El secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, sufrió este jueves durante su visita a la Universidad de Granada un boicot a manos de dos grupos antisistema, Stop Desahucios y el 15-M, habitualmente defendidos y amparados por su partido. Rubalcaba tenía previsto pronunciar una conferencia bajo el título «Contribución de la química a la política» haciendo gala de su condición de doctor en Ciencias Químicas, pero no pudo hacerlo. Las protestas de unas 60 personas de esos dos grupos, a modo de acoso o «escrache», se lo impidieron.
El «profesor Rubalcaba», como se dirigieron a él en su presentación, llegó pasadas las once de la mañana. La conferencia empezaba al mediodía. Mientras, estuvo en un despacho del decanato preparando las últimas notas y apuntes de la charla que pretendía ofrecer. Pasadas las doce, salió del despacho. Iba acompañado del rector de la Universidad, Francisco González Lodeiro; del decano del centro, Antonio Ríos, y de los docentes que han diseñado los actos del «Centenario de Químicas en Granada (1913-2013)». Había muchos alumnos y empleados de la facultad en el hall. Hubo incluso algún aplauso. Además, un joven universitario se fotografió junto al secretario general de los socialistas.
Todo transcurría con normalidad en un aula magna repleto, con cerca de 500 personas. Incluso había gente de pie en los pasillos. Cuando Rubalcaba entró —muchos sólo veían en él al político— hubo un leve aplauso. El rector, Francisco González Lodeiro, tomó la palabra. Recordó los tiempos en que era estudiante en Madrid y conoció a Rubalcaba. También habló de las posteriores acciones y trabajos del diputado en la defensa de los profesores no numerarios y de los tiempos en los que el actual secretario de los socialistas ya estaba en política e intervino en la elaboración de la Ley de Reforma Universitaria. González Lodeiro se refirió además a la época de ministro de Educación de Rubalcaba y a su empeño en «mejorar la investigación».
El rector se despidió, o eso intentó, pero fue justo en ese momento cuando comenzó la protesta. La profesora Elvira Martín intentó hablar, pero no le dejaron. Los primeros en levantarse para impedir que Rubalcaba empezase a hablar fueron varios estudiantes —muchos de ellos de la asamblea y la Coordinadora Sindical Estudiantil— con pancartas en las que se podía leer entre otros lemas: «Ni tu pago fraccionado. Ni tus convenios con el CLM». Eran mensajes dirigidos a González Lodeiro. Acto seguido, lanzaron consignas como: «¡Rubalcaba también privatizaba!» y «¡Lodeiro da la cara. Loderio dimisión!». Estaban sentados en las primeras filas.
A estos gritos se sumaron los de los activistas de Stop Desahucios: «¡No más familias en la calle!». «¡Agua, luz y gas, derecho universal!». «¡La Poli te pegaba también con Rubalcaba!». Hubo más de diez minutos de protesta en los que los integrantes de la mesa no se movieron. Solo hacían breves comentarios entre ellos. La profesora Elvira Martín volvió a intentar hablar, pero con escaso éxito. Apenas se le escuchó decir que «la política ganó un gran científico con Rubalcaba».
Enfado del rector
Entre voces de los manifestantes, el rector tomó el micrófono en varias ocasiones y en tono enfadado. «Por favor, hay mucha gente que quiere escuchar la conferencia». Y agregó: «Es un acto académico y no político». Esa fue la frase más repetida por los docentes y organizadores del acto. Finalmente, Lodeiro levantó la voz para decir que «¡ya está bien de boicoteo. Hagan el favor de callar o abandonar la sala!». No hicieron caso y las proclamas continuaron.
Pasaban las 12.20 horas y Rubalcaba permanecía sin decir nada. Quien sí habló fue el profesor Juan Manuel Salas, uno de los organizadores: «Vuestras reivindicaciones son justas, pero estamos en un acto académico. Se va a hablar de ciencia y no de política». La mayoría de quienes querían escuchar la charla aplaudieron. Continuaron las consignas y al final se suspendió el acto. Hubo más gritos. Rubalcaba y las autoridades académicas salieron de la sala para dirigirse de nuevo al decanato. Eso sí, un grupo de estudiantes pudo llegar hasta el secretario general de los socialistas para pedirle que impartiera la charla. Pero Rubalcaba lo descartó: «No van a irse. No me van a dejar hablar».
El alboroto prosiguió hasta las 12.40 horas. Hubo un grupo de alumnos que se subió con las pancartas al escenario y no faltaron algunas refriegas dialécticas entre los manifestantes y quienes habían ido a escuchar la conferencia. Hubo un cruce de reproches entre unos y otros. «No hay derecho a reventar un acto de este modo». «A ti también te están robando». «Podías haber protestado diez minutos y después dejar que se impartiera la conferencia…».
Poco a poco los manifestantes se fueron y Rubalcaba, tras permanecer unos minutos en el decanato, salió por la puerta lateral. Era su primera, y accidentada, visita a la Universidad de Granada, de donde Rubalcaba salió como víctima del descontento social que denuncia y alienta el PSOE… siempre contra el PP.
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