¿Cuál cree que ha sido el detonante de la creación de un Centro Confucio en la Universidad de Las Palmas?
– El camino no ha sido fácil. Lo solicitamos hace tres años pero ya había cuatro Institutos Confucio en España y el Gobierno chino no pensaba otorgar otro. Sin embargo la situación de Canarias ha sido determinante, como eje tricontinental entre África, América y Europa. Aquí hay muchos residentes extranjeros, de diferentes nacionalidades, hay mucha gente que tiene ganas de estudiar el idioma chino, y la Universidad ha trabajado mucho en establecer lazos con universidades chinas. Todo esto nos ha llevado a la inauguración del Centro Confucio en la ULPGC.
– ¿Qué diferencia hay entre Centro e Instituto Confucio?
– Realmente son lo mismo, la diferencia estriba en la subvención por parte del Gobierno chino. Sin embargo, la actividad es la misma en los centros que en los institutos. En nuestro caso la Universidad Normal de Changchun manda profesores, tenemos las aulas, instalaciones…, pero debemos luchar mucho y dedicar grandes esfuerzos con la ayuda de la sociedad canaria para obtener la categoría de Instituto, porque si tenemos más dinero podemos ofertar más cosas.
– ¿Qué va a caracterizar a Canarias con respecto al resto de centros?
– En Canarias, para empezar, es más difícil acceder a un centro al ser islas, no es como en Alicante, que con el coche puedes acudir a Valencia, aquí tienes que coger un avión o un barco, por eso un Confucio en una Isla es muy importante. Además, en Canarias conviven múltiples nacionalidades, y otra de sus singularidades es su matriz intercontinental, al ser una zona de referencia para Europa, África y América.
– Uno de los grandes compromisos del Centro Confucio de la ULPGC es abrir su oferta a la sociedad. ¿Cuáles son los sectores que prevén con mayor demanda?
– En el acto de inauguración comprobamos que existe mucho interés en Canarias por el aprendizaje del chino. Antes de la inauguración del Centro tuvimos contacto con asociaciones y empresas tanto chinas como canarias. Existe mucho interés en entablar relaciones y para ello es muy importante aprender el idioma. Pero Confucio tendrá otras facetas. Por ejemplo, el miércoles hablamos con el equipo de Baloncesto de la Isla y el Confucio puede ser una plataforma de esponsorización, que empresas chinas sean patrocinadoras del Club de Baloncesto o incluso de equipos de fútbol. Esto no es sólo la lengua china y la cultura china, sino la colaboración empresarial, deportiva, cultural…
– ¿Cómo funcionan los cuatro Institutos que existen en España?
– Los de Madrid y Barcelona están en fase de despegue. El Instituto Confucio de Valencia ya lleva cinco años funcionando y va muy bien. El más antiguo es el de la Universidad de Granada, donde imparten la lengua china desde hace unos 30 años y desde hace mucho tiempo llevan a cabo programas de intercambio entre profesores e investigadores de China y de la Universidad de Granada.
– ¿Cuándo comenzarán a examinar del diploma HSK, fundamental para optar a becas del Gobierno chino?
– Somos el único Centro en Canarias que examina del HSK. Tenemos previsto hacer en septiembre el primer examen de este diploma oficial de la lengua china, dirigido a todos los que estudian nuestro idioma y que quieren beneficiarse de las becas del Gobierno chino. En el caso de Canarias tenemos cinco becas para ir a China, con todos los gastos pagados, un número importante porque sólo se convocan 200 para todos los institutos del mundo.