que el aumento de la imaginación y el pensamiento sexual no dependía de que las mujeres tuvieran o no pareja, sino de su interés por el sexo.

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Las fantasías sexuales: estimulantes del erotismo

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra, son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes que todos guardamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

 

Según un estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas». Para su investigación, los expertos han encuestado a 2.250 personas de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento. Pero, según la UGR, existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes». Por su parte, los hombres piensan más a menudo que ellas en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Un condimento para el deseo

Un estudio de la Universidad de Lethbridge, UoL, en Alberta (Canadá), ha concluido que la mujer tiene una mayor proporción de sueños eróticos durante los días fértiles del mes. Para su experimento, los investigadores solicitaron a 27 mujeres solteras, en su gran mayoría estudiantes universitarias, que fueron detallando sus fantasías sexuales en un diario online, a los largo de treinta días.

Al analizar sus apuntes diarios, los expertos descubrieron que la imaginación sexual de las participantes aumentaba, hasta casi duplicarse, durante los tres días previos y posteriores al momento de la ovulación. Durante ese lapso de fertilidad, aquellas mujeres que normalmente tenían una media de 0,77 fantasías sexuales cada jornada, pasaban a experimentaron 1,3 fantasías eróticas diarias. Además, en el trabajo canadiense, las mujeres reconocieron que durante su ovulación sus visualizaciones sexuales eran más excitantes, menos explícitas pero con más contenido emocional. Los investigadores también observaron que el aumento de la imaginación y el pensamiento sexual no dependía de que las mujeres tuvieran o no pareja, sino de su interés por el sexo.

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Las fantasías sexuales: estimulantes del erotismo

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra, son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes que todos guardamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

 

Según un estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas». Para su investigación, los expertos han encuestado a 2.250 personas de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento. Pero, según la UGR, existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes». Por su parte, los hombres piensan más a menudo que ellas en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Un condimento para el deseo

Un estudio de la Universidad de Lethbridge, UoL, en Alberta (Canadá), ha concluido que la mujer tiene una mayor proporción de sueños eróticos durante los días fértiles del mes. Para su experimento, los investigadores solicitaron a 27 mujeres solteras, en su gran mayoría estudiantes universitarias, que fueron detallando sus fantasías sexuales en un diario online, a los largo de treinta días.

Al analizar sus apuntes diarios, los expertos descubrieron que la imaginación sexual de las participantes aumentaba, hasta casi duplicarse, durante los tres días previos y posteriores al momento de la ovulación. Durante ese lapso de fertilidad, aquellas mujeres que normalmente tenían una media de 0,77 fantasías sexuales cada jornada, pasaban a experimentaron 1,3 fantasías eróticas diarias. Además, en el trabajo canadiense, las mujeres reconocieron que durante su ovulación sus visualizaciones sexuales eran más excitantes, menos explícitas pero con más contenido emocional. Los investigadores también observaron que el aumento de la imaginación y el pensamiento sexual no dependía de que las mujeres tuvieran o no pareja, sino de su interés por el sexo.

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No hay guerra de fantasías sexuales

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente. Los psicólogos indican que tener experiencias imaginativas de este tipo son un importante indicador de salud sexual.

 

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje o que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra… .

Son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes, esas deliciosas jugarretas de la imaginación, que todos albergamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

Aunque a veces algunas de estas ilusiones pueden hacerse realidad, no resultan tan placenteras como cuando forman parte de nuestros sueños y deseos más íntimos.

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente, ya que ambos sexos fantasean con aspectos íntimos o románticos que involucran a la pareja o persona amada, según un nuevo estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España.

Los hombres fantasean más

Eso sí, según la UGR, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas».

Para su investigación, los expertos de la UGR han encuestado a 2,250 personas (49,6 por ciento hombres y 50,4 por ciento mujeres) de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento.

Pero -según la UGR- existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes».

Por su parte, los varones piensan más a menudo que ellas (desde «alguna vez en la vida» a «alguna vez al año») en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Las fantasías sexuales experimentadas de un modo más desagradable o no placentero se relacionan con temas de sumisión sexual: ellas piensan, de modo más frecuente que los hombres, en «ser presionada a mantener relaciones sexuales», mientras que ellos piensan en participar en actividades homosexuales con una connotación negativa de modo más frecuente que las mujeres, según la investigación.

