Realizan el primer estudio científico sobre el uso de las vías verdes

La Fundación de los Ferrocarriles Españoles creó en 1993 el Programa «Vías Verdes», antiguos trazados ferroviarios en desuso reutilizados como itinerarios no motorizados, para la práctica de senderismo, ciclismo, patinaje, carrera, rutas ecuestres, movilidad reducida, etc.

En la actualidad, España cuenta con más de 1.900 kilómetros de este tipo de infraestructura, y Andalucía es la región que más kilómetros de vías verdes aporta al programa nacional.

Pablo Luque Valle, investigador de la UGR, ha estudiado el uso de las vías verdes. Para ello realizó entrevistas personales a 457 usuarios, escogidos de manera aleatoria, de 15 vías verdes acondicionadas andaluzas, ubicadas en las provincias de Almería, Cádiz, Córdoba, Jaén, Huelva y Sevilla.

Se trataba de ciudadanos españoles y extranjeros mayores de 16 años, que eran usuarios y no trabajadores de la vía. En el momento de la encuesta realizaban alguna actividad en la vía verde, conocían el lugar y no se desplazaran motorizados.

El perfil medio de los usuarios de las vías verdes andaluzas es un hombre español de entre 36 y 50 años, casado, con trabajo y estudios básicos de Educación Primaria, que acude acompañado y se desplaza andando o en bicicleta.

Infraestructuras deportivas

La investigación realizada en la Universidad de Granada ha puesto de manifiesto que las vías verdes son unas infraestructuras fundamentalmente deportivas, quedando en segundo plano el carácter turístico.

Además, existen claramente dos modelos de usuarios-visitantes en las vías verdes andaluzas: los senderistas y los ciclistas. Según los datos del trabajo, el 45,3 por ciento de los usuarios de las vías verdes son ciclistas, mientras que el 47 por ciento restante lo hace a pie. El resto se reparte entre corredores, jinetes, patinadores, personas con movilidad reducida y otros.

El 86,7 por ciento de los encuestados dicen mostrarse «bastante satisfechos o muy satisfechos» con las vías verdes andaluzas, frente a apenas un 13,4 por ciento que dice estar «poco o nada satisfecho».

Este estudio ha puesto de manifiesto que a la inmensa mayoría de los encuestados les gustaría que las vías verdes contaran con más establecimientos para realizar actividades sociales y/o comerciales.

Parte de los resultados de este trabajo han sido publicados en la revista Altorendimiento. La investigación realizada en la UGR es la primera que se hace a nivel nacional, y una de las pocas que existen a nivel internacional desde un punto de vista científico de este tipo de instalaciones.


España pudo perder 25.600 millones de euros

España pudo perder hasta 25.600 millones de euros en 2010, por causa de los ataques especulativos a su economía, según se desprende de la lectura del libro “La disciplina de la información prevista por la normativa del mercado de valores: Un cauce para la seguridad jurídica del inversor ante la actual crisis económica”, escrito por la profesora Carmen Rojo Álvarez-Manzaneda y publicado por la Universidad de Granada.

Carmen Rojo, del Departamento de Derecho Mercantil y Derecho Romano de la Universidad de Granada, afirma en su libro que “el mayor ataque que está sufriendo España en los últimos tiempos no va dirigido contra su integridad territorial, su ejército en el extranjero, ni a la alteración del sistema de libertades con atentados terroristas. La gran amenaza al país en 2010 ha tenido como objetivo su economía que, entre el 3 de mayo y el 17 de junio ha podido perder hasta 25.600 millones de euros. Su causa, los ataques especulativos producidos por una serie de rumores procedentes del exterior”.

Al respecto, la autora del libro recuerda los rumores lanzados al mercado por Alemania y Deutsche Bank en mayo de 2010 respecto de una supuesta necesidad de la economía española de ser rescatada, así como otros que en la misma línea fueron publicados por prestigiosos medios, como “Financial Times”, “Deutschland”, e incluso algunas declaraciones de miembros del Gobierno germano.
La profesora Carmen Rojo Álvarez-Manzaneda sostiene en su libro, publicado en la colección “Biblioteca de Ciencias Jurídicas” de la Editorial Universidad de Granada (eug), que la crisis económica iniciada en 2008 tiene su origen en la incertidumbre provocada en los inversores por causa de la información especulativa introducida en los mercados. Y afirma que “la información económica, es decir, aquella relacionada con la rentabilidad del producto, y por ello la que viene a otorgar únicamente seguridad económica en la toma de decisiones en el mercado, es la que hasta ahora tiene un mayor peso en la percepción por los inversores”.

