Inicio / Historico

Un nuevo modelo matemático permite predecir lesiones deportivas a partir de ecuaciones

Un nuevo modelo matemático permite predecir lesiones deportivas a partir de ecuaciones

Investigadores de la Universidad de Granada (UGR), de la Pablo Olavide de Sevilla (UPO), y del Instituto Vicente Espinel de Málaga han demostrado que las lesiones que afectan a los miembros inferiores en los deportes de más impacto, como el fútbol, el atletismo o el baloncesto, se pueden prever mediante el uso de ecuaciones de regresión logí­stica.

Investigadores españoles han desarrollado un nuevo modelo matemático que permite predecir lesiones deportivas a partir de una serie de ecuaciones. Su trabajo ha demostrado que las lesiones deportivas que afectan a los miembros inferiores en los deportes de más impacto, como el fútbol, el atletismo o el baloncesto, se pueden predecir mediante el uso de ecuaciones de regresión logí­stica.

Este artí­culo ha sido publicado en la revista «Apunts. Medicina de L’esport», y en él han participado Antonio Fernández Martí­nez (Universidad Pablo de Olavide), Juan Carlos de la Cruz Márquez, Belén Cueto Martí­n y Juan Carlos de la Cruz Campos (Universidad de Granada) y Santiago Salazar Alonso (Instituto Vicente Espinel de Málaga).

Como apuntan los investigadores, la identificación de los factores que producen las lesiones podrí­a capacitar a entrenadores y deportistas para modificar los programas de entrenamiento y así­ prevenir futuros daños. Y es que, aunque tradicionalmente las investigaciones de la medicina deportiva se han centrado en gran medida en el diagnóstico y en los aspectos terapéuticos de las lesiones deportivas, la adecuada prevención, un rápido diagnóstico y el tratamiento idóneo podrán posibilitar que la carrera deportiva de un deportista no se vea truncada -afirman los investigadores- y que logre las metas personales y profesionales que correspondan a su verdadero potencial».

Factores que provocan una lesión

Los investigadores destacan que hay 3 factores generales que desempeñan un papel predominante en el riesgo de padecer una lesión: técnicas incorrectas en el entrenamiento, equipamientos inadecuados o deteriorados, y anormalidades biomecánicas y antropométricas. Este último grupo de factores han sido el punto de partida de su trabajo, donde intentaron descubrir el riesgo potencial de lesión que puede tener un deportista a partir de determinados parámetros antropométricos en los miembros inferiores.

La incidencia de las lesiones en los deportistas jóvenes es bastante elevada, tal y como apuntan los autores de este artí­culo. Así­, 998 de cada mil jóvenes que practican baloncesto sufren en algún momento alguna lesión, lo que convierte este deporte en el que más incidencias padecen. Le sigue el balonmano, con 814 de cada mil deportistas lesionados, y el voleibol, con 548. El artí­culo refleja que el 39% de los españoles practican algún deporte, aunque sólo el 6% de ellos lo practica diariamente. La mitad de ese 6% padecerá algún tipo de lesión leve a lo largo de su vida.

Una lí­nea de investigación reciente

Los estudios sobre lesiones deportivas son un fenómeno relativamente reciente. El primer í­ndice predictor de lesiones fue descrito por Shambaugh en 1991, empleando como variables dependientes el desequilibrio del peso en apoyo bipodal y la desviación del ángulo Q del cuadriceps.

Basándose en su trabajo, y en el de otro autor llamado Grubbs, los cientí­ficos españoles han aplicado el í­ndice de Shambaugh en jugadores de baloncesto en relación con la exposición práctica, incluyendo sujetos de ambos sexos. Así­, a partir de estas investigaciones, los autores han sometido a análisis las diferentes variables predictoras en una población deportiva diferente, considerando atletas de carreras y saltos de ambos sexos y con edades comprendidas entre los 14 y los 18 años. Su objetivo fue hallar una herramienta válida para predecir el riesgo de lesión en la población citada, obteniendo un algoritmo matemático al que han denominado ‘índice de lesiones de Fernández’, que responde a la siguiente fórmula:

1/1 + e–(0,757 _ AQI – 0,647 _ DGM2)

donde AQI es el ángulo Q del miembro inferior izquierdo, y DGM2, el cuadrado de la diferencia entre el grosor de los muslos.

Estas investigaciones muestran que el análisis por regresión logí­stica puede ser un método válido en la discriminación de parámetros antropométricos relacionados con las lesiones deportivas. No obstante, advierten los autores de este trabajo, es necesario seguir investigando para consolidar la idea de que el análisis de la estructura corporal del deportista puede ser un buen instrumento en el pronóstico de lesiones en el futuro, y puede ayudar a mejorar tanto sus logros deportivos como su salud.
Descargar