La Universidad de Granada pone en valor el club naútico del Embalse de Cubillas mediante una concesión de gestión de servicio público

La Universidad de Granada consiguió de la actual Confederación Hidrográfica del Guadalquivir la concesión demanial hace años sobre los terrenos, edificaciones e instalaciones del Club Náutico del embalse de Cubillas, en los términos municipales de Albolote y Atarfe (Granada). Dicha concesión se ha prorrogado hasta 31 de diciembre de 2049.

Las posibilidades de uso de dichos espacios, junto con su gran valor ambiental, condujo al estudio de las distintas soluciones de puesta en valor y explotación de las instalaciones existentes, como también de las que pudieran ser desarrolladas, para mejorar y completar los servicios que se pueden prestar en las mismas.

Tras el análisis de estas posibilidades, se procedió a la licitación, mediante procedimiento negociado con publicidad, de la «Gestión de Servicio Público, modalidad de concesión con realización de obra previa y dotación de equipamiento, para el mantenimiento y explotación integral del club náutico universitario de la Universidad de Granada». Tras el correspondiente proceso de negociación y en el marco de la citada licitación, se resolvió a favor de la empresa Balneario Hotel Clinic Spa Sierra Elvira S.L., la cual, a partir de ahora, procederá a la puesta en valor, conservación y explotación del Club Náutico del embalse del Cubillas, siguiendo todas las obligaciones recogidas en los pliegos de licitación

Entre otras, el concesionario quedaba comprometido a construir y dotar las instalaciones de bar cafetería y restaurante, el acondicionamiento de la parcela y su seguridad para proteger tanto el recinto como los edificios allí existentes, la adquisición de material para la práctica de la náutica y de un pantalán flotante, la remodelación del edificio de sala de botes, vestuarios y duchas y el acondicionamiento de las rampas de acceso al pantano y la instalación de un parque infantil junto a la cafetería restaurante.

Se ha presentado un proyecto de explotación general, en el que se indica el programa de actividades, garantizando la realización del programa náutico que venía ofreciendo el antiguo Servicio de Deportes, ahora Centro de Actividades Deportivas, con unas tarifas a aplicar por el uso y disfrute de las instalaciones, diferenciando a los miembros de la comunidad universitaria de las personas ajenas a la misma.

Además, el adjudicatario ofrece diversas mejoras en las instalaciones deportivas y en las «de playas», aparcamientos náuticos, y otra serie de servicios, que suponen completar la oferta deportiva, de ocio y tiempo libre acorde con las necesidades de la comunidad universitaria. Todas estas actuaciones se llevarán a cabo de forma secuencial, estando prevista la reapertura del Club Náutico a finales de este mes de junio.

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La Universidad de Granada pone en valor el club naútico del Embalse de Cubillas mediante una concesión de gestión de servicio público

La Universidad de Granada consiguió de la actual Confederación Hidrográfica del Guadalquivir la concesión demanial hace años sobre los terrenos, edificaciones e instalaciones del Club Náutico del embalse de Cubillas, en los términos municipales de Albolote y Atarfe (Granada). Dicha concesión se ha prorrogado hasta 31 de diciembre de 2049.

Las posibilidades de uso de dichos espacios, junto con su gran valor ambiental, condujo al estudio de las distintas soluciones de puesta en valor y explotación de las instalaciones existentes, como también de las que pudieran ser desarrolladas, para mejorar y completar los servicios que se pueden prestar en las mismas.

