Los universitarios logran un triunfo sobre el Oviedo (3-1), que les permite continuar en el segundo puesto de la tabla

El Universidad de Granada ha dado otro mordisco a la manzana del ascenso a Superliga 2 al lograr vencer de forma cómoda al Oviedo (3-1). Con esta victoria el conjunto universitario se mantiene en la segunda posición de la tabla clasificatoria.

El duelo entre el Universidad y el Oviedo se inició muy parado para ambos. El primer set había comenzado y, sin embargo, los dos cuadros saltaron al parqué de Fuentenueva con poca iniciativa, fríos en exceso. Tras unos minutos de desequilibrio, la contienda se igualó sin que ninguno de los dos fuera capaz de despegar. Poco a poco, los fallos del Universidad en el saque y la recepción, dejaron un reguero de opciones para los asturianos, que supieron aprovecharse para llevarse el primer set (23-25).

La manzana se les amargó a los locales, que aún no habían sabido ajustar bien el tiempo y cometían demasiados errores tácticos, tanto en defensa como en ataque.

Quizá en la pérdida del primer set estuvo la chispa que les dio la vida en los venideros parciales. El Universidad se puso el mono de trabajo. En el segundo ya se notó el cambio -radical- de los de Fuentenueva. El segundo tanteo no tuvo comparación. El saque comenzó a entrar, la defensa en segunda línea a fluir, a moverse, a tapar huecos. Los hombres encargados de realizar los bloqueos ya no dejaban pasar los balones como en la primera media hora. Al final del set, se denotó un marcador holgado para los de casa (25-21), que lo merecían tras hacer bien las cosas y reaccionar a tiempo.

El Universidad se gustaba. Ya le salían las cosas que habían estado preveyendo durante toda la semana en los entrenamientos a los pupilos de Felipe Bazán.

El tercer set cayó de nuevo del lado azulón, que otra vez, con mucha determinación, supo llevar las riendas del partido. No obstante, no fue todo coser y cantar. El enfrentamiento en los dos últimos parciales estuvo mucho más igualado, aunque en ningún momento se temió por el partido. La concentración fue básica en cada momento.

Dani López y Juan Conteras fueron dos de los culpables junto con Ángel Sánchez de que el juego cambiara para bien. Los dos primeros estaban más a gusto con su juego, moviéndose, y el tercero, distribuía el balón a la perfección.

De todas maneras es importante señalar, que sin hacer un juego preciso como en el choque de Guadalajara, el Universidad fue capaz de vencer al Oviedo en un duelo en el que tuvo que remar a contracorriente un set. A la escuadra universitaria le quedan ahora tres finales que le pueden dar el pase a la Superliga 2: Santanderina, Almendralejo y Guadalajara. Dos fuera de casa y uno dentro. No en ese orden pero todos imprescindibles para lograr el botín.
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El Universidad de Granada desaprovechó una oportunidad de oro de lograr la permanencia en la categoría, tras dejar escapar una victoria en casa del Torre Pacheco murciano (2-1).

Las jugadoras universitarias comenzaron arriba en el marcador. No obstante, el cansancio tras la vuelta del partido de la Liga Universitaria y la falta de concentración hicieron que cayeran en los últimos instantes del choque.

Dos fallos puntuales del Universidad, ambos por intentar sacar el balón jugado desde la defensa, dieron el triunfo al Torre Pacheco que, aunque sólo controló algunos instantes del duelo, fue más listo cuando debió, para aprovechar los fallos rivales.

Torre pacheco: María José, Paqui, Paula, Pilar y Elena -cinco inicial-. También jugaron Yolanda, María, Jenifer, Carmen y María. universidad: Isa, Mari, Estefi, Lau y Mariajo -cinco inicial-. También jugaron Brigi, Cubi y Laura. Árbitros: Fernández y Ramos. Amarillas para las locales Paula y Jenifer. Goles: 0-1 (16′) Estefi. 1-1 (24′) María. 2-1 (38′) Jenifer. Incidencias: Virgen del Pasico, 70 personas.

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Manolo Olmo expone en la galería Yolanda Rojas una selección de su obra que, con el título ‘En la medida de lo posible’, resume las claves de su personal estilo

Siempre le han llamado la atención ese tipo de frases que vienen muy poco a cuento pero parecen resumir verdades universales. «Me acuerdo sobre todo de las clases prácticas del carnet de conducir, cuando el profesor te decía: ‘frena en la medida de lo posible»… Manolo Olmo rescata ahora la expresión para ponerle nombre a una exposición donde muestra dibujos y pinturas que sintetizan las claves de su obra. ¿Es posible medir lo posible? «Sinceramente, no lo creo», dice.

La galería Yolanda Rojas expone hasta el 15 de abril las líneas que delimitan los lugares y personas de Olmo. Nadie como él es capaz de confundirlos, haciendo que el uno habite en el otro sin que resulte extraño. Puede ser imposible esa medida pero en otro sentido de la frase el pintor malagueño cumple una de sus reglas puesto que aunque pintor, su obra nace de la fotografía, de lo real, del encuadre posible que surge en un instante determinado y parece respirar ya para siempre.

