«¿Cómo me voy a ir de Granada?»

«¿Cómo me voy a ir de Granada?»

El poeta Luis García Montero tardará en olvidar su clase de ayer en la Universidad de Granada. Además de sus alumnos, un auditorio muy especial, integrado por artistas, compañeros, políticos, periodistas y amigos, quiso arropar al profesor tras la condena por injurias a un compañero de departamento, José Antonio Fortes, y asistió a su clase de la asignatura Federico García Lorca y la Generación del 27.
Tras la condena, García Montero ha decidido abandonar su puesto de catedrático de Literatura Española en la Universidad de Granada, donde ingresó en 1981. García Montero pedirá una excedencia a comienzos del próximo curso y se irá a trabajar fuera de la Universidad.

Un centenar de personas mostraron con su presencia en clase el apoyo tras la condena. Entre ellos, estaban el pintor Juan Vida, los cantaores Enrique Morente y Juan Pinilla, el poeta José Carlos Rosales y su propio hermano, que es concejal de Cultura de Granada, Juan García Montero. El autor de Completamente viernes, que es Premio Nacional de Poesía, fue recibido entre aplausos en el Aula III de la Facultad de Filosofía y Letras.

El profesor de Filosofía del Derecho Mariano Maresca leyó un manifiesto en apoyo al catedrático que ha surgido del Festival Internacional de Poesía Ciudad de Granada y al que se han sumado, entre otros, los cantantes Miguel Ríos y Joaquín Sabina, los escritores Benjamín Prado y José Manuel Caballero Bonald y el hispanista Ian Gibson.

«Todos nosotros, profesores, alumnos y ciudadanos, nos sentimos condenados por esa misma sentencia y queremos hacer público nuestro refrendo a la trayectoria del catedrático Luis García Montero, al valor de su magisterio y a su contrastada defensa de la dignidad de las personas y las instituciones libres. Perdemos a alguien muy valioso y nos quedamos con lo que hay. Y no sabemos callarnos», señala el manifiesto, al que es posible adherirse a través de la página web www.fipgranada.com.

Tras la lectura, un García Montero agradecido y emocionado tomó la palabra para asegurar que se responsabiliza de lo que ha dicho. «Estoy tranquilo, estoy seguro de lo que hago y de lo que no hago, y estoy en condiciones de agradecer el apoyo humano, la comprensión y la complicidad de mis compañeros», comentó el escritor.

García Montero dijo que la excedencia «no es una renuncia a la plaza». «Siempre hay posibilidad de volver», matizó. Deja así la puerta abierta. Tampoco se marcha para siempre de su ciudad natal: «Yo vivo entre Granada y Madrid. En Granada están mis padres, mis hermanos y todos mis amigos. Para mí es imposible irme. ¿Cómo me voy a ir de Granada?».
Descargar


Los estudiantes se movilizan en apoyo de García Montero y la enseñanza digna

Los estudiantes se movilizan en apoyo de García Montero y la enseñanza digna

«Estos poemas pertenecen a la época gongoriana de Federico García Lorca y coinciden con el homenaje a Góngora de la Generación del 27. Pero esperadme a la semana que viene y si alguien tiene prisa por preguntar algo de literatura -por saber algo sobre Góngora- puede bajar a los juzgados, porque allí saben bastante. Pueden preguntar hasta por un escritor nuevo que han descubierto y que se llama López de Vega».

Con estas palabras despidió ayer el poeta Luis García Montero la clase que tenía previsto ofrecer sobre la obra Mariana Pineda, de Lorca, en la Facultad de Filosofía y Letras. Y eso que el juez Miguel Ángel Torres, en la sentencia que le condena por injurias graves con publicidad a su compañero de departamento José Antonio Fortes, lamenta que en el enfrentamiento no hayan hecho «uso de la ironía y la sátira, sino del insulto y la descalificación».