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No hay guerra de fantasías sexuales

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente. Los psicólogos indican que tener experiencias imaginativas de este tipo son un importante indicador de salud sexual.

 

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje o que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra… .

Son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes, esas deliciosas jugarretas de la imaginación, que todos albergamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

Aunque a veces algunas de estas ilusiones pueden hacerse realidad, no resultan tan placenteras como cuando forman parte de nuestros sueños y deseos más íntimos.

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente, ya que ambos sexos fantasean con aspectos íntimos o románticos que involucran a la pareja o persona amada, según un nuevo estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España.

Los hombres fantasean más

Eso sí, según la UGR, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas».

Para su investigación, los expertos de la UGR han encuestado a 2,250 personas (49,6 por ciento hombres y 50,4 por ciento mujeres) de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento.

Pero -según la UGR- existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes».

Por su parte, los varones piensan más a menudo que ellas (desde «alguna vez en la vida» a «alguna vez al año») en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Las fantasías sexuales experimentadas de un modo más desagradable o no placentero se relacionan con temas de sumisión sexual: ellas piensan, de modo más frecuente que los hombres, en «ser presionada a mantener relaciones sexuales», mientras que ellos piensan en participar en actividades homosexuales con una connotación negativa de modo más frecuente que las mujeres, según la investigación.

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No hay guerra de fantasías sexuales

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente. Los psicólogos indican que tener experiencias imaginativas de este tipo son un importante indicador de salud sexual.

 

Irse a la cama con una persona del mismo sexo o con varios amantes al mismo tiempo. Tener una aventura con un desconocido o desconocida. Mantener un encuentro amoroso salvaje o que dure varios días. Hacer el amor en un lugar prohibido o con alto riesgo de que alguien lo descubra… .

Son algunos ejemplos de las fantasías sexuales más frecuentes, esas deliciosas jugarretas de la imaginación, que todos albergamos en un rincón secreto de la mente y que, de acuerdo a los sexólogos, son normales e incluso necesarias dentro de una vida sexual sana, ya que funcionan como estimulantes del erotismo.

Aunque a veces algunas de estas ilusiones pueden hacerse realidad, no resultan tan placenteras como cuando forman parte de nuestros sueños y deseos más íntimos.

A pesar de lo que se puede suponer, no existen diferencias significativas entre las fantasías sexuales masculinas y femeninas experimentadas habitualmente, ya que ambos sexos fantasean con aspectos íntimos o románticos que involucran a la pareja o persona amada, según un nuevo estudio realizado en la Universidad de Granada (UGR), en España.

Los hombres fantasean más

Eso sí, según la UGR, los hombres tienen más fantasías sexuales, tanto positivas como negativas, que las mujeres, lo que según los investigadores granadinos confirmaría la vieja creencia popular de «ellos piensan más en el sexo que ellas».

Para su investigación, los expertos de la UGR han encuestado a 2,250 personas (49,6 por ciento hombres y 50,4 por ciento mujeres) de 18 a 73 años de edad, que mantienen una relación de pareja heterosexual de, al menos, 6 meses de duración.

Los resultados indican que casi el 100 por ciento de mujeres y hombres ha experimentado alguna fantasía sexual de modo placentero y agradable durante su vida, y alrededor del 80 por ciento de los participantes en el estudio tuvieron, al menos, una fantasía sexual negativa o desagradable en algún momento.

Pero -según la UGR- existen diferencias cuando se compara la frecuencia con que se tienen determinadas fantasías en ambos sexos, ya que «las mujeres experimentan de modo agradable, con mayor frecuencia que los hombres, fantasías de tipo íntimo y romántico, algunas veces al mes».

Por su parte, los varones piensan más a menudo que ellas (desde «alguna vez en la vida» a «alguna vez al año») en actividades exploratorias, relacionadas con sexo en grupo o la búsqueda de nuevas sensaciones, como «ser promiscuo», «intercambiar parejas» o «participar en una orgía».

