¿Por qué?
La Universidad es un actor clave de la cooperación para el desarrollo reconocido tanto a nivel estatal como autonómico y, por tanto, también un actor clave para la consecución de los ODS. Asumir esta responsabilidad, conlleva ahondar en el compromiso solidario de la Universidad con los países y sectores sociales más desfavorecidos. A su vez, para la UGR, las acciones de cooperación con socios en países de menor desarrollo humano son claves para el éxito de nuestra internacionalización, y constituyen fuentes de importantes aprendizajes para nuestro estudiantado y personal como ciudadanos de un mundo cada vez más interdependiente e interconectado.
¿Cómo?
Reforzando la estructura y planes de cooperación al desarrollo de la UGR. Incorporando a un mayor número de estudiantes y de personal, y visibilizando su potencial transformador. Promoviendo una verdadera cooperación mutua, un aprendizaje mutuo, esencial para la paz y la prosperidad futuras de todo el planeta.
Acciones prioritarias
Fomentar en la medida de las posibilidades presupuestarias que se alcance el 0,7% del presupuesto de la UGR dedicado a la ayuda oficial al desarrollo.
Impulsar programas de cooperación con universidades socias en países de menor nivel de desarrollo humano con el fin de facilitar el fortalecimiento de los sistemas universitarios locales y desarrollar proyectos conjuntos docentes e investigadores con socios prioritarios en países de bajo nivel de desarrollo humano.
Fomentar la movilidad saliente de estudiantado y personal hacia universidades socias en países de bajo nivel de desarrollo humano, como instrumento de sensibilización y educación para el desarrollo.
Defender a través de los foros universitarios internacionales los valores esenciales europeos de la democracia, la igualdad y el estado de derecho, especialmente en aquellos entornos en los que se encuentran en riesgo o cuestionados.
Impulsar programas de acogida de personas refugiadas y demandantes de asilo que deseen realizar o continuar sus estudios universitarios o continuar con su labor académica o profesional, garantizando para ello sistemas de acceso y admisión adaptados a su situación.
Promover acciones de Educación para el Desarrollo que contribuyan a dar a conocer, sensibilizar y movilizar a la comunidad universitaria sobre los problemas globales de desigualdad, pobreza y crisis medioambiental, y que promuevan una ciudadanía solidaria.