El volumen se divide en cinco capítulos en los que se trata, pues, de la información como principio, bien relacionado con los emisores, bien con los intermediarios financieros, con las sociedades cotizadas, y, por último, con la comisión nacional del mercado de valores.
La profesora Carmen Rojo asevera en su libro que la disciplina de la información –objeto de este volumen– entendida como el conjunto de deberes informativos instrumentados mediante mecanismos de recepción y difusión de información, que permiten contemplarse desde la normativa reguladora del mercado de valores, es un cauce eficaz y adecuado “para reportar seguridad jurídica al inversor que permite actuar como contrapeso a las especulaciones basadas en un flujo de información limitado al estricto sector económico de la liquidez”. Este hecho, de recepción y difusión de la información, faculta al inversor para, entre otras cuestiones, “adoptar sus decisiones en el mercado con pleno conocimiento de causa.”


Cifran en 25.600 millones las pérdidas de España por ataques especulativos

España pudo perder hasta 25.600 millones de euros entre el 3 de mayo y el 17 de junio de 2010 a causa de los ataques especulativos contra su economía, según un libro publicado por la Universidad de Granada (UGR).
La obra «La disciplina de la información prevista por la normativa del mercado de valores», de la profesora Carmen Rojo Álvarez-Manzaneda, explica que estos ataques se concretaron en «una serie de rumores procedentes del exterior».
«El mayor ataque que está sufriendo España en los últimos tiempos no va dirigido contra su integridad territorial, su Ejército en el extranjero, ni a la alteración del sistema de libertades con atentados terroristas. La gran amenaza al país en 2010 ha tenido como objetivo su economía», explica la autora.
Rojo recuerda los rumores lanzados al mercado por Alemania y el Deutsche Bank en mayo de 2010 respecto a una «supuesta» necesidad de la economía española de ser rescatada, así como otros que en la misma línea fueron publicados por prestigiosos medios e incluso algunas declaraciones de miembros del Gobierno germano.
La profesora sostiene en su libro que la crisis económica iniciada en 2008 tiene su origen en la incertidumbre provocada en los inversores por causa de la información especulativa introducida en los mercados.
«La información económica, es decir, aquella relacionada con la rentabilidad del producto, y por ello la que viene a otorgar únicamente seguridad económica en la toma de decisiones en el mercado, es la que hasta ahora tiene un mayor peso en la percepción por los inversores», explica.
El volumen se divide en cinco capítulos en los que se trata la información como principio, relacionada con los emisores, con los intermediarios financieros, con las sociedades cotizadas, y, por último, con la Comisión Nacional del Mercado de Valores.


El número de alumnos del Campus de Melilla crece un 5,2% este curso

La Universidad de Granada ofrece este año una nueva titulación en la ciudad, el grado en Educación Social.

El Campus de Melilla de la Universidad de Granada tiene este curso un 5,2% más de alumnos matriculados que en el año académico anterior. La institución cuenta en sus aulas con un total de 1.045 alumnos, según los datos aportados por la UGR, en los que se registran las inscripciones que se han realizado hasta este mes de diciembre.
En los datos del curso 2010/2011, sin embargo, el número de alumnos con los que contó este campus de la UGR no llegó al millar, quedándose en los 993.
Entre los motivos que han podido provocar este desfase, desde la institución se apunta el hecho de que se ha incorporado una nueva titulación en la oferta académica que el centro tiene en la ciudad. Así los alumnos pueden ahora matricularse en Melilla en el grado de Educación Social por primera vez y de hecho un total de 51estudiantes han optado por esta titulación para el curso 2011-2012.
En cuanto al resto de titulaciones, no todas siguen la tendencia a la alza general. Así la facultad de Ciencias Sociales ha sido la única en la que el número de matriculaciones se ha reducido este año, pasando de 259 en el curso anterior, a 254 en el presente. No obstante, en las otras dos facultades con las que cuenta el Campus melillense sí se ha aumentado el número de estudiantes. En la Facultad de Enfermería han pasado de 210 a 219 alumnos mientras que el mayor aumento se ha producido en la Facultad de Ciencias de Educación y Humanidades que pasa de 524 a 572 alumnos matriculados. Precisamente en esta última es en la que se ha añadido la nueva titulación.
En todas las facultades conviven las titulaciones del plan antiguo con las del nuevo plan Bolonia, por lo que en general se ha producido un descenso en el número de alumnos que se han matriculado en las diplomaturas y licenciaturas y ha aumentado el número de estudiantes de los grados, que van incorporando cada año nuevos cursos, por lo que será una tendencia que continuará en la misma línea durante los próximos años, hasta la extinción de diplomaturas y licenciaturas.


