La Alhambra alberga un centenar de especies animales que conviven en unas circunstancias especiales, no sólo por la belleza de un entorno plagado de turistas, también porque habitan un recinto urbano rodeado de espacios naturales protegidos. No obstante, no existe un censo exhaustivo de la fauna, ni investigaciones que analicen este característico ecosistema. Por ello, los expertos reunidos en el curso del Centro Mediterráneo ‘La Alhambra verde: Patrimonio, paisaje y biodiversidad’ han reclamado hoy la necesidad de promover estudios sobre las poblaciones que residen en el recinto nazarí.
El coordinador de proyectos de ‘Defensa y Estudio del Medio Ambiente’ (DEMA), Manuel Martín López, ha abordado en su ponencia las peculiares características de la Alhambra como ecosistema. “Se trata de una zona urbana en contacto con espacios protegidos como Sierra Nevada, la Sierra de Huétor o el parque periurbano”, aclara Martín.
A estas singulares características se suma el aprovechamiento turístico del ecosistema, que posibilita la relación entre los visitantes y la fauna. La acción humana tiene consecuencias sobre las especies animales y éstas inciden en la gestión del monumento. Esta interrelación tampoco se ha analizado, según el experto. “Sólo contamos con un breve inventario de especies, pero el recinto, a pesar de sus dimensiones delimitadas, alberga una gran diversidad”, reconoce Martín.
Muestra de esta variedad son el centenar de especies que, según el biólogo, pueblan el palacio nazarí y sus jardines. Entre ellas destacan el gavilán, la perdiz, la garza real, el chotacabras, el cárabo, el mito, además de otras que se observan esporádicamente como la cabra montés y el zorro.
Protección del cernícalo
Pero sin duda la especie más mimada de la Alhambra es el cernícalo primilla o Falco naumanni. Se trata de un ave que vivía en la antigüedad en el recinto, pero desapareció en la década de los 30. Para recuperar esta rapaz, el Patronato inició un proyecto, en 1999, que consistió en la liberación cada año de entre 20 y 50 pollos nacidos en cautividad en el Centro de Cernícalo Primilla de DEMA en Almendralejo (Badajoz). Para ello, se recreó el ambiente de una colonia natural y se alojó a un grupo de ejemplares en unos jaulones habilitados en el lugar de reintroducción.
En los seis años de liberaciones llevados a cabo entre 1999 y 2005 se liberaron 229 pollos de cernícalo primilla, el 27,5 por ciento de los cuales ha vuelto a la Alhambra después de su migración anual para pasar el invierno en el África subsahariana.
Desde que en 2002 se instalaran en el recinto del monumento los primeros ejemplares reproductores, el entorno de la Alhambra cuenta en la actualidad con una colonia compuesta por una decena de parejas de aves.
Este refuerzo hizo que aumentara la población, no sólo en el recinto, sino en las zonas colindantes El proyecto ha permitido además detectar 28 enclaves de las comarcas cercanas a la capital y más propicias para la nidificación del cernícalo, como El Temple, Alhama de Granada y La Vega.
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Referencia
Manuel Martín López, coordinador de proyectos de ‘Defensa y Estudio del Medio Ambiente’ (DEMA).
Tlf. 630 64 86 58
Correo e. lolodema@demaprimilla.org
Web. http://www.demaprimilla.org