La estantería de Aquí interrumpí mi lectura se vuelve eterna para recibir el libro ‘robado’; las hojas del periódico que lee una muchacha en Antes de que vuelvan los meses con ‘r’ siguen intactas a pesar del viento; en Standby se cruzan hombre -en rosa- y mujer -en amarillo- en un pause interminable; Kind of Blue es el momento del movimiento, la flexión decisa hacia otro lado, pero sólo un segundo.

El entramado de enjambres de otros mundos posibles se mezclan con este que vivimos en una superposición perfecta que parece nacer del garabato, pero que en absoluto lo hace si el espectador pone todos sus sentidos. Oculta, entera y suave, ella buscaba es un claro ejemplo. Una mujer pensativa en primer plano -de nuevo en amarillo- a quien se le vienen pensamientos, cuerpos y ramas, de otros tiempos.

Estampa en sus cuadros la admirada nostalgia que Edward Hopper personalizaba en personajes solitarios en medio de la nada. Como él, recurre a las cuatro paredes de un interior cualquiera o a una situación cualquiera de un día cualquiera. «Todo puede ser susceptible de ser pintado o dibujado. De un miércoles, valdría el desayuno, la comida o el camino al trabajo». Le puede valer la taza del café pero sobre todo la persona con quien lo comparte. «Todo lo poético o que esconda algo sugerente».

Comparan sus escenarios con las escenas domésticas de los grandes maestros holandeses del XVII como Vermeer, Guerrit Dou, Caspar Netscher, Jan Oteen, Emanuel de Witte o Gerard ter Borch; sus interiores con las del danés Vilhelm Hammersoi (1864-1967); su forma de pintar con la nueva figuración europea de Kitaj (1932-2007)… pero los lugares de Manolo Olmo conjugan todo de cada uno.

Cuando no es así, sus lugares son blancos y diáfanos. Esta vez, la nada sin nada, sin límites, sin mesas ni sillas. Sólo una persona y sus pensamientos (Paisaje interior) o una siesta profunda (Lo suficiente o El suave tiempo adecuado).

Si fuera posible pintar un lugar en el que vivir ¿cómo sería? «Blanco y con líneas…», dice, y se ríe. «No sé si influye el que acabe de mudarme pero creo que sería como es mi casa», una casa en la que hay colgados cuadros suyos pero también dibujos de Paco Lagares y dos pósters, uno de Vértigo y otro de una exposición que hizo en Berlín, junto a postales que aguardan la llegada de nuevas obras que ya están encargadas.

Hay una descripción que encaja a la perfección en la obra de Manolo Olmo y lo describe con todas sus bendiciones. Pedro Osakar (catedrático de la Universidad de Granada) dice de él: «Las imágenes de los cuadros de Manuel Olmo Hoyo se forman en un instante, pero cobran forma tras ser perseguidas lentamente. Se caracterizan precisamente porque tienen su propio tiempo. Hay instantes vividos como instantes decisivos, como algo que vendrá». Un sí o un no dibujado en el tiempo.

Manolo Olmos. Galería Yolanda Rojas. Hasta el 15 de abril.
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De las 379 tesis leídas en 2009 en la Universidad de Granada, 366 fueron calificadas ‘con alabanza’ · El Gobierno pretende restringir esta mención en un nuevo decreto que regulará las enseñanzas de posgrado

Si el 96% de las tesis que se leen en la Universidad de Granada son aprobadas con sobresaliente cum laude (que significa ‘con alabanza’), ¿no se está restando valor a la máxima calificación? Esta práctica, que se da en todas las universidades españolas, tiene los días contados con la entrada en el Espacio Europeo de Educación Superior el próximo año. Ante la exigencia de Europa, el Gobierno español se ha visto obligado a poner un límite legal al sello de calidad y está proyectando un nuevo decreto que reducirá el porcentaje de tesis doctorales que obtienen cum laude a sólo una de cada cinco leídas.

En la UGR es realmente excepcional que un doctorado no obtenga un sobresaliente con alabanza en su tesis. De hecho, 366 de las 379 investigaciones leídas el pasado año fueron calificadas cum laude, sólo 11 obtuvieron un sobresaliente, una sacó un notable y sólo una obtuvo un aprobado.

«El cum laude reconoce que una tesis es especialmente brillante», apunta Cruz, que conoce bien el valor que tiene esta calificación en las universidades europeas, donde los tribunales saben apreciar cuándo están ante un trabajo que es excepcional y se reservan el término sólo para las investigaciones extraordinarias. «Tal vez en España hemos utilizado el término cum laude con demasiada ligereza», reconoce el director de la Escuela de Posgrado de la UGR.

