¿Por qué?
Los planes de estudios actuales se caracterizan por una cierta rigidez, tanto por la limitada posibilidad de elección por parte del estudiantado como por las dificultades para su modificación de una forma ágil, que dé respuesta rápida a los retos que plantea la sociedad y a los cambios del entorno socioeconómico. Esto hace necesario y urgente un mayor dinamismo a la hora de su modificación y adaptación a los requerimientos de la sociedad al objeto de poder captar talento entre el estudiantado. Asimismo, se requiere que los actuales sistemas de calidad y acreditación se transformen en instrumentos eficaces para conseguir una mayor flexibilidad de los títulos.
¿Cómo?
Avanzando hacia una mayor flexibilidad curricular en el diseño y modificación de los planes de estudio. Optimizando los recursos y capacidades de que dispone la Universidad para salvar los obstáculos que dificultan la actualización de los mismos a los cambios que se producen en la sociedad, la demanda del estudiantado y el entorno socioeconómico.
Acciones prioritarias
Implicar al personal de gestión en la misión y objetivos de la Universidad, otorgándoles verdadero protagonismo en la toma de decisiones y en el cambio organizativo.
Potenciar espacios de trabajo colaborativo, generación de ideas y gestión interfuncional.
Apostar decididamente por una política de gestión de recursos humanos que prime fundamentalmente la captación de talento mediante la búsqueda de perfiles profesionales cualificados que respondan a las necesidades reales de la institución y a los retos a los que se enfrentará en el futuro derivados de la necesaria transformación digital.
Alinear la estrategia de la institución en todas sus funciones con la internacionalización y la transformación digital.
Fomentar el trabajo en redes institucionales de carácter informal para impulsar sinergias y conducir a procesos de transformación mediante aprendizajes compartidos.