La Universidad de Granada (UGR) contará el próximo año con los presupuestos «más sociales» de su historia por los que gastará un total de 429,49 millones de euros, un 3,16% más que el ejercicio anteriores, invertidos principalmente el personal, que supone en peso específico el 61,95% de las cuentas, y en inversiones reales, el 25,94% del total.
El rector de la institución académica, Francisco González Lodeiro ha mostrado su «preocupación» por que las obras en las facultades ubicadas en el Campus de la Salud vayan «más rápido que las subvenciones» y ha informado de que se han comenzado los trabajos en Medicina, Ciencias de la Salud y en los Servicios Centrales pero que no se ejecutarán las de Odontología y Farmacia hasta que no se garantice su financiación.
De hecho, la institución sólo cuenta por ahora con el 30% de los 100 millones en los que está presupuestada la obra de las tres facultades ya iniciadas y sólo resta que le llegue el 70% restante, procedente de las subvenciones de las instituciones implicadas, principalmente de la Junta de Andalucía.
«Tenemos que tener la seguridad de que si nos llegan certificaciones de obra las vamos a poder pagar, porque si no tendríamos que hacer frente incluso al 4% más de intereses», ha señalado el rector, que no prevé que comiencen a construirse en 2011 Odontología y Farmacia a no ser que la UGR cuente con presupuesto suficiente.
En el capítulo de ingresos, la institución académica prevé «desde la prudencia» percibir un total de 205,75 millones de euros en transferencias corrientes, 163,42 en transferencias de capital y un total de 56,83 millones de euros en concepto de tasas y precios públicos, según ha detallado este jueves en la presentación del presupuesto el gerente de la UGR, Andrés Navarro Galera.
Las del próximo año son unas cuentas marcadas por la situación general de «incertidumbre» ante la crisis, que conlleva la «temporalidad» de las subvenciones, y que condiciona el comportamiento de la demanda de empresas y la propia capacidad financiera de las familias, un escenario que ha llevado a la UGR a reducir costes abriendo concursos públicos en los principales servicios para obtener las ofertas más ventajosas, y el cierre de centros en función de las necesidades.
La UGR ha apostado por la «austeridad», el rendimiento de la investigación, la calidad y el desempeño de la docencia, la contribución a la inserción laboral de los estudiantes y la responsabilidad social y «solidaridad». En este sentido, ha aumentado el número de becas propias en un 5 por ciento, invertirá 250.000 euros más en prácticas en empresas y en otros 250.000 euros las ayudas sociales para pagos de matrícula y comedores, todo con el objetivo de fomentar el autoempleo, y la creación de empresas.
Según ha recordado el gerente, la UGR cuenta con una importante ventaja para el próximo año derivada de su propia competitividad, puesto que ha obtenido financiación por lograr la calificación de Campus de Excelencia Internacional en 2009 y 2010, con 7 millones de euros; Innocampus, con 14 millones de euros, e Innplanta, con 5,63 millones de euros.
Los gastos de personal, que ascenderán a 266,09 millones de euros, se han reducido un 4,47% con respecto al pasado año, mientras que los gastos corrientes, 38,32 millones, han aumentado un 6,02%. La deuda con entidades financieras se ha reducido a cero y las transferencias corrientes (becas, prácticas y ayudas sociales) aumentan un 50,78% hasta alcanzar los 11,52 millones.
Inversiones reales. Respecto a las inversiones reales, que crecen un 34,23%, la UGR hará un «esfuerzo» en invertir en recursos propios, aumentará un cinco por ciento el Plan Propio de Investigación, y pondrá en marcha, con una inversión de un millón de euros, el nuevo programa de fomento de la productividad científica.
La UGR cuenta con un total de 7.362 proveedores, de los que 5.371 (un 73%) son locales, y el 92% de la pequeña y mediana empresa. La institución es buena pagadora, puesto que el grado de ejecución de los pagos se sitúa en torno al 96 por ciento, y no tiene concursos desiertos por falta de ofertas. Genera asimismo 6.900 empleos directos y otros 6.500 indirectos. Por otra parte, cada estudiante le cuesta de media 6.100 euros, de los que el alumno paga 952 y la UGR financia 5.148.