España pudo perder 25.600 millones en 2010 por ataques especulativos

Un libro publicado por la Universidad cuantifica el daño causado al país por los rumores procedentes del exterior

España pudo perder hasta 25.600 millones de euros entre el 3 de mayo y el 17 de junio de 2010 a causa de los ataques especulativos contra su economía, según un libro publicado por la Universidad de Granada (UGR). 

La obra La disciplina de la información prevista por la normativa del mercado de valores, de la profesora Carmen Rojo Álvarez-Manzaneda, explica que estos ataques se concretaron en «una serie de rumores procedentes del exterior». 

«El mayor ataque que está sufriendo España en los últimos tiempos no va dirigido contra su integridad territorial, su Ejército en el extranjero, ni a la alteración del sistema de libertades con atentados terroristas. La gran amenaza al país durante el año 2010 ha tenido como objetivo su economía», explica la autora del libro. 

Rojo recuerda los rumores lanzados al mercado por Alemania y el Deutsche Bank en mayo de 2010 respecto a una «supuesta» necesidad de la economía española de ser rescatada, así como otros que en la misma línea fueron publicados por prestigiosos medios e incluso algunas declaraciones de miembros del Gobierno germano. 

La profesora de la Universidad de Granada sostiene en su libro que la crisis económica iniciada en 2008 tiene su origen en la incertidumbre provocada en los inversores por causa de la información especulativa introducida en los mercados. 

«La información económica, es decir, aquella relacionada con la rentabilidad del producto, y por ello la que viene a otorgar únicamente seguridad económica en la toma de decisiones en el mercado, es la que hasta ahora tiene un mayor peso en la percepción por los inversores», explica. 

El volumen se divide en cinco capítulos en los que se trata la información como principio, relacionada con los emisores, con los intermediarios financieros, con las sociedades cotizadas, y, por último, con la Comisión Nacional del Mercado de Valores. 

La profesora asevera en su libro que la disciplina de la información es un cauce eficaz y adecuado «para reportar seguridad jurídica al inversor, que permite actuar como contrapeso a las especulaciones basadas en un flujo de información limitado al estricto sector económico de la liquidez». 

Este hecho, de recepción y difusión de la información, faculta al inversor para, entre otras cuestiones, «adoptar sus decisiones en el mercado con pleno conocimiento de causa», explica esta profesora


Villancicos flamencos en la Universidad de Granada

La Universidad de Granada se llena de sonidos navideños gracias al ‘Grupo de Estudios Flamencos de la UGR’. El aula de Magna de la Facultad de Medicina se transformó por una noche en una cueva del Sacromonte en la que sonaron villancicos tradicionales con aire flamenco, zapateados pasionales, cajones, guitarras y voces desgarradas.
La agrupación ‘Pandereta Flamenca’, integrada por Ivan Centenillo y Fita Heredia al cante, Josele de la Rosa y César Cubero a la guitarra, Beatriz Remacho al baile y Josué Heredia a la percusión, ofreció un concierto el pasado jueves 15 de diciembre en la Facultad de Medicina, con entrada libre y un remarcable éxito de participación.


El lento ocaso de la ‘medicina folk’

Un estudio de la Universidad de Granada documenta prácticas de curación ancestrales, presentes en la memoria de comunidades rurales, que forman parte de un patrimonio etnológico en vías de extinción

Una parte del patrimonio inmaterial de Andalucía está muriendo lenta pero inexorablemente: la memoria de las prácticas de curación tradicionales, el uso con fines terapéuticos de los animales del entorno. La medicinafolk. Un grupo de investigación del Departamento de Botánica de la Universidad de Granada está empeñado en documentar estos usos ancestrales y una parte de sus estudios ha cuajado en un artículo que acaba de publicar Guillermo Benítez en Journal of Ethnopharmacology. Ese trabajo es una de las pocas referencias existentes en este ámbito para España y está centrado en relatos recogidos en 14 municipios rurales del oeste de Granada. El contexto original de la investigación es la tesis doctoral de Benítez, actualmente profesor del Departamento de Ciencias Biomédicas de la Universidad Europea de Madrid. 

