Científicos de la Universidad de Granada han diseñado un nuevo sistema informático que permite determinar el nivel de ruido que soportará en el futuro una calle o cualquier zona de nueva urbanización de una ciudad.
Esta nueva técnica permite averiguar además con qué frecuencia se producirán los ruidos y, por lo tanto, las molestias que soportarán los vecinos, una información de gran interés para las personas interesadas por ejemplo en comprar una vivienda, según ha informado hoy la institución académica.
El sistema mejora todos los modelos matemáticos tradicionales que se han empleado hasta la fecha y permite predecir el nivel de ruido mediante la introducción de diferentes datos del entorno como el tipo de vía, el estado del firme, la velocidad media de los vehículos o la presencia de obras en la zona, con un 95 por ciento de fiabilidad.
Los investigadores trabajan en la actualidad para reducir el número de variables necesarias y confían en que pronto sean necesarias un número más reducido de ellas para averiguar correctamente el nivel de ruido.
El grupo de investigación «Razonamiento Aproximado e Inteligencia Artificial» está formado por científicos de los departamentos de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, Ingeniería Civil y Física Aplicada de la Universidad de Granada.
Para desarrollar este sistema, los científicos analizaron datos del ruido urbano de la ciudad de Granada, tomados durante el año 2007, aunque en la actualidad están estudiando datos de otras ciudades para validar de forma más amplia el modelo.
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Científicos de la Universidad de Granada han diseñado un nuevo sistema informático que permite determinar el nivel de ruido que soportará en el futuro una calle o cualquier zona de nueva urbanización de una ciudad.
Esta nueva técnica permite averiguar además con qué frecuencia se producirán los ruidos y, por lo tanto, las molestias que soportarán los vecinos, una información de gran interés para las personas interesadas por ejemplo en comprar una vivienda, según ha informado hoy la institución académica.
El sistema mejora todos los modelos matemáticos tradicionales que se han empleado hasta la fecha y permite predecir el nivel de ruido mediante la introducción de diferentes datos del entorno como el tipo de vía, el estado del firme, la velocidad media de los vehículos o la presencia de obras en la zona, con un 95 por ciento de fiabilidad.
Los investigadores trabajan en la actualidad para reducir el número de variables necesarias y confían en que pronto sean necesarias un número más reducido de ellas para averiguar correctamente el nivel de ruido.
El grupo de investigación «Razonamiento Aproximado e Inteligencia Artificial» está formado por científicos de los departamentos de Ciencias de la Computación e Inteligencia Artificial, Ingeniería Civil y Física Aplicada de la Universidad de Granada.
Para desarrollar este sistema, los científicos analizaron datos del ruido urbano de la ciudad de Granada, tomados durante el año 2007, aunque en la actualidad están estudiando datos de otras ciudades para validar de forma más amplia el modelo.
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En el Parque Tecnológico de la Salud de Granada, desde el año 2005, no se ha parado la construcción de nuevos edificios empresariales, docentes, sanitarios y de investigación pese a la crisis del ladrillo que arrancó hace cuatro años. Bien es cierto que el bache económico del país ha afectado a algunas instalaciones situadas en él, como el nuevo hospital Clínico que -tras 180 millones invertidos en la edificación- lleva un año y medio cerrado aguardando a ser dotado tecnológicamente para poder empezar a funcionar.
En los 36.000 metros cuadrados del PTS ya son realidad un total de 23 edificios, aunque 13 de ellos están en construcción actualmente. Desde la zona sur de la circunvalación de la capital se observan edificaciones por terminar y grúas que dan forma al futuro inmediato del complejo.
Uno de los espacios más espectaculares -con un presupuesto de 15 millones de euros- es el Centro I+D+I de Prevención de Riesgos Laborales, en plena construcción en la zona de Armilla, donde se levanta ese complejo identificable por su techo rematado con chapa gris plateada. «En él se aunarán los esfuerzos entre las empresas, la investigación universitaria y la administración para dar respuestas en salud laboral y prevención de riesgos», explica Jesús Quero, director del PTS.