Era la primera clase del catedrático tras anunciar su marcha de la Universidad de Granada y no pudo continuarla por la emoción que sintió cuando un centenar de personas -entre alumnos, políticos, escritores, periodistas y amigos- le mostró todo su apoyo y protestó por la sentencia. El pintor Juan Vida, el poeta Javier Bozalongo, la diputada provincial de Cultura, María Asunción Pérez Cotarelo, y el concejal de Cultura en el Ayuntamiento y hermano del profesor, Juan García Montero, entre otros, quisieron acompañarle. No hicieron lo mismo los miembros del equipo de Gobierno de la UGR, a pesar de que se rumoreó que alguno de ellos haría acto de presencia.

La entrega fue tal que el granadino tuvo que aplazar la clase y, en su lugar, optó por leer tres poemas de Federico: Suite del Regreso, Aurora en Nueva York y Grito hacia Roma. El último de ellos se lo dedicó a Javier Egea: «Él me enseñó a leerlo».

Acababa de entrar en el aula, entre aplausos, el cantaor Enrique Morente y, minutos antes, Mariano Maresca, profesor de Filosofía de Derecho, leía un manifiesto en el que sus compañeros y amigos mostraron su malestar por lo ocurrido.

En el documento, firmado por el periodista Inaki Gabilondo, el hispanista Ian Gibson, escritores como Juan Gelman, Juan Cruz, Francisco Brines, Benjamín Prado y Caballero Bonald, y músicos como Miguel Ríos y Joaquín Sabina, se señala que la UGR tiene dos problemas: «Ese presunto profesor -Fortes- cuenta con un incomprensible refrendo judicial para seguir propagando sus felonías, mientras la Universidad pierde a uno de sus mejores profesores». «Todos nosotros, profesores, alumnos y ciudadanos, nos sentimos condenados por esa misma sentencia y queremos hacer público nuestro refrendo a la fecunda trayectoria del catedrático, al valor de su magisterio y a su contrastada defensa de la dignidad de las personas y las instituciones libres. Perdemos a alguien muy valioso y nos quedamos con lo que hay. Y no sabemos callarnos», consta en el manifiesto, al que pueden sumarse las personas que lo deseen (www.fipgranada.com).

García Montero, agradecido por el apoyo de los presentes, del «equipo rectoral», los compañeros de la facultad y alumnos, ensalzó la enseñanza pública y abierta: «No he querido coartar la libertad de nadie pero tampoco he querido quitarme la responsabilidad de defender la verdad ante mis alumnos y lectores. Me responsabilizo de lo que he dicho y estoy tranquilo de lo que hago y no hago».

Además, aseguró que «en la vida se me habría ocurrido meter a un juez en una disputa literaria». «Gracias a quien entiende que la memoria no se puede manipular, a quien entiende que la Universidad es una institución pública».
Descargar


«Lo primero que haría es agilizar las quejas»

«Lo primero que haría es agilizar las quejas»

El Claustro de la UGR elige hoy al sustituto de Purificación Fenoll para el puesto de Defensor Universitario

Aparentemente lo tiene muy fácil, pues es el único candidato, pero la historia ha demostrado en multitud de ocasiones que no es tan sencillo elegir al Defensor Universitario en Granada. Hace falta que hoy voten a su favor al menos 151 miembros, de los 300 que componen el Claustro Universitario, para que este hombre, ex decano de la Facultad de Ciencias durante nueve años, sea el próximo mediador entre alumnos, profesores o personal de servicios y el Gobierno de la Universidad de Granada.

-¿Por qué es tan difícil elegir al Defensor Universitario?

-El sistema de elección es muy exigente, pues requiere una mayoría de quórum y no acepta ni el voto por correo ni el anticipado. Teniendo en cuenta que la comunidad universitaria tiene una gran movilidad, es muy difícil conseguir que asistan a la votación. El Defensor Universitario debe estar muy arropado por la comunidad universitaria pues ha de defender sus derechos y libertades frente a los órganos de Gobierno.

-¿Es partidario de cambiar el sistema de voto?

-Entiendo que se exija una mayoría absoluta, pero no que no se acepte el voto anticipado.

-Ésta es la primera vez que un candidato a Defensor Universitario ha hecho campaña por su nombramiento, ¿no?

-Esta figura no está lo suficientemente bien difundida, así que he hablado con los miembros de los distintos centros de la UGR, incluidos los del campus de Ceuta y Melilla, con el personal de servicios y con los sindicatos.

-¿Cuáles son sus propuestas?