Las fantasías sexuales experimentadas de un modo más desagradable o no placentero se relacionan con temas de sumisión sexual: ellas piensan, de modo más frecuente que los hombres, en «ser presionada a mantener relaciones sexuales», mientras que ellos piensan en participar en actividades homosexuales con una connotación negativa de modo más frecuente que las mujeres, según la investigación.

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El Cabildo organiza una nueva jornada sobre la violencia de género

El Área de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote organizará el 24 de septiembre en el Arrecife Gran Hotel la IV Jornada de Sensibilización sobre Violencia de Género, dentro del convenio suscrito con el Instituto Canario de Igualdad del Gobierno canario.

Miguel Lorente, profesor de Medicina Legal de la Universidad de Granada y anterior delegado del Gobierno para la violencia de género, abre las jornadas con la ponencia «Desigualdad y violencia de género». Participarán también Belén Zurbano, periodista, con la ponencia «Compromiso y responsabilidad de los medios de comunicación ante la violencia de género»; y Ianire Estébanez, Psicóloga especialista en prevención de violencia contra las mujeres, y ciberactivista.

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El Cabildo organiza una nueva jornada sobre la violencia de género

El Área de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote organizará el 24 de septiembre en el Arrecife Gran Hotel la IV Jornada de Sensibilización sobre Violencia de Género, dentro del convenio suscrito con el Instituto Canario de Igualdad del Gobierno canario.

Miguel Lorente, profesor de Medicina Legal de la Universidad de Granada y anterior delegado del Gobierno para la violencia de género, abre las jornadas con la ponencia «Desigualdad y violencia de género». Participarán también Belén Zurbano, periodista, con la ponencia «Compromiso y responsabilidad de los medios de comunicación ante la violencia de género»; y Ianire Estébanez, Psicóloga especialista en prevención de violencia contra las mujeres, y ciberactivista.

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El Cabildo organiza una nueva jornada sobre la violencia de género

El Área de Bienestar Social del Cabildo de Lanzarote organizará el 24 de septiembre en el Arrecife Gran Hotel la IV Jornada de Sensibilización sobre Violencia de Género, dentro del convenio suscrito con el Instituto Canario de Igualdad del Gobierno canario.

Miguel Lorente, profesor de Medicina Legal de la Universidad de Granada y anterior delegado del Gobierno para la violencia de género, abre las jornadas con la ponencia «Desigualdad y violencia de género». Participarán también Belén Zurbano, periodista, con la ponencia «Compromiso y responsabilidad de los medios de comunicación ante la violencia de género»; y Ianire Estébanez, Psicóloga especialista en prevención de violencia contra las mujeres, y ciberactivista.

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Con la mente puesta en la Copa de Andalucía

El Universidad de Granada será el rival del Copmon Cádiz FS en las semifinales de la Copa de Andalucía de Fútbol Sala, cita que se desarrollará el próximo sábado en la localidad malagueña de Casabermeja.
El partido dará comienzo a las 12.15 horas y en él se jugarán el pase ambos clubes a la final del torneo, que tendrá lugar ese mismo día a las 19.15 horas. Allí el vencedor de esta eliminatoria se verá las caras ante el ganador de la primera semifinal, que disputarán a partir de las 10.30 horas el Atlético Torcal y el Federópticos Fernández de Sevilla.
Los equipos que caigan derrotados en las semifinales jugarán la final de consolación a partir de las 17.30 horas en el mismo escenario.
A fin de cuentas, el primer gran título de una temporada que se presenta ilusionante para el Copmon Cádiz FS. No en vano, las chicas de Kiko Oliva han dejado buenas sensaciones en esta pretemporada.
Será la segunda participacion de la escuadra gaditana en esta competicion, donde tendrá que hacer frente a los mejores clubes andaluces del momento.
Leyre, la gran incógnita
Aunque aún resta prácticamente toda la semana para la celebración de la Copa de Andalucía, la participación de Leyre se presenta como la gran incógnita del Copmon Cádiz FS. Molestias en la espalda pueden impedir su convocatoria, pero la jugadora sigue su proceso de recuperación y ya ha comenzado a entrenar con el resto de su equipo.
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