La reducción de 130 millones de euros en el conjunto de las universidades de Andalucía dentro del plan de ajuste que ha tenido que realizar la administración andaluza como consecuencia del «hachazo» del gobierno del PP a la comunidad autónoma, hace que la preocupación en el conjunto de los trabajadores de este ámbito suba por momentos y vean con incertidumbre su futuro más inmediato, ya que en el plan de reducción de gastos no dice a los órganos de gobierno de los centros universitarios cómo tiene que realizar esta reducción, sino que son sus direcciones quienes decidirán por donde y a quienes reducen. En este contexto el coordinador provincial de Izquierda Unida de Granada, Manuel Morales, que ha estado reuniéndose con grupos de estos trabajadores en éstas últimas semanas, cree que en cuestión de salarios la reducción debe hacerse con criterios de progresividad donde sea necesario, siempre salvaguardando a los mil-euristas, pero sobre todo en la eliminación de gastos innecesarios y por supuesto sin despidos. El responsable de IU pide una redistribución justa de las cargas, pero sobre todo que no se aplique simplemente una reducción de un 5% lineal a todo el personal por igual como parece ser que se ha planteado en algunas universidades.
En este sentido el Coordinador de IU destaca el esfuerzo realizado por la Universidad de Granada en la política de austeridad que está llevando a cabo con la eliminación de gastos innecesarios, «mientras otras universidades han sido menos disciplinadas en este sentido».
Desde Izquierda Unida reclaman que tanto en las universidades como en los entes y agencias instrumentales de de la Junta de Andalucía, el necesario ajuste del presupuesto se haga con un criterio socialmente justo y de progresividad. El ajuste andaluz exige que haya una reducción de un 5% de la masa salarial en las agencias y demás entes instrumentales de la Junta de Andalucía además de la reducción en las universidades antes mencionada. En opinión de Manuel Morales, esto debe de hacerse con los mismos criterios que se han realizado en el conjunto de la administración Andaluza.
En primer lugar con la reducción de altos cargos «innecesarios» como directivos y demás que se han ido colocando durante años atrás sin ningún tipo de criterio de selección y que han aumentado el gasto de salarios sin necesidad. Como segundo elemento a tener en cuenta, Morales considera que hay que salvaguardar los ingresos y el salario de de los escalones inferiores de dichas agencias, especialmente todos aquellos trabajadores y trabajadoras que ganan escasamente 1.000 euros mensuales, «nadie por debajo de esta cantidad debe ver recortado su salario». En tercer y último lugar salvaguardar los puestos de trabajo, «no se debe reducir la masa salarial a base de despidos, sino a base de una reducción progresiva en la que quienes más tengan, los escalones más altos de esa administración puedan ver reducido un 10% su salario, y que a los escalones más bajos se les respete al máximo sus ingresos.