-El Defensor Universitario debe estar bien informado así que mi idea es crear un comité de mediación y de resolución de conflictos. Para ello tendría que nombrar un defensor adjunto que, siendo yo de Ciencias, sería éste de Derecho. Y además integraría a representantes de los tres colectivos que conforman la Universidad: administración y servicios, alumnado y profesorado. Incluyendo la presencia de miembros del equipo de Gobierno.

-¿Hasta qué punto puede interferir el Rectorado en la figura?

-Lo más bonito de esta labor es que no recibe instrucciones de nadie. Ni siquiera del Claustro, que tiene potestad para quitarlo pero no para decir cómo ha de actuar.

– Grupos de estudiantes \’antibolonia\’ pusieron contra las cuerdas al Rectorado el año pasado con varios encierros, ¿habría intervenido en esto el Defensor Universitario?

-El Defensor Universitario actuará siempre que se lo pida algún miembro de la comunidad universitaria o bien cuando crea que existe un proceso de indefensión de los derechos o libertades. Ante una irregularidad intervendrá de inmediato pero no podrá nunca interrumpir otros procesos administrativos o legales ya iniciados.

-¿Quiénes hacen más uso del Defensor Universitario?

-Los alumnos. Cada vez hay más reclamaciones de los profesores, pero éstos recurren normalmente a los sindicatos.

-Si sale elegido será usted receptor de muchas quejas, ¿cómo piensa atenderlas?

-Les daré un orden de importancia y trataré de tomar contacto con las partes implicadas. Si es posible haré una labor de mediación para evitar que el conflicto llegue a instancias superiores. Pero el defensor no tiene capacidad ejecutiva, sólo puede dar recomendaciones y advertencias. No tiene potestad pero sí autoridad.

-¿Qué opina de la labor realizada por Fenoll?

-Ha sido extraordinaria. Con una precariedad de medios ha podido gestionar entre 300 y 400 quejas al año. Y pocas son, teniendo en cuenta que hay casi 70.000 alumnos y 4.000 profesores en la UGR.

-¿Cómo las gestionará?

-Lo primero que haré es agilizar los mecanismos de interposición de quejas, por ejemplo vía internet. Hasta ahora se presentaban en el registro de los centros universitarios. Sé que mis retos son agilizar las quejas vía informática y estar más cerca de la comunidad universitaria. La función del Defensor Universitario depende mucho de la confianza que se tenga en la persona así que apostaré por un continuo contacto con todos los electores.

-En su opinión, ¿cuáles son las mayores preocupaciones de los universitarios?

-Al estudiante le preocupan las convalidaciones, algunas matrículas, la interpretación de libertad de cátedra o la falta de asistencia del profesorado; el PAS reclama más cuestiones relacionadas con la estabilización, la promoción o traslados; y el personal docente está muy preocupado con los cambios que implicará el Plan Bolonia.

-Si sale elegido, ¿qué tema seguirá con especial interés?

-La relación que hay entre las enseñanzas medias y las enseñanzas superiores. Hay que estudiar la preparación de los alumnos que nos llegan. La UGR debe estar abierta a la sociedad, pero debe preservar unos mínimos de calidad.
Descargar


Carta abierta a Luis García Montero

Carta abierta a Luis García Montero

QUERIDO Luis: No dejes la Universidad. Es un disparate. Todos podemos tener la mala fortuna de expresar algo con mal tino y que, teniendo razón en el fondo, un juez riguroso se nos lleve por delante por no acertar en la forma. Te lo digo yo, que he pasado por lo mismo.

Te pido que te quedes por la Universidad de Granada, tan falta de docencia luminosa, como la tuya, que desde la Facultad de Letras hizo, hace años, que este alumno de Físicas subiera a la Cartuja a escuchar tus clases, incluso sin entender algunas cosas.

Te pido que te quedes por los miles de alumnos y alumnas andaluzas que se perderían tus clases, su forma y su fondo y sus mensajes entre líneas. Que se te perde- rían. Te pido que te quedes porque tengo hijas, que quizá estudien letras y quiero, como muchos miles más, que seas no su profesor, sino su maestro. Te lo pido por una antigua alumna que está desconsolada.

