La Fiscalía General y el DIF del estado de Chihuahua, firmaron un convenio científico con el programa internacional de identificación genética DNA-Prokids, fundado por la Universidad de Granada, España y apoyado por la Universidad del Norte de Texas.
El programa DNA-Prokids recopila, estudia y almacena datos genéticos de niños que han llegado a diferentes albergues del mundo y de los cuales se ignora todo antecedente familiar. En el caso particular de Chihuahua, tanto la Fiscalía General como los albergues del DIF han incrementado mucho su trabajo en recuperación y rescate de niños, muchos de los cuales llegan como migrantes extraviados.
Según cifras presentadas en Chihuahua por el fundador del programa DNA-Prokids y profesor en la Universidad de Granada, José Lorente, entre las víctimas del tráfico de personas a nivel mundial, los niños son un conjunto gigantesco.
«Esta epidemia afecta a todo el mundo y se estima que son más de un millón de niños al año, las víctimas de este tráfico», indicó el genetista español. El contar con una base de datos genéticos ayuda a rastrear a las familias de las que los niños fueron sustraídos y aumenta la posibilidad de devolverlos a sus núcleos familiares.
Según el comunicado difundido por la Universidad de Granada, «la Dirección de Servicios Periciales y Ciencias Forenses de la Fiscalía General de Chihuahua y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) del Estado de Chihuahua, suscribieron el día 23 de enero un acuerdo por el que se adhieren al programa internacional de identificación genética DNA-Prokids. El acuerdo permite crear una base de datos genética de niños, de los cuales se desconocen antecedentes familiares».
El director del DIF Estatal, Gerardo Villegas Madriles, señaló que la meta «es crear en el Estado de Chihuahua un banco de datos genéticos de menores de edad que se encuentran expósitos o abandonados, de los cuales se desconoce su origen y antecedentes familiares, o aquellos de los cuales se tenga dudas sobre su nacionalidad, su procedencia o las circunstancias en que fueron acogidos por personas distintas a su familia y motiven recelo, circunstancias que los coloca en una grave situación de vulnerabilidad».
Según el fiscal general, Carlos Manuel Salas, los niños que se encuentran en el DIF tendrán el rastreo genético comprobado y certero de quien reclame ser sus padres; enfatizando en la necesidad de contribuir y participar con este proyecto global cuyo principal objetivo es disminuir, por medio de la tecnología de detección por muestreo de ADN, el tráfico de menores y personas desaparecidas.
En la presentación del acuerdo participaron Daniel Ricardo Jaramillo, director general de Servicios Periciales y Ciencias Forenses de Chihuahua, y el profesos José Lorente Acosta, director del proyecto DNA-Prokids y del Laboratorio de Identificación Genética del Departamento de Medicina Legal de la Universidad de Granada.
«Ésta es una pandemia que afecta a todo el mundo, y por lo tanto la solución es global, son más de 1 millón de niños al año, las víctimas de tráfico de personas a nivel mundial», indicó en su intervención el profesor Lorente, destacando que el problema de trata de niños, es más importante que el propio tráfico de droga.
El programa DNA-Prokids inició su actividad en 2004. Es una iniciativa del Laboratorio de Identificación Genética de la Universidad de Granada, que cuenta con la colaboración del Centro de Identificación Humana del Centro de Ciencias de la Salud de la Universidad del Norte de Texas. El proyecto cuenta, además, con el patrocinio de BBVA, Caja Granada, Fundación Botín (Banco Santander) y Life Technologies (EU).