Estos resultados son contrarios a otros estudios, que han demostrado que el periodo de gestación es una etapa en la mujer donde se observa un declive tanto del deseo como de la satisfacción sexual. Sin embargo, afirman las investigadoras, “respecto de otros estudios, han demostrado que la satisfacción sexual plena de la mujer correlaciona con el sentimiento de felicidad por estar en periodo de gestación, sintiéndose más atractivas al final del embarazo que antes del mismo. Una segunda explicación, puede encontrarse en los cambios en las prácticas sexuales que se producen durante esta etapa y que han sido informados por diferentes autores”.
El embarazo es una etapa muy especial para la mujer, durante la cual se manifiesta un gran número de emociones (ansiedad, depresión e inestabilidad emocional). Sin embargo, y a pesar de la importancia de estas alteraciones emocionales, uno de los problemas terapéuticos más observados ha sido la ausencia de un tratamiento apropiado. “Se han utilizado entre otros –afirman las investigadoras– los fármacos antidepresivos, aunque ninguno parece ser seguro para el desarrollo del feto”.
Un aspecto muy importante en estas alteraciones emocionales es evaluar si están presentes durante todo el periodo de gestación, o si por el contrario son más frecuentes en determinados momentos del embarazo. “El deseo sexual y su relación con el estado de gestación, según María Paz Bermúdez, es otra de las variables que ha centrado el interés de diversos autores. En este sentido, algunos estudios han observado que durante el embarazo la mujer experimenta una disminución del deseo sexual, debido entre otros factores, a los cambios experimentados físicamente y a las alteraciones de los niveles hormonales. Si bien es cierto que existen diferencias individuales, el embarazo suele ir acompañado de una disminución del deseo sexual, de la frecuencia del coito y del orgasmo. Sin embargo, otros estudios no han observado estos cambios en el deseo sexual, debido principalmente los cambios en las prácticas sexuales observados durante esta etapa.”
Para evaluar estos aspectos, las investigadoras de la Facultad de Psicología de la Universidad de Granada, María Paz Bermúdez y Ana Isabel Sánchez, realizaron una investigación con dos objetivos principales. El primero consistía en evaluar si existían diferencias a título emocional entre mujeres que se encontraban en el primer, segundo y tercer periodo de gestación respectivamente. Para ello seleccionaron un conjunto de variables (depresión, ansiedad estado, ansiedad rasgo, ira estado, ira rasgo, temperamento, reacción y expresión de ira), que fueron evaluadas seleccionando los instrumentos más adecuados para cada variable en concreto. El segundo objetivo propuesto por las investigadoras fue el de evaluar si hay o no diferencias en el deseo sexual inhibido en función del periodo de gestación.
Los resultados obtenidos mostraron que, en palabras de las autoras del estudio, “el estado emocional de la mujer varía en función del periodo de gestación. Concretamente, los datos arrojaron diferencias estadísticamente significativas entre las mujeres que se encontraban en el periodo entre los 0 y 3 meses de gestación y aquellas que se encontraban en el periodo entre 3 y 6 meses en las variables depresión y ansiedad rasgo. Las mujeres que se encuentran en el periodo de gestación entre 3 y 6 meses presentan mayores niveles de depresión y ansiedad rasgo que el resto de mujeres gestantes. Estos datos pueden deberse a que durante el primer trimestre, el estado de gestación es apenas perceptible. Durante el segundo trimestre de gestación, es cuando se producen los cambios físicos como consecuencia del embarazo y la futura madre debe aceptar esos cambios y afrontar la nueva situación; ese afrontamiento suele ir acompañado de respuestas de ansiedad y conductas depresivas. Una vez habituada al nuevo estado las respuestas de depresión y ansiedad disminuyen”.
Respecto al deseo sexual inhibido, los resultados no arrojaron diferencias estadísticamente significativas en esta variable en la muestra de mujeres embarazadas en función del periodo de gestación. “Sin embargo, afirman las investigadoras, aunque los resultados no muestran estas diferencias significativas, observamos cómo a medida que avanza el periodo de gestación el deseo sexual inhibido se incrementa, siendo las mujeres que se encuentran entre el sexto y noveno mes de gestación las que presentan mayor deseo sexual inhibido, que aunque no es estadísticamente significativo es importante desde el punto de vista clínico”.
Para mayor información: María Paz Bermúdez Sánchez.
Departamento de Psicología Evolutiva y de la Educación
Universidad de Granada.
Tfno: 958 249037
Correo e.:maripaz@ugr.es