Te pido que te quedes por tu poesía, que no será la misma si te alejas de la docencia en Granada, de los mismos pasillos, caras, paisajes, gentes que te han hecho como eres y, sobre todo, si interiorizas como una derrota lo que no debe ser más que un tropiezo fácil de olvidar.

Te pido que te quedes por Granada, porque la Universidad no será lo que más te ata sentimentalmente a esta tu ciudad, pero si que es lo que te ata en lo material, en lo cotidiano. Dejar la Universidad te llevará, poco a poco, a estar más lejano de Granada, y esta ciudad te necesita para no hundirse más en la mediocridad del folklore previsible o el panfleto fácil. Granada te necesita. Te necesitamos. Sabes que te necesitamos.

Te pido que te quedes por el movimiento social, solidario y defensor de la humanidad en Granada, que sabe que siempre, siempre, siempre, puede contar contigo para denunciar la verdadera cara de la destrucción de la vega, de un abuso o de una guerra.

No tengo que hacerte una lista de profesores universitarios, intelectuales o poetas condenados por la justicia en España tú sabrás hacerla mejor que yo. Esto es sólo lo que te faltaba en tu currículum, en el que, como en el de tantos otros, constará que un juez te condenó mientras el pueblo, desde las calles, te indultaba.

No te vayas. No nos dejes.
Descargar


La dignidad de la literatura

La dignidad de la literatura

Cuando llegué a mis tiernos 18 años a la Facultad de Filosofía y Letras de Granada para estudiar filología inglesa, jamás imaginé que en mi futuro sólo hablaría inglés en hoteles y aeropuertos extranjeros. En octubre del 90 no sabía que al final me decantaría por la literatura española, que ese cambio sería determinante en mi vida y que esa decisión me pondría en el camino a profesores magníficos como Ángela Olalla, Juan Carlos Rodríguez, Álvaro Salvador o, sobre todo, Luis García Montero. El azar y mi necesidad echaron las cartas y salió repóquer de ases. Fue García Montero quien me enseñó en sus clases que se podía leer de otra manera, que se podía vivir de otra manera. Este encuentro casual pero decisivo es el responsable de que me dedique a defender la dignidad de la literatura en cada uno de los cursos a los que imparto clases año tras año.

El poeta madrileño Carlos Pardo llegó a Granada en 1993 con las ideas muy claras. Carlos, que aterrizó en Filosofía y Letras justo el año en que yo fui alumno de García Montero, podría haber optado por cualquiera de las facultades de filología madrileñas. Sin embargo, el hecho de que en Granada hubiera un profesor llamado Luis García Montero -aparte de otras razones con nombre de mujer- lo decidió a coger las maletas y marcharse de su ciudad. Carlos Pardo no terminó la carrera, ni en Granada ni en ningún otro sitio, pero aprendió con Luis García Montero lo que significaban las palabras poesía, amistad, complicidad, amor,

Por lo visto, oído y leído, Luis García Montero abandona la Universidad de Granada el próximo curso por culpa de las miserias de la literatura, de sus envidias, de sus cuchilladas por la espalda. Supuestamente las diferencias entre el denunciante y García Montero se habían resuelto con una disculpa del segundo en una reunión del departamento de literatura de la Facultad. Pero parece que para el rencor no basta una disculpa, si no va acompañada del escarnio público. Pues, bien, objetivo conseguido. No merece la pena apelar, aunque exista la convicción de que se está cometiendo un atropello.
Descargar


Arranca el II Congreso Internacional Paisaje e Infraestructuras donde se ahondará en los entornos urbanos y el litoral

Arranca el II Congreso Internacional Paisaje e Infraestructuras donde se ahondará en los entornos urbanos y el litoral