A través de 42 entrevistas mantenidas con personas que viven en estas comunidades sobre la utilización de animales con fines terapéuticos, Benítez ha documentado 61 usos medicinales asociados a 26 animales distintos, bajo 67 formas de preparación diferentes. Quizá el urbanita contemporáneo pueda hoy sonreír cuando oye hablar de estas cosas con una cierta superioridad fatua que, en realidad, es estupidez: porque en esas tradiciones se contienen algunas marcas de identidad cultural que son las raíces que arraigan a mucha gente a un territorio de creencias, valores y sentimientos que configura una cierta visión del mundo, si no se documenta, desaparecerá. «Actualmente, la vigencia de esas prácticas es escasa», señala Benítez. «Quizá, al margen de la miel, el huevo y las grasas animales para la elaboración de pomadas y ungüentos -explica este investigador-, las más usadas, y de forma esporádica, son el Berberomeloe [curica, curita, aceitera] para las verrugas y como analgésico, las camisas de serpientes para el resfriado y estos mismos reptiles para los eccemas. También para eccemas y sabañones se recurre a la orina, y a la leche materna para el dolor de oído». Este conjunto de prácticas, en las que se mezclan la finalidad terapéutica con la magia y la religión, son un patrimonio etnológico. «Por mediación del entendimiento del cómo y el porqué un pueblo usa un recurso para una afección concreta se pueden averiguar diversos aspectos de su cultura», dice este experto. 

En general, los remedios derivados de animales se utilizan mediante aplicación directa (72% de los casos, según los datos de Benítez). Pero también se recurre a los aceites tras la maceración de los animales o, incluso, después de ser fritos a fuego lento. En otro pequeño porcentaje de casos (10%), los animales se cocinan y se comen. Con estos procedimientos, las personas que recurrían o recurren a los remedios animales pretendían o pretenden resolver ciertas dolencias: «La mayor parte de los casos son autotratamientos que probablemente no se comuniquen en los centros de salud, de gente de cortijos y medios rurales muy aislados que prácticamente no tenían asistencia sanitaria reglada en tiempos pasados», dice Benítez. Fundamentalmente estas prácticas pretenden combatir resfriados y erupciones cutáneas, aunque también golpes, heridas y problemas osteoarticulares. Uno de los casos más llamativos es el uso del escorpión como antídoto de picaduras de animales venenosos: el producto resultante del proceso de freír el escorpión en aceite de oliva, a fuego lento, se guarda en una botella y se aplica, precisamente, sobre la picadura de escorpión o de otra especie ponzoñosa. Según la investigación de Benítez, el aceite de escorpión ya aparece documentado en la región (en Loja) como producto farmacéutico inventariado en 1690 en revisiones de boticas. 

También se han usado las lagartijas: se asocia la caída de las verrugas a la supervivencia del animal tras la mutilación del rabo; y si el ejemplar (vivo) se introduce en un canuto de caña y se cuelga al cuello, remiten el dolor de huesos y la irritación de los lacrimales causadas por esas fístulas conocidas popularmente como rijas; un problema que los oftalmólogos de las generaciones más recientes hace tiempo que han dejado de ver, porque los avances en la calidad de vida y en la atención sanitaria en el medio rural las han hecho casi desaparecer. Asimismo, el sapo ha servido para prevenir infecciones en los cerdos: colgar ejemplares vivos de estos batracios del tejado de las cochiqueras se entendía como una protección contra la infección bacteriana de Erysiopelotrix rhusiopathiae, el mal colorado del cerdo. 

Tela de araña para el dolor de garganta, larvas blancas (gusano del pasmo) como antiinflamatorio, cuerno de ciervo para prevenir enfermedades diversas… «Nuestro modo de vida -explica Benítez- se ha acelerado notablemente respecto a tiempos pasados y eso juega en contra de la conservación de este conocimiento». «En general -dice el investigador- son los mayores los que poseen estos saberes. Los más jóvenes a veces recuerdan que su padre, su abuelo, su vecino, les contó que esto servía para curar esto otro, pero al no haberlo usado ni haber aprendido la técnica completa, falta información y la parte perdida es muchas veces importantísima».


El lento ocaso de la ‘medicina folk’

Un estudio de la Universidad de Granada documenta prácticas de curación ancestrales, presentes en la memoria de comunidades rurales, que forman parte de un patrimonio etnológico en vías de extinción

Una parte del patrimonio inmaterial de Andalucía está muriendo lenta pero inexorablemente: la memoria de las prácticas de curación tradicionales, el uso con fines terapéuticos de los animales del entorno. La medicinafolk. Un grupo de investigación del Departamento de Botánica de la Universidad de Granada está empeñado en documentar estos usos ancestrales y una parte de sus estudios ha cuajado en un artículo que acaba de publicar Guillermo Benítez en Journal of Ethnopharmacology. Ese trabajo es una de las pocas referencias existentes en este ámbito para España y está centrado en relatos recogidos en 14 municipios rurales del oeste de Granada. El contexto original de la investigación es la tesis doctoral de Benítez, actualmente profesor del Departamento de Ciencias Biomédicas de la Universidad Europea de Madrid. 