Tras el análisis de estas posibilidades, se procedió a la licitación, mediante procedimiento negociado con publicidad, de la «Gestión de Servicio Público, modalidad de concesión con realización de obra previa y dotación de equipamiento, para el mantenimiento y explotación integral del club náutico universitario de la Universidad de Granada». Tras el correspondiente proceso de negociación y en el marco de la citada licitación, se resolvió a favor de la empresa Balneario Hotel Clinic Spa Sierra Elvira S.L., la cual, a partir de ahora, procederá a la puesta en valor, conservación y explotación del Club Náutico del embalse del Cubillas, siguiendo todas las obligaciones recogidas en los pliegos de licitación

Entre otras, el concesionario quedaba comprometido a construir y dotar las instalaciones de bar cafetería y restaurante, el acondicionamiento de la parcela y su seguridad para proteger tanto el recinto como los edificios allí existentes, la adquisición de material para la práctica de la náutica y de un pantalán flotante, la remodelación del edificio de sala de botes, vestuarios y duchas y el acondicionamiento de las rampas de acceso al pantano y la instalación de un parque infantil junto a la cafetería restaurante.

Se ha presentado un proyecto de explotación general, en el que se indica el programa de actividades, garantizando la realización del programa náutico que venía ofreciendo el antiguo Servicio de Deportes, ahora Centro de Actividades Deportivas, con unas tarifas a aplicar por el uso y disfrute de las instalaciones, diferenciando a los miembros de la comunidad universitaria de las personas ajenas a la misma.

Además, el adjudicatario ofrece diversas mejoras en las instalaciones deportivas y en las «de playas», aparcamientos náuticos, y otra serie de servicios, que suponen completar la oferta deportiva, de ocio y tiempo libre acorde con las necesidades de la comunidad universitaria. Todas estas actuaciones se llevarán a cabo de forma secuencial, estando prevista la reapertura del Club Náutico a finales de este mes de junio.

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El Administrativo acusado de falsear notas de la UGR culpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido hoy la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.
Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.
Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.
Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.
Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.
«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.
La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.
Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.
Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.
La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.
La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.
Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio.
El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.
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El Administrativo acusado de falsear notas de la UGR culpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido hoy la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.
Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.
Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.
Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.
Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.
«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.
La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.
Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.
Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.
La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.
La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.
Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio.
El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.
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El Administrativo acusado de falsear notas de la UGR culpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido hoy la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.
Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.
Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.
Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.
Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.
«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.
La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.
Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.
Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.
La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.
La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.
Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio.
El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.
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El administrativo de la UGR exculpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido este viernes la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.

Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.

Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.

Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.

Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.

«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.

La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.

Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.

Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.

La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.

La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.

Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio. El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.

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El administrativo de la UGR exculpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido este viernes la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.

Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.

Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.

Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.

Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.

«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.

La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.

Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.

Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.

La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.

La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.

Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio. El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.

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El administrativo de la UGR exculpa a su exmujer

La Fiscalía ha mantenido este viernes la petición de cinco años de cárcel para un administrativo y su mujer en el momento de los hechos, acusados de modificar supuestamente expedientes y calificaciones de la Universidad de Granada, de lo que ambos se han declarado inocentes y se han culpado mutuamente.

Durante la vista, el fiscal ha considerado probado que Manuel T.R., empleado como administrativo en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Granada, aprovechándose de su cargo utilizó las claves personales para modificar las calificaciones de su expediente académico y convirtió en sobresalientes las notas de su pareja, Evalia H.M., también acusada como coautora de los hechos.

Fiscalía y la acusación particular han solicitado cinco años de cárcel por un delito continuado de falsedad documental por la modificación continuada del expediente académico de los acusados desde el año 2008.

Los dos procesados, ya divorciados, se han acusado mutuamente de los hechos y han negado conocer las modificaciones en los dos expedientes, comprobadas durante el juicio.

Manuel T.R. se ha desdicho de su declaración inicial, en la que explicó que su entonces mujer no conocía las modificaciones realizadas en sus notas ni la convalidación de créditos hecha para la matrícula de la acusada, en la que se utilizaron documentos falsos para justificar unos estudios que no cursó.

«En ese momento yo quería protegerla y por eso mentí, porque quería que todo lo ocurrido se arreglara en la Facultad, sin tener que llegar a un juicio», ha subrayado el acusado.

La acusada ha explicado por su parte que no conocía que estuviera matriculada en la Facultad de Filosofía de ninguna asignatura y que acudía a clases y tutorías obligada por su exmarido, al que denunció por supuestos malos tratos, y al que ha culpado hoy de todas las modificaciones académicas.