Para contribuir al debate sobre el impacto de la carrtera en el entorno, la Asociación Española de la Carretera (AEC) reúne desde el miércoles 12 y hasta el sábado 15 a destacados expertos en esta materia en el marco del II Congreso Internacional Paisaje e Infraestructuras.
El lema del Congreso son las infraestructuras y los paisajes en transición. En este sentido, se hará especial hincapié en los entornos urbanos y los litorales, ambos muy influidos por las ejecuciones viarias. Y es precisamente esta dicotomía entre carretera y ecosistema, la que anima gran parte de las discusiones sobre infraestructuras y medio ambiente. Luis García Garrido, Consejero de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, fue el encargado de inaugurar este Congreso, del que se espera que aporte soluciones a las interferencias existentes entre el entorno urbano y las carreteras. En la sesión inaugural se sentaron junto al Consejero la Decana del Colegio Ingenieros Caminos, Canales y Puertos de Andalucía, Virginia Sanjuán Mogín; el Presidente del Centro de Estudios Paisaje y Territorio, Damián Álvarez Sala; el propio Ponente General, encargado de coordinar todos los contenidos técnicos, Carlos Nárdiz Ortiz, y el Presidente de la AEC, Miguel María Muñoz Medina.

El encuentro gira en torno a cinco sesiones de trabajo. A lo largo de estos bloques temáticos se abordan asuntos como la actualidad de la administración del paisaje, las infraestructuras en la configuración y evolución paisajística, las carreteras en la formación del entorno urbano y la sostenibilidad en las áreas portuarias y litorales. Todos estos contenidos son impartidos por profesionales de primer orden provenientes de las Administraciones Púlicas, la empresa privada, el mundo asociativo y la Universidad. Como cierre a las sesiones de trabajo, el sábado por la mañana se realizará una visita técnica a las infraestructuras viarias de la zona de Sierra Nevada. Además, de forma paralela al desarrollo del congreso, se celebra una exposición en la que distintas entidades públicas y privadas muestran sus últimos avances y actuaciones.

El II Congreso Internacional Paisaje e Infraestructuras está organizado por la Consejería de Obras Públicas y Transportes de la Junta de Andalucía, el Centro de Estudios Paisaje y Territorio y la AEC, con la colaboración de la Demarcación andaluza del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos, el Colegio de Geógrafos y la Universidad de Granada.

El primer Congreso Internacional Paisaje e Infraestructuras, celebrado en Sevilla en el otoño de 2006, propició un encuentro de intelectuales, técnicos, empresas y Administraciones inédito anteriormente. Los buenos resultados y las interesantes aportaciones y avances en la materia surgidos desde entonces a nivel nacional e internacional, han hecho ineludible esta segunda edición.
Descargar


El Alcázar recupera el esplendor de la fachada del Palacio de Pedro I

El Alcázar recupera el esplendor de la fachada del Palacio de Pedro I

La primera fase de la restauración de la fachada del Palacio Mudéjar de Pedro I del Real Alcázar ha finalizado con éxito. Los trabajos han consistido en la limpieza, consolidación y reintegración de la piedra, yesería y cerámica del tejaroz del siglo XIV. La intervención ha tenido una duración de 14 meses y ha requerido de una inversión de 599.282 euros. Los expertos consideran que esta fachada constituye todo un «icono» del recinto palaciego, una portada que ocupa la zona central de su fachada norte y está construida principalmente en sillería.

El alcaide del Alcázar, Antonio Rodríguez Galindo, precisó que el criterio de rigurosidad aplicado a este proyecto incluyó un análisis previo de la fachada por parte de un equipo interdisciplinar integrado por grupos de investigadores de la red temática de Patrimonio Histórico y Cultural del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de la Universidad de Granada.

Este equipo técnico abordó un estudio histórico completo de la policromía del alero, los tipos de madera y su datación, los materiales pétreos, los materiales cerámicos y morteros y las alteraciones de origen biológico. En lo que respecta a la pintura del alero, se ha completado el estudio con nuevas muestras tomadas durante la restauración, con el fin de estudiar las alteraciones cromáticas que ha sufrido a lo largo de su historia.

Rodríguez Galindo explicó que, actualmente, se trabaja ya en el inicio de la segunda fase de la restauración, que con un plazo de ejecución de ocho meses y un presupuesto de 227.000 euros incluirá el lateral derecho de la fachada, mientras que la tercera fase se centrará en el lateral izquierdo, todo ello con el objetivo de que en 2010 esté finalizada la restauración al completo.