A través de 42 entrevistas mantenidas con personas que viven en estas comunidades sobre la utilización de animales con fines terapéuticos, Benítez ha documentado 61 usos medicinales asociados a 26 animales distintos, bajo 67 formas de preparación diferentes. Quizá el urbanita contemporáneo pueda hoy sonreír cuando oye hablar de estas cosas con una cierta superioridad fatua que, en realidad, es estupidez: porque en esas tradiciones se contienen algunas marcas de identidad cultural que son las raíces que arraigan a mucha gente a un territorio de creencias, valores y sentimientos que configura una cierta visión del mundo, si no se documenta, desaparecerá. «Actualmente, la vigencia de esas prácticas es escasa», señala Benítez. «Quizá, al margen de la miel, el huevo y las grasas animales para la elaboración de pomadas y ungüentos -explica este investigador-, las más usadas, y de forma esporádica, son el Berberomeloe [curica, curita, aceitera] para las verrugas y como analgésico, las camisas de serpientes para el resfriado y estos mismos reptiles para los eccemas. También para eccemas y sabañones se recurre a la orina, y a la leche materna para el dolor de oído». Este conjunto de prácticas, en las que se mezclan la finalidad terapéutica con la magia y la religión, son un patrimonio etnológico. «Por mediación del entendimiento del cómo y el porqué un pueblo usa un recurso para una afección concreta se pueden averiguar diversos aspectos de su cultura», dice este experto. 

En general, los remedios derivados de animales se utilizan mediante aplicación directa (72% de los casos, según los datos de Benítez). Pero también se recurre a los aceites tras la maceración de los animales o, incluso, después de ser fritos a fuego lento. En otro pequeño porcentaje de casos (10%), los animales se cocinan y se comen. Con estos procedimientos, las personas que recurrían o recurren a los remedios animales pretendían o pretenden resolver ciertas dolencias: «La mayor parte de los casos son autotratamientos que probablemente no se comuniquen en los centros de salud, de gente de cortijos y medios rurales muy aislados que prácticamente no tenían asistencia sanitaria reglada en tiempos pasados», dice Benítez. Fundamentalmente estas prácticas pretenden combatir resfriados y erupciones cutáneas, aunque también golpes, heridas y problemas osteoarticulares. Uno de los casos más llamativos es el uso del escorpión como antídoto de picaduras de animales venenosos: el producto resultante del proceso de freír el escorpión en aceite de oliva, a fuego lento, se guarda en una botella y se aplica, precisamente, sobre la picadura de escorpión o de otra especie ponzoñosa. Según la investigación de Benítez, el aceite de escorpión ya aparece documentado en la región (en Loja) como producto farmacéutico inventariado en 1690 en revisiones de boticas. 

También se han usado las lagartijas: se asocia la caída de las verrugas a la supervivencia del animal tras la mutilación del rabo; y si el ejemplar (vivo) se introduce en un canuto de caña y se cuelga al cuello, remiten el dolor de huesos y la irritación de los lacrimales causadas por esas fístulas conocidas popularmente como rijas; un problema que los oftalmólogos de las generaciones más recientes hace tiempo que han dejado de ver, porque los avances en la calidad de vida y en la atención sanitaria en el medio rural las han hecho casi desaparecer. Asimismo, el sapo ha servido para prevenir infecciones en los cerdos: colgar ejemplares vivos de estos batracios del tejado de las cochiqueras se entendía como una protección contra la infección bacteriana de Erysiopelotrix rhusiopathiae, el mal colorado del cerdo. 

Tela de araña para el dolor de garganta, larvas blancas (gusano del pasmo) como antiinflamatorio, cuerno de ciervo para prevenir enfermedades diversas… «Nuestro modo de vida -explica Benítez- se ha acelerado notablemente respecto a tiempos pasados y eso juega en contra de la conservación de este conocimiento». «En general -dice el investigador- son los mayores los que poseen estos saberes. Los más jóvenes a veces recuerdan que su padre, su abuelo, su vecino, les contó que esto servía para curar esto otro, pero al no haberlo usado ni haber aprendido la técnica completa, falta información y la parte perdida es muchas veces importantísima».


