¿Por qué?
En la actualidad existe una demanda creciente por parte de la sociedad, en general, y del tejido productivo, en particular, de nuevas fórmulas formativas flexibles e inclusivas que den respuesta a las necesidades de aprendizaje que se extiende a lo largo de la vida . El potencial de conocimiento de la plantilla de profesorado, la experiencia acumulada en los últimos años en el uso de metodologías virtuales y la extraordinaria dotación de medios digitales, suponen una extraordinaria oportunidad para convertir a la UGR en un referente a nivel nacional e internacional en oferta académica de excelencia para quienes busquen formarse a lo largo de su vida profesional, o simplemente como personas íntegras.
¿Cómo?
Fomentando una oferta formativa orientada a satisfacer las demandas de aprendizaje permanente que plantea una sociedad basada en el conocimiento. Apostando por la configuración de esta formación flexible, modular e inclusiva, que incorpore fórmulas como las basadas en las microcredenciales que reconozcan competencias, a nivel nacional e internacional.
Acciones prioritarias
Fomentar una oferta formativa amplia y de calidad orientada a satisfacer las demandas de aprendizaje permanente que plantea la sociedad actual, que contribuya a que la ciudadanía mejore sus competencias y aptitudes para favorecer la empleabilidad y su adaptación laboral, así como su realización personal y el ejercicio de una ciudadanía activa.
Concienciar al estudiantado sobre la importancia de adquirir una cultura de aprendizaje a lo largo de la vida que reconozca sus beneficios en términos de valor personal, social y económico.
Sensibilizar a los agentes sociales, económicos y políticos sobre la importancia de colaborar con la Universidad en la formación a lo largo de la vida.
Arbitrar sistemas de orientación y de formación permanente que posibiliten la creación de pasarelas entre el tejido productivo y la UGR que potencien la recualificación profesional y la transferencia de conocimiento a la sociedad.