El arquitecto responsable de la dirección de las obras, Antonio Almagro, indicó que la fachada no tenía problemas de tipo estructural, sino de epidermis, lo que afectaba de modo negativo a la conservación del monumento y que requerían un tratamiento adecuado.

La restauración del alero se ha centrado fundamentalmente en su policromía, ya que las maderas se encontraban en general en buen estado, salvo en las caras externas de las ménsulas.

Almagro destacó que el criterio de trabajo con la policromía ha sido eminentemente conservador.
Descargar


Concluye la primera fase de la restauración del Palacio Mudéjar

Concluye la primera fase de la restauración del Palacio Mudéjar

El Ayuntamiento ha finalizado la primera fase de la restauración de la fachada del Palacio Mudéjar de Pedro I. Los trabajos han consistido en la limpieza, consolidación y reintegración de la piedra, yesería y cerámica del tejaroz, el elemento decorativo de la fachada que sustenta la cubierta del siglo XIV.

Según explicó el alcaide del Real Alcázar, Antonio Rodríguez Galindo, la actuación ha tenido una duración de 14 meses y una inversión de 599.282 euros, todo ello para restaurar el «icono» del recinto palaciego, una portada que ocupa la zona central de su fachada norte y está construida principalmente en sillería.

En este sentido, Galindo informó de que se ha trabajado «con mucha rigurosidad», y así, previamente a esta intervención se realizó una campaña muy completa de análisis y estudios de la fachada por parte de un equipo del Centro Superior de Investigaciones Científicas y de la Universidad de Granada.

Este equipo abordó su estudio histórico; la policromía del alero; los tipos de madera y su datación; los materiales pétreos y cerámicos; los morteros y las alteraciones de origen biológico. En cuanto a la pintura, se han tomado muestras para estudiar las alteraciones cromáticas que ha sufrido a lo largo de su historia.
Descargar


Escritores de todo el país protestan contra la sentencia

Escritores de todo el país protestan contra la sentencia

Numerosos escritores y personajes del mundo de la cultura de todo el país muestran su apoyo al escritor granadino Luis García Montero y critican la sentencia del juez Miguel Ángel Torres.

La decisión del juez del Juzgado de lo penal nº 5 de Granada por la que ha condenado al poeta y catedrático granadino Luis García Montero por un delito de injurias graves no ha sentado nada bien en un amplio sector de la cultura de todo el país y numerosos escritores, intelectuales, cantantes y políticos manifestaron ayer su desacuerdo.

El novelista, poeta y amigo de Luis García Montero Benjamín Prado fue contundente en sus declaraciones y aseguró a este periódico que «lo que ha ocurrido es una cosa que no se entiende bien», ya que «una cosa es que la justicia sea ciega y otra muy distinta es que vea sólo aquello que quiera ver». En este sentido, el escritor añadió que «aquí da la sensación de que no se ha querido ver que la otra parte insultó y vejó durante muchísimo tiempo».

Prado quiso dar su «más sentido pésame» a la Universidad de Granada y aseguró que «este mundo es muy cobarde y hay pocas personas capaces de comprometerse, y precisamente por esa falta de valor y compromiso de muchas personas ocurre no que se vaya, sino que más bien Luis huya de Granada». El poeta concluyó diciendo que «es como si desde que asesinaron a Lorca no hayan pasado por Granada los setenta años que han pasado por el resto del mundo».

Para el escritor José Manuel Caballero Bonald, la sentencia dictada por Miguel Ángel Torres es «literalmente injusta». El poeta jerezano señaló que, por una parte «me indigna», y por otra «me hace sentirme muy solidario con él, pues le han hecho un daño moral irreparable que indigna». El escritor añadió que no entiende «cómo el juez no ha sabido entender que realmente lo que tenía que hacer era poner coto a esa serie de ignominias docentes».

El poeta Francisco Brines, por su parte, se mostró muy sorprendido ante la sentencia y aseguró que las declaraciones de Luis «tenían todo el sentido», ya que, según entiende el Premio Lorca valenciano «es inconcebible que un profesor de universidad pueda decir que Lorca era un poeta fascista». En este sentido, Brines insistió en que en las palabras de Luis García Montero sobre este profesor «no hay ningún disparate» y además, ironizó, «lo raro es que alguien que asegure cosas como las de ese profesor llegue a ocupar un puesto en la universidad».