Profesores y personal de la Universidad de Granada han recalcado que la acusada estaba matriculada de varias asignaturas de Historia, a cuyas clases no acudió ni se presentó a los exámenes, pero que descubrieron modificaciones informáticas en su expediente por las que aparecían calificaciones de sobresaliente.

Durante el juicio ha testificado un perito de la Policía Nacional que comprobó que todos los cambios en los expedientes de los dos acusados se hicieron desde el terminal, y con el nombre de usuario y la contraseña del acusado.

La defensa de Manuel T.R. ha pedido su libre absolución argumentando con el testimonio de peritos que sufre depresión y una personalidad «manipulable», y ha responsabilizado a su exmujer de los hechos al considerar que tenía acceso a su puesto de trabajo y conocía las claves y contraseñas del acusado.

La Fiscalía ha mantenido que Manuel T.R. «con el conocimiento y acuerdo de ella y con la intención de obtener ilícito beneficio» realizó quince modificaciones en las matrículas de su mujer, lo que ocasionó un perjuicio económico a la Universidad 793 euros.

Las acusaciones pública y particular han solicitado para ambos cinco años de prisión, una multa de 3.090 euros y la inhabilitación para empleo o cargo público en cualquier administración durante cuatro años y medio. El juicio, que se ha celebrado en la Audiencia Provincial de Granada, ha quedado visto para sentencia.

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La Universidad de Zaragoza, a la vanguardia en difusión de software libre

La Universidad de Oviedo acoge este viernes el II Foro Intercultural Voces del GEMMA que reúne en el Edificio Histórico a estudiantes de 20 países procedentes de ocho universidades.

A lo largo del encuentro, las graduadas del Máster Erasmus Mundus en Estudios de las Mujeres y de Género expondrán los resultados de sus investigaciones, según informa la institución académica.

El encuentro coincide con la celebración del acto de graduación de dos de las promociones del Máster Erasmus Mundus y de las estudiantes del máster universitario de Género y Diversidad, que oferta la Universidad de Oviedo. El Campus de Excelencia Internacional ha financiado la celebración del Foro Intercultural para permitir el desplazamiento a Oviedo de estudiantes de otros países que cursaron en ediciones anteriores el máster Erasmus Mundus de Género y Diversidad.

GEMMA ofrece un programa conjunto en Estudios de las Mujeres y de Género, en el que participan ocho universidades de siete países con diferentes tradiciones y culturas: Universidad de Oviedo (España), Universidad de Bolonia (Italia), Universidad Central Europea de Budapest (Hungría), Universidad de Hull (Reino Unido), Universidad de Lodz (Polonia), Universidad de Utrecht (Países Bajos), Universidad de Granada (España, coordinadora) y, desde 2011, Rutgers, Universidad Estatal de Nueva Jersey (EEUU).

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La Universidad de Zaragoza, a la vanguardia en difusión de software libre

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A lo largo del encuentro, las graduadas del Máster Erasmus Mundus en Estudios de las Mujeres y de Género expondrán los resultados de sus investigaciones, según informa la institución académica.

El encuentro coincide con la celebración del acto de graduación de dos de las promociones del Máster Erasmus Mundus y de las estudiantes del máster universitario de Género y Diversidad, que oferta la Universidad de Oviedo. El Campus de Excelencia Internacional ha financiado la celebración del Foro Intercultural para permitir el desplazamiento a Oviedo de estudiantes de otros países que cursaron en ediciones anteriores el máster Erasmus Mundus de Género y Diversidad.

GEMMA ofrece un programa conjunto en Estudios de las Mujeres y de Género, en el que participan ocho universidades de siete países con diferentes tradiciones y culturas: Universidad de Oviedo (España), Universidad de Bolonia (Italia), Universidad Central Europea de Budapest (Hungría), Universidad de Hull (Reino Unido), Universidad de Lodz (Polonia), Universidad de Utrecht (Países Bajos), Universidad de Granada (España, coordinadora) y, desde 2011, Rutgers, Universidad Estatal de Nueva Jersey (EEUU).

