Martín Moreno: «La música ha pasado a ser la más social de todas las artes»
El musicólogo aboga por estudios sobre las músicas populares urbanas, que ocupan el 93 por ciento de la actividad musical
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Antonio Martín Moreno. ricardo solís
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Diana DÍAZ
«Mientras que en siglos pasados la música era privilegio de unos pocos, ahora la tenemos hasta en la sopa». Así lo afirmó ayer Antonio Martín Moreno en su conferencia en La Granda. El profesor de Musicología en la Universidad de Granada se defendió de los tópicos y argumentó que «la música ha pasado a ser la más universal de todas las artes, la más social». Para Martín Moreno, uno de los aspectos que más despista a la opinión pública e institucional, para lograr por su parte una visión de la música como ciencia, es su carácter etéreo y sonoro. «¡Y la música genera fuentes increíbles!», exclamó el musicólogo.
La demanda cultural de música va «in crescendo», según Martín Moreno. «Las barreras entre los estilos y tradiciones musicales se está desmoronando, ya que vivimos en una sociedad globalizada, en la que se facilitan los accesos a la información y a la cultura», comentó el profesor. De este modo, el musicólogo habría de virar su sensibilidad hacia los diversos tipos de música folk, jazz, pop, rock, o músicas de fusión.
«Y no podemos dejar de lado a la música mal llamada culta», señaló Martín Moreno. «Aunque echando por tierra esa idea de que la música clásica es sólo cosa de especialistas», concretó el musicólogo. Según el experto, los últimos datos de la UNESCO señalan que la música clásica ocupa tan sólo un 7 por ciento de la actividad musical que se lleva a cabo actualmente. Y es que, desde tiempo atrás, ha existido una tradición académica de pensar en la música como «algo puramente musical», redundó Martín Moreno, quien definió al ser humano como «un ser musical por naturaleza». Por eso, «nadie puede decir hoy día que no entiende la música», como dijo el profesor.
La música se ha convertido en una forma de conocer el mundo y a nosotros mismos. Aunque esto, para Martín Moreno, también tiene su lado más oscuro. «La cercanía de la música puede provocar que la gente la considere menos importante de lo que es», consideró el experto.
Para Martín Moreno, la música es una construcción humana, producto de la cultura y, en consecuencia, varía entre épocas y lugares. De ahí que «el patrimonio musical haya de entenderse en su concepto más amplio», según afirma el musicólogo. Ya no valen cosas como eso de que «lo que no haya sobrevivido al paso del tiempo no merece ser recuperado».