Un grupo de científicos del departamento de Geodinámica de la Universidad de Granada y del Instituto Geológico y Minero de España (perteneciente al Ministerio de Educación y Ciencia) ha estudiado los mecanismos de funcionamiento de los acuíferos kársticos en clima mediterráneo, demostrando que los ríos, en contra de lo que se pensaba, no tienen porqué constituir necesariamente una barrera infranqueable para el flujo del agua subterránea.
Este trabajo pionero, realizado por Antonio González Ramón y dirigido por los doctores Manuel López Chicano y Juan Carlos Rubio Campos, ha tomado como base el estudio del acuífero kárstico de las Sierras de Pegalajar y Mojón Blanco, situado en el borde norte de la Cordillera Bética y declarado provisionalmente como sobreexplotado desde 1992. Esta declaración fue motivada por la desecación del manantial de la Reja, cuyo nacimiento se produce en pleno casco urbano de Pegalajar, a causa de la explotación de los recursos hídricos subterráneos para abastecimiento a los núcleos de Mancha Real, Pegalajar y La Guardia (en la provincia de Jaén).
La investigación ha demostrado que ríos tan importantes como el Guadalbullón no constituyen barreras infranqueables para el flujo del agua subterránea, como tradicionalmente se ha supuesto. Las técnicas de investigación basadas en estudios de evoluciones piezométricas, hidroquímicos e isotópicos del agua subterránea han permitido descubrir que ésta cruza el río Guadalbullón de una margen a otra gracias a la existencia de una estructura geológica que lo favorece, sin que este agua se vea influenciada por la que circula por el río.
Los datos analizados
El estudio realizado por los científicos se ha basado en la recogida y análisis de datos hidroquímicos y de isótopos ambientales del agua subterránea de los acuíferos que constituyen estas sierras y de los acuíferos vecinos, junto a la información piezométrica disponible y la aportada por numerosos trabajos previos llevados a cabo por diversos organismos de la administración. El análisis conjunto de toda esta información ha permitido definir un novedoso modelo de funcionamiento hidrogeológico que logra explicar la mayoría de las incógnitas existentes, a la vez que permite definir con precisión los recursos hídricos dependientes de estos acuíferos y plantear un nuevo esquema de explotación sin afección a manantiales emblemáticos como el manantial de la Reja.
“El modelo de funcionamiento hidrogeológico que resulta de la investigación ha servido de base para la elaboración del Plan de Ordenación de Extracciones del acuífero de Mancha Real-Pegalajar, que pretende solucionar los problemas sociales relacionados con la explotación del agua subterránea en la zona”, explica el autor de este trabajo.
Algunas de las medidas decididas en este Plan ya han sido puestas en marcha y han demostrado su utilidad. Además se está trabajando en la implementación del resto de medidas que deben culminar con la total recuperación del manantial de la Reja. La investigación realizada en la UGRha puesto de manifiesto la importancia del conocimiento detallado de la geometría de las estructuras geológicas, para poder explicar las pautas de almacenamiento y circulación del agua subterránea en acuíferos calcáreos karstificados que han sido fuertemente plegados y fracturados.
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Referencia
Antonio González Ramón. Departamento de Geodinámica de la Universidad de Granada. Tfno: 958 183143. Móvil: 699 513298
Correo e.: antonio.gonzalez@igme.es