Responsables de la UGR y de la Ciudad Autónoma de Melilla se reúnen para cerrar un compromiso de colaboración en el ámbito deportivo

  • El encuentro, entre el director del Centro de Actividades Deportivas de la UGR, Fernando Salvador Martín, y el consejero de Deportes de la Ciudad Autónoma de Melilla, Miguel Marín, se celebró el lunes, 19 de diciembre, en Melilla, como preámbulo de un futuro convenio entre la UGR y la Ciudad Autónoma de Melilla para uso de instalaciones deportivas, participación en el Trofeo Rector y otras actividades

El director del Centro de Actividades Deportivas de la UGR, Fernando Salvador Martín, y el consejero de Deportes de la Ciudad Autónoma de Melilla, Miguel Marín, se reunieron el lunes, 19 de diciembre, en Melilla, para dar forma a un compromiso de colaboración en el ámbito deportivo entre la Universidad de Granada y la Ciudad Autónoma de Melilla.

En la reunión estuvieron igualmente presentes el delegado del rector en Melilla, Sebastián Sánchez, y la subdelegada, Carmen Enrique. Los representantes de las dos instituciones trataron, entre otros aspectos, la posibilidad de favorecer el acceso de los alumnos de la Universidad de Granada a las instalaciones deportivas de la Ciudad Autónoma de Melilla, así como una posible colaboración entre las dos instituciones para facilitar la participación de los universitarios melillenses en el Trofeo Rector, en Granada; todo ello, con vistas a la formalización de un futuro convenio entre la UGR y la Ciudad Autónoma de Melilla, para uso de instalaciones deportivas y otras actividades.


El milagro de las letras

Las matrículas de Humanidades de la UGR crecen un 30% en los últimos tres años, volviendo a los niveles de hace una década

Con el panorama que hay, quién apuesta hoy en día por estudiar carreras de letras. Decidir lo correcto nunca ha sido fácil, y más si lo que está en juego es el futuro profesional. Los jóvenes tienen que elegir a los 18 años qué camino seguir en su formación, con la que conseguirán los conocimientos necesarios para desempeñar un trabajo, y el dilema más crucial es decidir si estudiar una carrera de ciencias o de letras. 

El contexto de crisis global ha cogido a una generación de jóvenes con un panorama de precariedad laboral sin precedentes. Por ello, la elección universitaria es hoy en día clave para pasar más o menos apuros el día de mañana. En esta tesitura, los jóvenes universitarios son bombardeados a recomendaciones de familiares, profesores y conocidos que ya han hecho su incursión en el mundo laboral y han sufrido las primeras decepciones. Y el comentario más escuchado por todos es que las carreras de ciencias y las técnicas, como Medicina, Arquitectura, Informática o Empresariales «tienen muchas más salidas» que las de letras. 

Pero los números dicen otra cosa. Muchos de los futuros alumnos de la Universidad de Granada (UGR) hacen oídos sordos a estos consejos y escogen la carrera que realmente les motiva y en la que creen que, en un futuro no muy lejano, podrán hacerse un hueco en el mercado de trabajo. 

El vicedecano de Ordenación Académica de la Facultad de Filosofía y Letras, Félix García Mora, compartió esta semana algunos datos con el diario Granada Hoy que reflejan que, en estos momentos, las titulaciones de Humanidades viven uno de sus mejores momentos. En los últimos tres años, las matriculaciones han experimentado un aumento imparable en la Facultad de Filosofía y Letras de la UGR, donde se imparten este curso 17 licenciaturas (que irán desapareciendo progresivamente en los próximos años) y 13 grados, en total casi 5.000 alumnos. De los 640 alumnos inscritos en primero en 2006-07 se ha pasado a los 827 que hay en la actualidad, lo que significa que ha habido un incremento del 30% en las matriculaciones de letras y que la UGR vuelve a anotar cifras que no se registraban hacía una década. 

«En 2002 experimentamos una caída enorme de alumnado coincidiendo con la creación de las universidades de Jaén y Almería -explica el vicedecano García Mora-. Sin embargo, el prestigio de esta facultad ha contribuido en volver a recuperarlos». 

La adaptación al Espacio Europeo de Educación Superior ha obligado a una reconversión de los planes de estudios y la Facultad de Filosofía y Letras ha aprovechado la ocasión para reagrupar titulaciones cada vez más minoritarias y lanzar nuevas en auge en el mercado laboral. Así, los 17 títulos se han dejado en 13 grados, de los que sobresalen Estudios Ingleses, con 291 alumnos matriculas entre primero y segundo; Historia, con 283; e Historia del Arte, con 262. «Son las tres carreras que más demanda tienen en estos momentos entre las de Humanidades», matiza el vicedecano. 

