COSTA
Un estudio coloca el nivel de contaminación del Puerto por debajo de lo establecido
FRANCISCO M. ORTEGA
| MOTRIL
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Díaz Sol destaca la limpieza de la dársena y asegura que no van a bajar la guardia
Se aplican medidas correctoras que reducen el nivel de emisión de partículas
«Somos un puerto limpio que no molesta y no produce ningún prejuicio para su entorno», afirmó el presidente de la Autoridad Portuaria de Motril, Ángel Díaz Sol, después de conocer los datos que refleja un estudio realizado por la Universidad de Granada (UGR) durante el pasado año y que ha sido dirigido por el catedrático de Química Analítica, Alberto Fernández Gutiérrez, quien ha calificado los resultados como de «excelentes» en comparación con otros puertos.
Durante muchos años los residentes en las barriadas portuarias de Santa Adela y El Varadero se quejaban de episodios puntuales de contaminación atmosférica, como consecuencia de la descarga de ciertos materiales y por los frecuentes vientos de componente sur que azotan la zona. También porque la dársena es susceptible de sufrir contaminación atmosférica de origen natural. Desde hace tiempo las quejas vecinales han cesado y hoy las mediciones del aire confirman la falta de elementos contaminantes.
El estudio realizado sobre la contaminación atmosférica del Puerto de Motril por la Universidad de Granada ha dado como resultado unos niveles por debajo de los límites legales permitidos. Lo más significativo del análisis es que, dentro de los parámetros evaluados, cerca de la mitad de las partículas tienen su origen en fuentes naturales de contaminación y, en algunos casos, supone más del 50% las que están presentes en el aire como concluyen, de forma sorprendente, los datos medidos durante doce meses a través de cinco filtros de partículas en suspensión ubicados en el recinto portuario. En menor porcentaje influye el movimiento de tierras realizado en zonas cercanas y las carga, descarga y almacenamiento de graneles sólidos que tienen lugar en el puerto.
Es por ello que el presidente Autoridad Portuaria se compromete a «no bajar la guardia», a cumplir con la guía de buenas prácticas de descarga y a bonificar en las tasas portuarias a quien se comprometa con ellas. «Tomaremos todas las medidas que sean necesarias para corregir cualquier repunte que se pueda producir de contaminación», afirmó Díaz Sol.
El Puerto de Motril, sensible a la contaminación atmosférica, realiza controles de la calidad de aire desde el año 1997, periodo durante el cual se han aplicado diferentes medidas correctoras que reducen los niveles de emisión de partículas derivadas de su actividad y su aumento en el último año ha acrecentado los niveles de calidad ambiental.
El citado estudio concluye que la naturaleza de las partículas en suspensión son inorgánicas en su mayoría y las fuentes naturales de contaminación representan casi la mitad.
Celestina y dolomita
Los materiales que han dado picos más elevados -siempre por debajo de los límites permitidos- han sido la celestina y la dolomita, un mineral que se encuentra de forma natural en las arenas, que sitúan su tasa entre el 20 y el 30 por ciento.
Otros materiales con escasa presencia son el cemento, caolín, abonos, orujo y trigo. Igualmente los movimientos de tierras y el tráfico interno y externo al puerto también generan contaminación por partículas de pequeño tamaña como las arcillas.