El editor Chus Visor tampoco dudó en que se ha tratado de una «injusticia absoluta y total». Para el responsable de la editorial Visor, la más prestigiosa del país en publicación de poesía, «es algo muy grave porque esta sentencia condena la moral de un tipo como Luis García Montero, que se ha dedicado toda su vida a defendiendo la ética individual y general y precisamente le multen por eso, que llegue un tipo y le meta una condena pública por lo que ha defendido toda su vida y sigue defendiendo, es para no creérselo».

El Premio Nacional de Poesía valenciano Carlos Marzal aseguró a este periódico que le produce «estupor ver que algo que fue de sentido común por parte de Luis García Motero» y que «ha degenerado así». Para Marzal, «es increíble» que lo hayan condenado porque «es descabellado que el juez entienda que lo que Luis sufre no son insultos y, sin embargo, lo que le dice Luis a él sí lo sean». Para Marzal «es muy triste» que la Universidad de Granada «se permita el lujo de perder a alguien como Luis».

Por último, el director del Centro Andaluz de las Letras, Julio Neira, se mostró «perturbado» por el hecho de que la Universidad de Granada «permita que haya profesores que quieren manipular la historia y a los alumnos con afirmaciones como que Lorca era un fascista».
Descargar


Políticos y artistas arropan al poeta en su clase más difícil

Políticos y artistas arropan al poeta en su clase más difícil
La asistencia de Enrique Morente pone la guinda a una lista de presentes entre los que destacaba el edil Juan García Montero, hermano del profesor.

Enrique Morente, genio y figura, tenía que salirse del guión establecido. Y así fue. Hacía apenas diez minutos que Luis García Montero había comenzado su clase cuando el cantaor hizo acto de presencia en el aula y, como un estudiante más, se sentó en el primer pupitre que vio libre, en primera fila. Evidentemente, se convirtió en el centro de atención.

Su inesperada presencia en la clase originó un sinfín de murmullos entre los sorprendidos alumnos y puso la guinda al apoyo que distintos políticos, artistas y profesores estaban brindando al poeta con su presencia. “No he recibido clases en la universidad, pero siempre estaré de parte de la cultura y creo que se trata de una pérdida irreparable para la UGR”, manifestó Morente al término de la clase.

También en las primeras filas se sentaron el hermano del profesor, el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Granada Juan García Montero, la portavoz municipal de IU Lola Ruiz o al cantaor Juan Pinilla, entre otros. Faltaron algunos, como Miguel Ríos o Joaquín Sabina, que se encontraban fuera de España, pero que igualmente le mandaron sentidos mensajes de apoyo.

Precisamente uno de sus amigos más cercanos, el poeta José Carlos Rosales –sobrino del también poeta y compañero de Federico García Lorca, Luis Rosales– acusó a la Universidad de Granada de mostrarse “un tanto tibia” con su “presunta imparcialidad” en el enfrentamiento entre los dos docentes.
Descargar


Los amigos de García Montero dan una lección de solidaridad

Los amigos de García Montero dan una lección de solidaridad

El poeta y profesor de la Universidad de Granada Luis García Montero dijo el miércoles antes de iniciar la que ha sido su primera clase tras ser condenado por injuriar a su compañero de departamento José Antonio Fortes que “en la vida” se le ocurriría “meter a un juez en medio de una disputa literaria”.

El aula donde el catedrático Luis García Montero tenía previsto impartir hoy una clase sobre la obra Mariana Pineda de Federico García Lorca se llenó el miércoles de periodistas, personalidades del mundo de la cultura y representantes políticos de la provincia que quisieron mostrar así su apoyo al escritor.

En torno a las 15.30 horas, García Montero llegó al aula –acompañado del concejal socialista Isidro Olgoso y la portavoz del grupo municipal de IU en el Ayuntamiento, Lola Ruiz Domenech–, donde se encontraban varias cámaras de televisión y más de doscientos alumnos. También estaban presentes el concejal de Cultura y hermano del escritor, Juan García Montero, el pintor Juan Vida y el director del Festival Internacional de Poesía Ciudad de Granada, Fernando Valverde, entre otros.

