Los Premios Ideales que hace entrega este periódico cada año desde hace ya más de cinco lustros, concretamente los primeros fueron en 1986, llegan puntualmente a su cita. Esta vez marcarán la agenda social del verano granadino desde la ceremonia que tendrá lugar el miércoles, 20 de junio, en el Hospital Real de la Universidad de Granada, a las 20 horas. En esta edición se contará con la destacada asistencia del presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, que presidirá el acto. Los premios Ideales se entregarán al músico granadino Pablo Heras-Casado; a Cáritas, por su innegable labor solidaria; a Fabriciano González, entrenador que consiguió subir al Granada; al grupo de Comunicación Secuoya, con sede en Granada, y a la Diputación de Granada y Luciano Alonso, ambos por su destacada labor en la promoción del turismo en nuestra provincia.
Para quienes más lo necesitan
Cáritas es un organismo que tiene como misión promover, coordinar, potenciar y orientar la acción caritativa y social de la Iglesia en la Diócesis de Granada, que celebra su cincuenta aniversario. Cáritas está compuesta por voluntarios, que desde la gratuidad colaboran en cuantas actividades se llevan a cabo; profesionales contratados, y socios que contribuyen con aportaciones económicas fijas a la realización de acciones dirigidas a quienes más lo necesitan, los que se encuentran en situación de exclusión o en riesgo de exclusión. Ancianos, infancia, desempleados, inmigrantes, minorías étnicas, transeúntes, etc…, son colectivos objeto de la acción de Cáritas. Caritas se convierte a veces en la última y feliz esperanza para muchos residentes en la provincia de Granada.
El poderoso entusiasmo de un músico
Pablo Heras-Casado nació en Granada en 1977 y siempre tuvo claro que quería dedicarse a la música y llegar a ser director de orquesta. También sabía que no lo iba a tener fácil. Pero con tesón ha labrado una brillante carrera como director de orquesta, con proyección internacional. Ya se ha puesto al frente de orquestas de elevado prestigio como la Filarmónica de Berlín, la BBC Philharmonic Orchestra, la Orchestre Philharmonique de Radio France o la Orquesta Barroca de Friburgo.
También colabora periódicamente desde hace años en calidad de director invitado con orquestas de la talla de Los Angeles Philharmonic, así como con el Mostly Mozart Festival de Nueva York. En lo que a su discografía se refiere, Pablo Heras-Casado ha participado junto con la Compañía Teatro del Príncipe, en la primera grabación mundial de las zarzuelas La Fontana del Placer, de Juan Castels, y La Clementina, de Luigi Boccherini, de la mano de Harmonia Mundi. Acaba de comprometerse por cuatro años con la orquesta Saint-Lukes de Nueva York. Los músicos que tocan con él están encantados por su contagioso entusiasmo. La audiencia le quiere y está camino de convertirse en uno de los grandes maestros.
Listos para afrontar cualquier reto
Grupo Secuoya es una empresa de comunicación, con sede en Granada, que está presente en toda la cadena del ámbito audiovisual. Con vocación de liderazgo, experiencia en organización de recursos, flexibilización de estructuras y preparado para adaptarse a los cambios en el sector junto a sus clientes. Al frente del joven equipo de Secuoya se sitúa su presidente, el granadino Raúl Berdonés. El Grupo lo integran ocho compañías consolidadas en cada uno de sus sectores de actividad que se conforman en torno a tres áreas de negocio: Contenidos, Servicios y Márketing-Comunicación. Está presente en toda España con centros de producción en las principales ciudades. Antena 3, Neox, Telecinco, Cuatro y Telemadrid figuran entre sus mejores clientes. Más de 400 profesionales de la comunicación, el periodismo, el marketing, la gestión, la producción, la creación audiovisual están listos para afrontar cualquier reto y aportar soluciones a sus clientes. Ha experimentado desde 2008 un crecimiento orgánico que ha sido capaz de diversificarse dentro de su cadena de valor, potenciando las sinergias y ocupando los nichos crecientes en el sector.
Apuesta por el verdadero motor de la provincia
Está claro que el turismo es el verdadero motor económico de la provincia y para potenciarlo hace falta un consenso entre las instituciones y trabajar todas en la misma dirección. Más actuaciones con el mismo dinero, para que la provincia y el sector salgan favorecidos, es el objetivo marcado desde la Diputación de Granada. Entre las principales actuaciones contempladas destaca el proyecto de la escuela internacional de turismo rural, así como el centro de interpretación turística de la Costa Tropical. Impulsar el turismo gastronómico y enológico es otro de las máximas a promocionar dentro del evidente potencial que tiene Granada.
En cuanto a Luciano Alonso, su preocupación personal por este sector en sus dos etapas, como consejero de Turismo y ahora como consejero de Cultura y Deporte, siempre ha estado muy presente Granada. Lo corroboró a principios de este mes cuando presentó sus planes para los próximos cuatro años en el Parlamento, destacando que Granada es una potencia en materia patrimonial, sostenida sobre sus dos pilares: la Alhambra y Sierra Nevada, una estación que tan bien conoció cuando estaba a cargo de la Consejería de Turismo.
El hombre que puso a un equipo en la mejor Liga
Fabri. Este gallego llegó al Granada Club de Fútbol con la misión de sacar al equipo del pozo de la Segunda División B. Con esfuerzo y trabajo táctico acabó logrando el ascenso, con lo que el siguiente reto era luchar por subir a Primera. Y lo consiguió el año pasado, aunque fuera con ciertas dosis de dramatismo, como casi siempre ocurre en la historia del equipo rojiblanco. Al final, en Elche logró el salto a la élite. Conseguía algo histórico, dos ascensos consecutivos. El club retornaba, después de 35 años a la mejor Liga del mundo. Aunque fue destituido al culminar la primera vuelta, el pasado mes de enero, en lugar de reproches por parte de la afición porque el equipo estaba en una situación peligrosa, se encontró un homenaje improvisado por parte de una hinchada que siempre lo llevará en el corazón. Gallego por los cuatro costados, huye de los convencionalismos y al contrario que otros técnicos, detesta tirar de decálogos o de reglas ya escritas, tanto a la hora de trabajar como para definirse a sí mismo. Práctico como pocos, sabe que es uno de esos entrenadores de la vieja guardia de los que no deja indiferente a nadie. Fabri se ha ganado el corazón de muchos granadinos, que siempre lo recordarán.