La Universidad de Granada estudia desde hace alrededor de siete años restos óseos exhumados en el antiguo Arsenal de La Carraca (Cádiz, sur de España) que alcanzarían pertenecer al general Francisco de Miranda, estimado precursor de la emancipación americana contra el Imperio español, intelectual venezolano y amigo de armas de Simón Bolívar.
Un cuadro científico encabezado por el profesor José Antonio Lorente estudia los restos óseos que alcanzarían pertenecer a Miranda y que fueron extraídos de la fosa común del antiguo aflicciónl gaditano, donde Miranda fue enterrado en 1816, tras haber pasado alrededor de los recientes siete años de su vida en presidio, atrapado por el ejército de la América española.
Poco más de dos años quedan para el bicentenario de la muerte del que es estimado «padre» de la emancipación americana, continente para el que arribó a redactar una Constitución política que reflejaba su idea de una América unida desde la frontera norte de México hasta la Patagonia, aunque sin embargo no puede estar al tanto dese si para en este momento existiran concluido los trabajos que determinen cuáles son sus restos, según han aviso a Efe fuentes universitarias.
El Gobierno de Venezuela encargó en 2006 a la Universidad de Granada (sur de España) estos trabajos científicos que son enormemente pesados cuando se trata de comparar, como en este caso, el ADN con el de otros restos óseos de familiares.
Los factibles restos del general Miranda serán comparados con los de su hijo Leandro Miranda, que el pasado mes de mayo fueron exhumados en París, donde está enterrado.
La investigación científica se centra ahora en dejar sentado una comparación de ADN del cromosoma «Y» y ADN autosómico de los diversos restos exhumados en La Carraca -entre los que pueden estar los de Miranda- y los de su hijo Leandro.
Los restos de la fosa común de La Carraca fueron exhumados en 1972 y el año siguiente se efectuó un estudio antropológico que no pescó resultados concluyentes, Pese que se apartaron 14 huesos que alcanzarían pertenecer al militar por su antigüedad y por las especificaciones corporales de peso y talla, de entre los huesos de 19 cadáveres de la fosa común.
Desde en este momento, los probables restos del Generalísimo Miranda se conservan en un arcón en la celda en que estuvo preso los recientes años de su vida en Arsenal de La Carraca, unas instalaciones de la Armada española en San Fernando (Cádiz).
Los trabajos de la Universidad de Granada se ubican en coordinación con los de la comisión presidencial dirigida por la historiadora venezolana Carmen Bohórquez, una de las máximas especialistas en la vida y la obra de Miranda.
Venezuela tiene una tumba preparada para Francisco de Miranda desde finales del siglo XIX, en el Panteón de los Libertadores, a la derecha de la tumba de Bolívar, y desde en este momento han sido múltiples los tentativas de encontrar e identificar sus restos, en lo que ya es un asunto pendiente desde hace algo más de un siglo.
Amigo de Catalina la Grande de Rusia, Miranda se formó como militar en España, participó en la Revolución Francesa y se le estima un héroe de la Independencia de los Estados Unidos, al mismo tiempo de ser autor de numerosas obras literarias y de teoría política, algunas escritas en Londres, donde se retiró hasta ser aclamado para poner en ese lugarse al frente de la innovación independentista americana.
Ya en Venezuela, su capitulación ante el general español Monteverde, convencido de que si enfrentaba sus tropas en ese instante las perdería por perfecto y la causa americana quedaría sin salvaguarda por un largo espacio de tiempo, le supuso ser acusado de traición por sus amigos de armas, que lo entregaron a los españoles.
Sobre la actuación de Miranda y las de sus amigos de armas, comprendido Bolívar, en ese instante histórico hay diversidad de opiniones, como comprueba la reciente novela histórica del escritor canario -los padres de Miranda eran canarios- Juan José Armas Marcelo, titulada «La noche que Bolívar traicionó a Miranda».