Y rodeando la única rotonda ubicada junto al centro de prevención de riesgos laborales se halla -o se hallará, para ser exactos- Ibermutuamur, una mutua privada de accidentes de trabajo cuya obra acaba de comenzar con la realización de las primeras excavaciones. Cuando se termine, si toda va según el pronóstico, en la sede de esa empresa se habrán gastado unos seis millones.
También se levanta con ímpetu, en unas parcelas contiguas al Hospital Clínico, la nueva Facultad de Medicina, que quedará lista para el curso 2014-2015 según las previsiones más optimistas. En total costará 59 millones y entrará en funcionamiento después de que lo haga el sanatorio, pese a que en principio fueron dos proyectos vinculados.

Ciencias de la Salud
La Facultad de Ciencias de la Salud -integra Enfermería, Logopedia y Fisioterapia- también irá allí. El edificio, que simula una gran «L» tumbada y de materiales blancos, se terminará a finales de 2012 con un presupuesto estimado de 20 millones.
Estas dos últimas acciones materializan los estrechos lazos que mantienen el PTS y la Universidad de Granada, que comenzó en octubre de 2009 y marzo de 2010 la construcción de los edificios mencionados. Junto a ellos se han instalado las dependencias de los Servicios Generales de la UGR, que cuentan con auditorio, guardería, comedores, biblioteca… Las Facultades de Farmacia y Odontología también se trasladarán -en una segunda fase- al PTS.
Y precisamente ese futuro a medio plazo es lo que le preocupa a Jesús Quero, cuyos quebraderos de cabeza giran entorno a la accesibilidad al parque tecnológico. «Si entrase en funcionamiento el centro comercial Nevada, el tráfico sería demasiado denso. Es necesario soterrar el nudo del Toys R»US, hacer el VAU Sur (una carretera metropolitana) y agilizar la llegada del Metro, entre otras cosas», explica el responsable.
Él, junto al resto de plantilla responsable de la gestión del PTS, abandonarán en pocos días su sede en la céntrica calle Recogidas para trasladarse a la nueva, ubicada en mi un cortijo rehabilitado -cuya fachada pidió preservar el ayuntamiento de Granada- en mitad de todas esas empresas de última generación.
Precisamente, junto a laboratorios Rovi, en primera línea de la Ronda Sur, se dejan ver los pilares del venidero Centro de Empresas PTS, que debe estar finiquitado en otoño de 2013 por unos 16 millones de euros. Su fin será favorecer la creación de compañías de base tecnológica, en especial las relacionadas con las ciencias de la vida y la salud.
Los primeros ladrillos de la sede de la firma Neuron Biopharma también se están poniendo en la esquina más al norte del PTS, donde un vanguardista proyecto comienza así a coger forma. «El valor de un parque tecnológico no es tanto atraer a grandes empresas como crear las condiciones tecnológicas para que compañías nazcan de aquí, con gente de aquí y que no se deslocalice. Neuron Biopharma, por ejemplo, abrió sus puertas hace cinco años con tres personas, hoy trabajan 50 en varios puntos del BIC, cotizan en el mercado alternativo bursátil y prevén la construcción de este nuevo edificio valorado en 8 millones», ilustra Quero.
«Que el conocimiento se transfiera al mundo real de la economía», resume como su objetivo principal el director del PTS, a quien no le preocupan ni los saneamientos de agua ni los aparcamientos de este macroproyecto, ya que entiende que están casi resueltos. La empresa privada Vircell, salida de la Universidad de Granada, será la vecina de Neuron Biopharma, pero a diferencia de ella centra su actividad en producir equipos de diagnóstico de enfermedades infecciosas poco comunes.

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En el Parque Tecnológico de la Salud de Granada, desde el año 2005, no se ha parado la construcción de nuevos edificios empresariales, docentes, sanitarios y de investigación pese a la crisis del ladrillo que arrancó hace cuatro años. Bien es cierto que el bache económico del país ha afectado a algunas instalaciones situadas en él, como el nuevo hospital Clínico que -tras 180 millones invertidos en la edificación- lleva un año y medio cerrado aguardando a ser dotado tecnológicamente para poder empezar a funcionar.
En los 36.000 metros cuadrados del PTS ya son realidad un total de 23 edificios, aunque 13 de ellos están en construcción actualmente. Desde la zona sur de la circunvalación de la capital se observan edificaciones por terminar y grúas que dan forma al futuro inmediato del complejo.