Lenguas Modernas y sus Literaturas es unos de los grados que se ha refundido con nuevas materias que año a año va aumentando su demanda a: 71 alumnos en primero, 62 en segundo. Y el año que viene introducirán el japonés y el alemán como segundas lenguas, lo que contribuirá a abrir aún más el interés. Es, según informa el vicedecano, la que más visitas ha tenido en la web de consultas de grados de la facultad (más de 15.000 entradas), lo que hace presagiar una demanda creciente. 

«Las letras no han registrado un aumento espectacular en Granada, pero con los tiempos que corren, el hecho de que no hayan perdido alumnos es ya muy satisfactorio; sobre todo teniendo en cuenta que las nueve universidades andaluzas ofertamos lo mismo en humanidades», dice García Mora. Sólo el grado que él imparte, el de Historia, tiene cinco departamentos con ocho áreas de conocimiento y más de 80 profesores, lo que indica el volumen de trabajo en el que se mueven.


El sector público emplea en Granada a tres de cada diez trabajadores

De los asalariados por cuenta ajena de la provincia, un 35% trabaja en los servicios públicos · Desde 2006 la Administración ha creado casi 13.000 puestos, mientras que el empleo general se ha reducido un 12%

Esta semana, el presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), Juan Rosell, no ha dejado títere con cabeza. Tras su propuesta de importar de Alemania losmini-jobs (contratos de baja remuneración y un máximo de 15 horas de trabajo a la semana), el miércoles puso sobre la mesa la necesidad de despedir a funcionarios, de que el sector público comience a asimilarse al privado empezando por la facilidad para extinguir los contratos de los trabajadores. Según la patronal, la sobredimensión del sector público es un hecho -«parte de los funcionarios o no cumple o no tiene trabajo»- y habría que buscar soluciones para atajar de raíz este problema: la reubicación y la formación son dos opciones viables, pero en última instancia, apuntó Rosell, debería existir la posibilidad del despido. 

Las palabras del presidente de la CEOE no tardaron en levantar ampollas y Rosell tuvo que aguantar un aluvión de críticas de sindicatos y políticos. Sin embargo, la opinión de que sobran funcionarios y de que son unos privilegiados está muy extendida y la propuesta del representante de la patronal no es más que una muestra de ello. 

Desde luego, el comportamiento del empleo público durante la crisis económica no tiene nada que ver con el que ha experimentado el resto de los sectores. El cuerpo de funcionarios y efectivos de las distintas administraciones públicas se ha incrementado en los últimos años sensiblemente. Los datos de la Seguridad Social desvelan que sólo en Granada el sector público -en el que se incluyen los trabajadores de la Administración Pública, de Defensa y de los Cuerpos de Seguridad del Estado, los de Educación y los de Actividades Sanitarias y Servicios Sociales- ha creado casi 13.000 puestos de trabajo en los últimos cinco años. A finales del año 2006, estos sectores (incluidos en los epígrafes L, M y N de la Seguridad Social hasta 2007 y en los O, P y Q desde entonces) empleaban a 51.835 personas. Cinco años más tarde, la cifra de trabajadores de servicios públicos es un 24,9% superior, con lo que la provincia ha alcanzado los 64.746 empleados públicos. 

Poco tiene que ver este crecimiento con el que ha experimentado el conjunto del mercado de trabajo. Desde 2006, la afiliación de trabajadores por cuenta ajena en la Seguridad Social se ha reducido un 11,9%, pasando de los 210.108 empleados en diciembre de 2006 a los 184.938 de la actualidad. 

En cualquier caso, al comparar la cifra de efectivos de la administración con el total de trabajadores afiliados en el Régimen General de la Seguridad Social, es evidente que el peso del empleo público en Granada es vital para el mercado de trabajo: de cada diez trabajadores por cuenta ajena, algo más de tres trabajan para la administración. Por matemática pura, por tanto, el despido de funcionarios provocaría de forma directa el incremento de las colas del paro en una provincia en la que la crisis en el sector privado ya ha provocado un aumento histórico de la cifra de desempleo. 

El caso de Granada, una provincia donde el sector sanitario y el universitario tienen un peso mayor que en otras zonas del territorio nacional, es quizá especial. Pero, en el conjunto nacional, ¿se puede hablar de exceso de administración, de trabajadores públicos de sobra? Mientras que los empresarios han manifestado en repetidas ocasiones que hay que ‘meterle mano’ a la administración y adelgazarla, los sindicatos lo tienen claro: su respuesta es un rotundo no. En el estudio La defensa de los Servicios Públicos y su reforzamiento en los momentos de crisis elaborado por UGT, el sindicato apunta que España sólo supera a Portugal e Italia en población empleada en el sector público y que el porcentaje de funcionarios sobre el total de población activa está muy alejado de la media europea. 

