Un estudio evidencia que el paciente desea ser informado y escuchado
“Expectativas de los pacientes sobre la toma de decisiones ante diferentes problemas de salud” es el título de un artículo recientemente publicado en la revista Gaceta Sanitaria. El trabajo ha sido realizado por los investigadores de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), Ana Delgado, Luis Andrés López y Lorena Saletti, en colaboración con Juan de Dios Luna (Universidad de Granada) y Natalia Gil y Almudena Puga (Centro de Salud Gran Capitán, Granada).
El estudio concluye que los pacientes, en su mayoría, desean ser escuchados, informados y tenidos en cuenta, y, en menor medida, desean tomar la decisión de forma autónoma. Según la investigación, este resultado indica que “no siempre los pacientes desean más poder para decidir, porque ello aumenta su responsabilidad y podría ser mal tolerado”. Así, “La mejor opción clínica sigue siendo atender a las preferencias individuales indagando las expectativas del paciente durante la relación asistencial”.
El objetivo prioritario de la investigación ha sido conocer las expectativas de los pacientes sobre la toma de decisiones ante diferentes problemas de salud cuando consultan con su médico de familia. Además, el trabajo ha pretendido identificar las características de los pacientes y de los profesionales sanitarios relacionadas con dichas expectativas, con especial interés por el sexo de ambos.
Resultados
El artículo concluye afirmando que las expectativas sobre la toma de decisiones dependen del problema estudiado. Las personas entrevistadas priorizan la escucha, la información y que el médico tenga en cuenta su opinión antes que participar en las decisiones, y esto ocurre para los cinco problemas estudiados (Dolor de pecho, flujo anormal, depresión y tristeza, problema familiar y resfriado).
Como se ha señalado, no todos los pacientes desean implicarse activamente en la decisión, pero la gran mayoría quiere compartir información y que sus valores sean tenidos en cuenta.
Los valores máximos de deseos de participar se observan para “problema familiar”, en el que el 43 por ciento de los pacientes desea compartir la decisión con el médico y el 6,4 por ciento decidir en solitario. En los otros cuatro problemas, entre el 60 y el 68 por ciento de los pacientes prefiere que decida su médico de familia solo. Sin embargo, las expectativas del paciente de que su médico de familia le escuche, le informe y tenga en cuenta su opinión alcanzan proporciones muy elevadas, aunque variables según el problema de que se trate.
La mayor gravedad se asocia con un menor deseo de participar, en el estudio esto ocurre para el problema más grave, “dolor en el pecho” (31,9 por ciento). Además el deseo de participar en algún grado es máximo para un problema psicosocial, el “problema familiar” (49,2 por ciento). En cuanto al sexo del paciente, las mujeres tienen menos expectativas de participar para depresión y para problema familiar, y quienes tienen una médica esperan participar más para problema familiar y resfriado.