Uno de los espacios más espectaculares -con un presupuesto de 15 millones de euros- es el Centro I+D+I de Prevención de Riesgos Laborales, en plena construcción en la zona de Armilla, donde se levanta ese complejo identificable por su techo rematado con chapa gris plateada. «En él se aunarán los esfuerzos entre las empresas, la investigación universitaria y la administración para dar respuestas en salud laboral y prevención de riesgos», explica Jesús Quero, director del PTS.
Y rodeando la única rotonda ubicada junto al centro de prevención de riesgos laborales se halla -o se hallará, para ser exactos- Ibermutuamur, una mutua privada de accidentes de trabajo cuya obra acaba de comenzar con la realización de las primeras excavaciones. Cuando se termine, si toda va según el pronóstico, en la sede de esa empresa se habrán gastado unos seis millones.
También se levanta con ímpetu, en unas parcelas contiguas al Hospital Clínico, la nueva Facultad de Medicina, que quedará lista para el curso 2014-2015 según las previsiones más optimistas. En total costará 59 millones y entrará en funcionamiento después de que lo haga el sanatorio, pese a que en principio fueron dos proyectos vinculados.

Ciencias de la Salud
La Facultad de Ciencias de la Salud -integra Enfermería, Logopedia y Fisioterapia- también irá allí. El edificio, que simula una gran «L» tumbada y de materiales blancos, se terminará a finales de 2012 con un presupuesto estimado de 20 millones.
Estas dos últimas acciones materializan los estrechos lazos que mantienen el PTS y la Universidad de Granada, que comenzó en octubre de 2009 y marzo de 2010 la construcción de los edificios mencionados. Junto a ellos se han instalado las dependencias de los Servicios Generales de la UGR, que cuentan con auditorio, guardería, comedores, biblioteca… Las Facultades de Farmacia y Odontología también se trasladarán -en una segunda fase- al PTS.
Y precisamente ese futuro a medio plazo es lo que le preocupa a Jesús Quero, cuyos quebraderos de cabeza giran entorno a la accesibilidad al parque tecnológico. «Si entrase en funcionamiento el centro comercial Nevada, el tráfico sería demasiado denso. Es necesario soterrar el nudo del Toys R»US, hacer el VAU Sur (una carretera metropolitana) y agilizar la llegada del Metro, entre otras cosas», explica el responsable.
Él, junto al resto de plantilla responsable de la gestión del PTS, abandonarán en pocos días su sede en la céntrica calle Recogidas para trasladarse a la nueva, ubicada en mi un cortijo rehabilitado -cuya fachada pidió preservar el ayuntamiento de Granada- en mitad de todas esas empresas de última generación.
Precisamente, junto a laboratorios Rovi, en primera línea de la Ronda Sur, se dejan ver los pilares del venidero Centro de Empresas PTS, que debe estar finiquitado en otoño de 2013 por unos 16 millones de euros. Su fin será favorecer la creación de compañías de base tecnológica, en especial las relacionadas con las ciencias de la vida y la salud.
Los primeros ladrillos de la sede de la firma Neuron Biopharma también se están poniendo en la esquina más al norte del PTS, donde un vanguardista proyecto comienza así a coger forma. «El valor de un parque tecnológico no es tanto atraer a grandes empresas como crear las condiciones tecnológicas para que compañías nazcan de aquí, con gente de aquí y que no se deslocalice. Neuron Biopharma, por ejemplo, abrió sus puertas hace cinco años con tres personas, hoy trabajan 50 en varios puntos del BIC, cotizan en el mercado alternativo bursátil y prevén la construcción de este nuevo edificio valorado en 8 millones», ilustra Quero.
«Que el conocimiento se transfiera al mundo real de la economía», resume como su objetivo principal el director del PTS, a quien no le preocupan ni los saneamientos de agua ni los aparcamientos de este macroproyecto, ya que entiende que están casi resueltos. La empresa privada Vircell, salida de la Universidad de Granada, será la vecina de Neuron Biopharma, pero a diferencia de ella centra su actividad en producir equipos de diagnóstico de enfermedades infecciosas poco comunes.

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