En esta misma línea se manifiesta el catedrático de Economía Pública de la Universidad de Granada Juan de Dios Jiménez Aguilera. «La administración pública española es menor que la de otros países de la Zona Euro. En España por cada cien trabajadores hay alrededor de 14 empleados públicos. Es una cifra al nivel de países como Alemania o Italia, pero muy alejada de Reino Unido (con un 20%), Holanda (28%), Francia (30%) y Dinamarca y Suecia (33%)». Además, según los datos recopilados por Eurostat, tampoco la comparación de los trabajadores públicos con el total de habitantes deja a España en una posición adelantada respecto al resto de países desarrollados. La administración pública española cuenta con 5,5 trabajadores públicos por cada cien habitantes, mientras que en Francia este ratio es de 9 trabajadores y en Dinamarca y Suecia, de 15. «Los datos son los que son. A partir de ahí cada uno puede plantear sus propuestas y su análisis». 

El catedrático de Economía Pública aclara que «puede haber ineficiencias en lo público, al igual que las hay en lo privado», pero recuerda que «la crisis económica actual no se ha generado por la ineficiencia del sector público». En cualquier caso, Jiménez reconoce que «habrá que ver qué ineficiencia genera el sector público y analizarla, adoptando mecanismos conjuntos para ver si un servicio lo debe ofrecer el Estado y en qué condiciones». Pero eso no tiene que estar vinculado con el despido de personal. 

Además, el experto recuerda que el empleo público es fundamental para garantizar los servicios a los ciudadanos. «Si en España la administración es menor que en otros países europeos es porque el gasto público y los ingresos son menores que la media europea. En España se recauda menos que en los países de la Zona Euro y, por tanto, se gasta menos. Así que aquí se ofrecen menos servicios públicos que los que se ofrecen en otras zonas de la UE», aclara. Y entre esos servicios se encuentran dos básicos: la educación y la sanidad. «Hay muchos casos en los que los gastos no hay que verlos como tal, sino como una inversión. Cuando se habla de educación y sanidad hay que hablar de inversión, porque estos servicios son un elemento capital para el desarrollo».


La Universidad de Granada convoca sus Premios de Excelencia Docente 2011

  • Estos galardones pretenden fomentar la excelencia en la docencia universitaria y estimular la implantación de la calidad en los procesos de formación de la Educación Superior
  • El plazo para presentar las solicitudes estará abierto hasta el próximo día 16 de enero de 2012

La Universidad de Granada ha convocado los Premios de Excelencia Docente 2011, que buscan fomentar la excelencia en la docencia universitaria y estimular la implantación de la calidad en los procesos de formación de la Educación Superior mediante el reconocimiento de los méritos de los profesores. Las solicitudes pueden tramitarse a través del siguiente enlace:

http://serin.ugr.es/secretariado_mejora_docencia/premios_excelencia/

Estos galardones, promovidos por el Vicerrectorado para la Garantía de la Calidad, reconocen la dedicación y trayectoria de los profesores que destacan por su implicación en la docencia nacional e internacional, la evaluación y la gestión de la calidad de la enseñanza.

Experiencia de 10 años

El plazo para presentar solicitudes a la convocatoria estará abierto hasta el próximo día 16 de enero de 2012. A ella podrán concurrir todos los profesores con una experiencia docente universitaria de diez años, de los que al menos cinco se hayan desarrollado en la Universidad de Granada.

Se otorgarán hasta doce premios en dos categorías: profesores con menos de 25 años de antigüedad docente y docentes con más de 25 años de experiencia profesional.

Los premios de Excelencia Docente han dado lugar a la creación de una nueva colección en la Editorial de la Universidad de Granada, denominada Qualitas-Excelencia, que recoge ensayos en los que los profesores galardonados comparten los aspectos más relevantes de su experiencia docente. Estos ensayos se publican en un libro conmemorativo que se repartirá el día de la entrega de los premios por parte del rector de la Universidad de Granada, Francisco González Lodeiro.

Contacto: José Luis Ortega Martín. Director del Secretariado de Formación y Apoyo a la Calidad. Vicerrectorado para la Garantía de la Calidad. Tfno: 958 248 028. Correo electrónico: vicalidadevaluacion@ugr.es