La Fundación Caja Rural entrega sus premios de medio ambiente
El presidente de Caja Rural, Antonio León, hizo ayer un llamamiento a la concienciación a nivel individual de la necesidad de cambiar nuestros hábitos diarios con actuaciones que ayuden a preservar el medio natural. Dicho llamamiento lo hizo durante la entrega de la primera edición del Premio a la Innovación para la Conservación Agrícola y Medioambiental (Premio Medio Ambiente), de Fundación Caja Rural de Granada.
Cada uno de los cinco proyectos de empresas e instituciones granadinas que resultaron finalistas obtendrá 3.000 euros para la puesta en marcha o desarrollo de los mismos.
La viceconsejera de Agricultura, Eva María Cano Pérez, destacó en su discurso de clausura el deber que tienen los políticos, recogido en el Estatuto de Andalucía, de promover en el medio rural estrategias que asienten la población y fomenten el desarrollo sostenible.
El delegado de Medio Ambiente, Francisco Javier Aragón, felicitó a Caja Rural por su compromiso y valentía al crear estos premios y aseguró que el reto de los próximos años es la educación ambiental, el compromiso en valores.
A la entrega de premios asistieron también el presidente de Diputación, Antonio Martínez Caler, la concejal de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Granada, María Dolores de la Torre, y varios consejeros y directivos de Caja Rural, además del delegado de Economía y Hacienda, Antonio Argüelles, y representantes de distintas instituciones como Asaja y Faeca, entre otras.
El premio a la innovación para la Conservación Agrícola y Medioambiental es una iniciativa puesta en marcha por la entidad para contribuir a fomentar iniciativas y actitudes respetuosas y conservadoras de nuestro entorno natural, según informó Caja Rural en un comunicado. A esta primera edición se han presentado 26 trabajos, todo ellos procedentes de la provincia de Granada. La mayoría son proyectos colectivos de empresas, instituciones y asociaciones.
Fundación Caja Rural de Granada es la organizadora de este certamen y cuenta con la colaboración de las consejerías de Agricultura y Medio Ambiente de la Junta de Andalucía y con la Facultad de Ciencias de la Educación de la Universidad de Granada.
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