Los conservadores obtendrían un 45 por ciento de los votos, frente al 36 por ciento de los socialistas. Son los resultados del Estudio General de Opinión Pública de Andalucía relativo a otoño de 2010. Una encuesta que da, por segunda vez consecutiva en su historia, una victoria a la formación que lidera Javier Arenas.
Por segunda vez en su historia, la encuesta del Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía, el CAPDEA, da la victoria a los de Javier Arenas. Izquierda Unida se mantendría como tercera fuerza política y el resto de partidos se quedarían sin representación parlamentaria.
Los autores de esta encuesta alertan del desencanto de la ciudadanía por el sistema democrático y miran al futuro con pesimismo en el terreno económico. Cuatro de cada diez andaluces creen que las cosas van a seguir igual o incluso van a empeorar. La directora del CAPDEA, Carmen Ortega, asegura que las tendencias ideológicas no cambian pero que la crisis está castigando al partido gobernante.
Según el estudio, elaborado por el Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía, dependiente de la Universidad de Granada, detrás de los socialistas se situaría Izquierda Unida, con el ocho por ciento de los sufragios. La coalición andalucista y Unión, Progreso y Democracia apenas alcanzan el dos por ciento de apoyo y se quedarían sin representación parlamentaria. El desempleo se mantiene como principal preocupación de los andaluces, seguido por la marcha de la economía, la política y la educación.
El estudio evidencia que existe entre los andaluces una sensación de escepticismo económico y de animadversión hacia la política. Además, las valoraciones negativas sobre el funcionamiento de la democracia superan a las positivas. El sesenta por ciento de los andaluces señalan estar poco o nada satisfechos con el actual sistema político.
Los encuestados suspenden a todos los líderes andaluces y nacionales. Hacen juicios negativos tanto de la gestión del Gobierno andaluz como de la oposición. El pesimismo se ha incrementado en veinte puntos respecto a otoño de dos mil ocho.
Según esta encuesta, el PP no obtendría mayoría absoluta, aunque podría gobernar. Los populares dicen que van a evitar caer en la euforia. Pero su secretaria de organización, Ana María Corredera ha asegurado esta mañana en la Onda Local de Andalucía que, tras treinta años, los andaluces han perdido el miedo y son conscientes de que llega la hora del cambio.
Mientras, la presidenta del PSOE andaluz, Rosa Torres, insiste en que, en estos momentos, a su partido, más que las encuestas, le preocupan los problemas de la ciudadanía. Prefiere destacar que el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, vuelve a ser el líder más valorado.
Pese a la intención de voto que refleja esta encuesta, la mitad de los andaluces creen que el PSOE va a salir vencedor en las elecciones andaluzas, mientras que el setenta por ciento de los encuestados adjudica al PP la victoria en las generales. En cuanto al partido político que a los electores les gustaría que ganase en Andalucía, los socialistas sacan dos puntos de ventaja sobre los populares.
Unos datos que conocemos después de que este fin de semana, en la Convención Nacional del partido, los populares andaluces hayan vuelto a afirmar que el cambio en nuestra comunidad es ya imparable.