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La Universidad de Zaragoza, a la vanguardia en difusión de software libre

La Universidad de Oviedo acoge este viernes el II Foro Intercultural Voces del GEMMA que reúne en el Edificio Histórico a estudiantes de 20 países procedentes de ocho universidades.

A lo largo del encuentro, las graduadas del Máster Erasmus Mundus en Estudios de las Mujeres y de Género expondrán los resultados de sus investigaciones, según informa la institución académica.

El encuentro coincide con la celebración del acto de graduación de dos de las promociones del Máster Erasmus Mundus y de las estudiantes del máster universitario de Género y Diversidad, que oferta la Universidad de Oviedo. El Campus de Excelencia Internacional ha financiado la celebración del Foro Intercultural para permitir el desplazamiento a Oviedo de estudiantes de otros países que cursaron en ediciones anteriores el máster Erasmus Mundus de Género y Diversidad.

GEMMA ofrece un programa conjunto en Estudios de las Mujeres y de Género, en el que participan ocho universidades de siete países con diferentes tradiciones y culturas: Universidad de Oviedo (España), Universidad de Bolonia (Italia), Universidad Central Europea de Budapest (Hungría), Universidad de Hull (Reino Unido), Universidad de Lodz (Polonia), Universidad de Utrecht (Países Bajos), Universidad de Granada (España, coordinadora) y, desde 2011, Rutgers, Universidad Estatal de Nueva Jersey (EEUU).

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La Universidad de Zaragoza, a la vanguardia en difusión de software libre

La Universidad de Zaragoza puede presumir de ocupar el segundo lugar -entre las 72 universidades, públicas y privadas, que han sido escudriñadas en toda España- en un ranquin nacional de difusión de software libre, siendo únicamente superada por la Universidad de Granada. Así se desprende de un estudio elaborado por la web especializada Portal Programas con la colaboración del Centro Nacional de Referencia de Aplicación de las TIC basadas en Fuentes Abiertas (Cenatic)

Los méritos que suma la universidad pública aragonesa son numerosos, e incluso lidera dos aspectos (difusión y webmetría) estudiados en el informe. El campus de la Comunidad cuenta con una oficina de software libre, lo cual resulta determinante para que este se pueda usar y difundir en todos los ámbitos y niveles de la institución.

Esta oficina es «la más popular» y una de las más activas de todo el territorio nacional, razón por la que ocupa el primer puesto en webmetría (número de páginas de la oficina, número de enlaces nacionales e internacionales desde otras webs…).

Además, la Universidad de Zaragoza es una de las que más usa internamente programas gratuitos -tanto el campus virtual como los servidores del portal web lo son-, lo que coloca al centro aragonés en un segundo puesto en el ámbito de aplicaciones tecnológicas.

Por otro lado, este estudio revela que la Universidad de Zaragoza tiene una participación «bastante activa» en concursos como el Google Summer of Code (GSoC) o el Concurso Universitario de Software Libre (CUSL), en los que los estudiantes colaboran en el desarrollo de varios proyectos.

Aspectos negativos

Como puntos débiles, apuntan desde Portal Programas, apenas hay tres que destacar. Mientras los estatutos de otros centros superiores de educación recogen una declaración de software libre, los de la universidad aragonesa no lo hacen. Además, los contenidos del portal oficial no se encuentran bajo una licencia libre, por lo que no se pueden difundir sin un permiso explícito.

Como último aspecto a corregir, entre las distintas titulaciones que oferta no hay ninguna dedicada específicamente al software libre. Cabe destacar que esto se repite en la oferta formativa de casi todas las universidades.

La USJ, en el puesto 28

A pesar de tratarse de un centro joven, la Universidad San Jorge supera en este ranquin a más de la mitad de los centros españoles. Esto viene dado, entre otras razones, por la presencia de una oficina de software libre en el campus privado y a su apuesta decidida por la implantación de nuevas tecnologías en el ámbito educativo.

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