El Gobierno considera que se ha malgastado el sello de máxima calidad en las tesis doctorales y ha perdido valor al generalizarse, cuando antes se exhibía como un mérito único. Lo realmente difícil ahora es cómo se va a restringir esa calificación, algo que ya se está debatiendo en la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), que tienen en su poder el nuevo borrador de decreto de enseñanzas de posgrado.

El doctorado está concebido actualmente como un programa que consta de dos fases: un periodo de formación o máster y uno de investigación, que es el estudio del doctorado propiamente dicho. «Este segundo periodo es al que ahora se le quiere dar un valor adicional -concreta el director de la Escuela de Posgrado de la UGR, Luis Cruz- para que el estudiante no tenga que hacer una redacción personal con su director de tesis únicamente».

Aunque las enseñanzas de posgrado se regularon hace poco tiempo (Decreto 1393/2007), la normativa por la que se rigen actualmente estos estudios es muy vaga para los doctorados, no así para los másteres. «El doctorando es un investigador en formación y su paso por la universidad no puede quedar únicamente en que se meta en un laboratorio y ya nadie sepa de él hasta que lee la tesis», dice Cruz.

Hoy en día, las calificaciones de las tesis están en manos de un tribunal (en el que no puede estar incluido el director de la investigación) que designa la Comisión de Doctorado: cinco doctores con experiencia investigadora acreditada, de los que sólo dos, como máximo, pueden ser de la UGR. Pero ni siquiera esta normativa evita un cum laude generalizado. «Esperamos que el nuevo decreto nos de pistas», continúa Cruz.

La única orientación que da luz a las universidades ante la implantación del Plan Bolonia está recogida en el Decálogo de Salzburgo, pero España necesita una normativa en firme que no quede a merced de la voluntad de cada universidad.
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La UE lleva destinados más de 21 millones de euros para impulsar el Parque Tecnológico de la Salud, que ya aglutina a 74 empresas y da trabajo a mil persona

La Unión Europea lleva invertido en el Parque Tecnológico de Ciencias de la Salud (PTS) 21,5 millones de euros que han ido a parar a la construcción de algunos de sus principales edificios, como el Centro de Investigación Biomédica o el Complejo Multifuncional Avanzado de Simulación e Innovación Tecnológica (CMAT).

La UE ha venido realizando estas transferencias de dinero, procedentes del Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder) desde hace más de siete años, a raíz de la creación del centro BIC-Granada, el primero que comenzó a funcionar en el complejo y para cuya construcción se destinaron 7,41 millones, de los que cinco vinieron de la UE. El BIC comenzó a funcionar en octubre de 2003 como vivero de empresas y en la actualidad acoge en sus instalaciones 49 entidades, de las que un 40% son del sector de las ciencias de la vida. Una de las primeras en llegar fue Kandor y ahora se encuentran allí otras como Biopharma, que trabaja en compuestos generativos para tratar el Alzheimer o Lorgen.

La siguiente aportación de la UE al PTS fue de cuatro millones de euros y sirvió para erigir el Complejo Multifuncional Avanzado de Simulación e Innovación Tecnológica (CMAT), operativo desde hace seis años y cuyo presupuesto global ascendió a diez millones de euros.

El CMAT acoge la sede de la Fundación Iavante de la Consejería de Salud, que se centra en la formación de los profesionales sanitarios mediante el uso de las últimas tecnologías en simulación robótica. Por ello, dispone de una amplia gama de simuladores virtuales y robots que responden a los fármacos e imitan los síntomas del ser humano. Además de la sede de la Fundación Iavante, el CMAT acoge otros organismos como el Banco de Prácticas Innovadoras y el servicio provincial del 061, donde en la actualidad trabajan 85 personas.

No obstante, la aportación más cuantiosa de la UE al PTS se localiza en el Centro de Investigación Biomédica, que lleva dos años en funcionamiento y cuya construcción supuso una inversión de 14 millones de euros, de los que nueve procedieron de los Fondos Feder.

Gestionado por la Universidad de Granada, el Centro reúne a 35 grupos de investigación y alberga el Banco Andaluz de Células Madre. También es sede de otros organismos como el Instituto de Biopatología y Medicina Regenerativa; el Instituto de Biotecnología, el de Neurociencia Federico Olóriz y el Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos José Mataix.

La última gran inversión que ha realizado la UE en el PTS sirvió para construir el Centro de Desarrollo Farmacéutico y Alimentario, sede del Centro de Excelencia en Investigación de Medicamentos Innovadores en Andalucía que «está a punto» de abrir sus puertas y será gestionado por una fundación en la estarán presentes la UGR, la Junta de Andalucía y los laboratorios Merck, Sharp & Dohme (MSD).

El presupuesto global del edificio fue de siete millones de euros, de los que 3,5 correspondieron a los fondos Feder, que en total han dejado en el PTS un total de 21,5 millones de euros. Este complejo acogerá la primera planta de España de fabricación de vacunas contra la gripe pandémica y estacional.

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