Es la industria del sector del entretenimiento que más dinero mueve, cada mes nacen nuevas propuestas y más de un tercio de los españoles juegan regularmente con ellos. Pero, ¿cuál es la clave del éxito de un videojuego? Un grupo de científicos de la Universidad de Granada (UGR) ha establecido por primera vez qué características definen el concepto de ‘jugabilidad’ de un videojuego; es decir, los factores que debe tener para triunfar entre los usuarios y evitar que se cansen de él.
Para llevar a cabo esta investigación, realizada en el Departamento de Lenguajes y Sistemas Informáticos de la UGR, sus autores se basaron en su propia experiencia y en proyectos previos en los que han desarrollado herramientas educativas y videojuegos con fines educativos, según informó ayer en un comunicado la Universidad de Granada. «Esto nos ha ayudado a saber qué es lo que quieren los niños en los juegos y qué es lo que ellos entiende por diversión», destaca el autor principal.
Abstracto
Según explicó el investigador José Luis González, la ‘jugabilidad’ es un concepto abstracto y difícil de definir, «debido a que posee características tanto funcionales, inherentes a todo sistema interactivo, como no funcionales, relacionadas con las experiencias que obtiene el jugador al jugar».
Así pues, se define la ‘jugabilidad’ como «el conjunto de propiedades que describen la experiencia del jugador ante un sistema de juego determinado, cuyo principal objetivo es divertir y entretener de forma satisfactoria y creíble, ya sea solo o en compañía».
A la luz de los resultados de esta investigación, los científicos concluyen que los videojuegos tienen sus propias reglas para formalizarse y evaluarse. «Creemos que, con este estudio, ponemos una pequeña piedra para que lo desconocido y aquello de lo que antes todo el mundo hablaba sea ahora más conocido y estandarizado según se demanda en la actualidad de los sistemas interactivos orientados al ocio electrónico».
El trabajo empezó desde lo más bajo: qué es un videojuego, qué partes lo componen y cómo se relacionan esas partes para empezar a construir todo a partir de ahí. En definitiva, «hemos logrado modelizar los videojuegos, esto es, crear un modelo de videojuego teórico que nos sirva para estudiar cualquier aspecto relacionado con ellos».