García Montero reiteró a los periodistas su intención de solicitar una excedencia de su puesto como docente en la Facultad de Filosofía y Letras cuando acabe el curso, si bien ha dicho que podría volver a la Universidad “en un futuro”.
El poeta agradeció el apoyo mostrado por compañeros y amigos, así como las declaraciones realizadas el miércoles por el rector de la Universidad de Granada, Francisco González Lodeiro, quien manifestó su intención de pedirle que “recapacite” y no deje la institución. “Estoy convencido de que va a entender mis razones y va a comprender en qué sentido es tan incómodo para mí seguir dando clases en este ambiente”, indicó.

A continuación, el profesor de Filosofía del Derecho de la UGR Mariano Menesca leyó un manifiesto de apoyo al artículo que escribió el poeta en contra de su compañero de Departamento José Antonio Fortes, quien según García Montero sostenía en sus clases que “al fascista García Lorca lo mataron los suyos”.

Una vez sentado tras su mesa, el profesor, condenado al pago de una multa de 1.800 euros y de una indemnización de 3.000 euros a Fortes, explicó que siempre se ha sentido “incapaz de coartar la libertad de nadie, pero también de evitar defender la verdad ante alumnos y profesores”. “En la vida se me ocurriría meter a un juez en medio de una disputa literaria, pero hay quien lo ha hecho”, sentenció, tras lo cual dio comienzo a su lección sobre la obra Mariana Pineda, de García Lorca. El cantaor Enrique Morente asistió atento desde un pupitre.
Descargar


La UGR considera que la marcha de García Montero es una «pérdida terrible»

La UGR considera que la marcha de García Montero es una «pérdida terrible»

El vicerrector de Extensión Universitaria y Cooperación al Desarrollo de la Universidad de Granada (UGR), Miguel Gómez Oliver, consideró hoy que el abandono de la institución por parte del poeta y profesor de Literatura Luis García Montero es una «perdida terrible».

En declaraciones, Oliver explicó que «no se esperaba tras conocer la sentencia que García Montero fuese a pedir una excedencia» y dejar la Facultad de Filología Hispánica, donde imparte la asignatura \’Federico García Lorca y la Generación del 27\’.

El poeta ha tomado esta decisión tras haber sido condenado al pago de una multa de 1.800 euros y una indemnización de 3.000 al profesor de la UGR José Antonio Fortes, que lo demandó por una serie de insultos que le profirió el poeta durante el transcurso de una reunión y por diferentes artículos que éste publicó en prensa.

El vicerrector lamentó la marcha de García Montero, «un profesor excelente que tanto se ha comprometido con la Universidad». En este sentido, opinó que la institución «no se puede permitir el lujo de perder a profesores tan valiosos», por lo que también manifestó su deseo de que el poeta reflexione sobre esta decisión.

García Montero, que no recurrirá la sentencia «para no alargar judicialmente el tema», explicó a Europa Press que «no tiene sentido que esté yendo todos los días a la facultad a encontrarme con la gente del Departamento», al que pertenece el profesor José Antonio Fortes.

«No me apetece en absoluto trabajar en esas condiciones, cuando de pronto llamarle perturbado a un profesor que dice esas cosas –que Federico García Lorca era un fascista o que Francisco Ayala había sido un aliado del régimen– puede ser considerado injuria grave», señaló el profesor, que sabía «que podía pasar esto» y ha tomado una decisión «que estaba pensando hace tiempo».

Por ello, pedirá una excedencia y dejará la Facultad de Filología Hispánica. De este modo, acabará el curso actual y el que viene abandonará la docencia en Granada. «Para no perturbar a los alumnos voy a a acabar el curso y el que viene me voy a trabajar a mi casa», indicó.

El poeta ha sido condenado al pago de una multa de 1.800 euros e indemnización de 3.000 euros al profesor Fortes, cantidades que asumirán poetas, escritores, periodistas y amigos de García Montero, en una iniciativa promovida por los organizadores del Festival Internacional de Poesía Ciudad de Granada, que consideran «injusta» la sentencia emitida, que atenta además contra la libertad de expresión, según señalaron a Europa Press.
Descargar