Con un ojo puesto en los exámenes finales y otro en las facturas que se acumulan, miles de estudiantes observan con aprensión el desarrollo del nuevo sistema de becas implantado por el Ministerio de Educación, Cultura y Deporte que dirige José Ignacio Wert. En la Universidad de Granada son 16.887 los alumnos que han solicitado beca para estudiar, 4.463 más que el año pasado.
La medida, que generó polémica desde su planteamiento inicial, sigue cosechando críticas por los retrasos en su aplicación, dejando a muchos estudiantes «indefensos» e incluso «provocando que muchos abandonen la universidad», según denunciaron ayer la Plataforma de Afectados por las Becas y el Sindicato de Estudiantes. «Primero fue el endurecimiento de los requisitos, después la tardanza en la comunicación y entrega de las ayudas y ahora la sorpresa de la cuantía, que se ha reducido una media del 20% respecto a años anteriores», denunció Almudena Abejar, portavoz de la plataforma.
Según indicaron, el retraso acumulado con el nuevo sistema de becas ha provocado que miles de estudiantes aún sigan esperando la entrega de las ayudas a poco más de un mes para que termine el curso escolar, una situación que se agrava por la naturaleza del propio sistema, que divide la ayuda en una parte fija y otra variable y que, critican los afectados, no permite a los estudiantes conocer la cuantía final de su beca hasta el momento de recibir la dotación, ya que el cálculo de la parte variable requiere tramitar primero la totalidad de las solicitudes. De esta forma, el sistema establece el pago de una parte fija de hasta 1.500 euros para los estudiantes con las rentas más bajas y otros 1.500 de ayuda para la residencia. Una vez asignada esta cuantía, con el presupuesto restante se calcula la parte variable, que en el caso de algunos alumnos es de un montante superior a la fija.
Sin embargo, fuentes del Ministerio de Educación aseguraron que «no hay ningún retraso» y añadieron que, «según los datos oficiales, las cuantías de la parte fija han sido ya entregada a todos los estudiantes y la variable, a un 95%». Las mismas fuentes rechazaron que las cuantías se hayan reducido un 20% de media, como denuncia la plataforma, y afirmaron que los datos son similares al año pasado, con «algunos alumnos que han recibido menos» pero con «muchos que han recibido mucho más». En este sentido, recordaron que la parte variable de la ayuda es «una competición» entre los alumnos con la que han conseguido elevar la nota media en un 0,6%, pasando del 6,8 al 7,4. «La valoración es muy satisfactoria porque pidiendo más esfuerzo se ha conseguido subir la nota media y premiar a los estudiantes» que más se esfuerzan. «A más nota, más dinero, pero no hay ningún estudiante que por falta de recursos se quede sin estudios, porque es un derecho», señalaron.
«No he visto ni un euro»
Las explicaciones del Gobierno no satisficieron sin embargo a los estudiantes, que insistieron en que miles de estudiantes siguen esperando la ayuda. La tramitación del más de medio millón de solicitudes de beca se completó en el mes de marzo, fecha en la que los últimos alumnos recibieron las notificaciones. Una vez cumplida esa parte, el ministerio comenzó a enviar las notificaciones de la parte variable de la beca a los más de 300.000 estudiantes con derecho a ella, un trámite cuyo plazo expiró el 15 de abril. Es el caso de Almudena Abejar, que recibió la notificación el 16 de abril, un día después de cumplirse el plazo, y a día de hoy asegura que no ha recibido «ni un euro de la beca», un caso que, afirma, «es similar» al de otros alumnos. «Muchos estudiantes han tenido que abandonar los lugares en los que residen por sus estudios y volver a casa porque no pueden afrontar los costes que les supone el curso escolar», insistió.
Además de los retrasos, la Plataforma de Afectados por las Becas y el Sindicato de Estudiantes criticó la «completa opacidad» de Educación y exigió «restablecer el flujo de comunicación». Con ese objetivo, las portavoces de ambas plataformas entregaron ayer una carta en el ministerio dirigida a Wert, en la que solicitaban una «reunión de urgencia» para «crear un Plan de Emergencia Estatal» que «garantice que ningún estudiante sea expulsado de la universidad por razones económicas». Asimismo, convocaron a estudiantes, familias afectadas y personal universitario a sumarse a la concentración de protesta frente al ministerio que tendrá lugar el próximo martes 29 de abril a las 18.30 horas.
Descargar
La presente política de cookies tiene por finalidad informarle de manera clara y precisa sobre las cookies que se utilizan en la página web de la Universidad de Granada.
¿Qué son las cookies?
Una cookie es un pequeño fragmento de texto que los sitios web que visita envían al navegador y que permite que el sitio web recuerde información sobre su visita, como su idioma preferido y otras opciones, con el fin de facilitar su próxima visita y hacer que el sitio le resulte más útil. Las cookies desempeñan un papel muy importante y contribuyen a tener una mejor experiencia de navegación para el usuario.
Tipos de cookies
Según quién sea la entidad que gestione el dominio desde dónde se envían las cookies y se traten los datos que se obtengan, se pueden distinguir dos tipos: cookies propias y cookies de terceros.
Existe también una segunda clasificación según el plazo de tiempo que permanecen almacenadas en el navegador del cliente, pudiendo tratarse de cookies de sesión o cookies persistentes.
Por último, existe otra clasificación con cinco tipos de cookies según la finalidad para la que se traten los datos obtenidos: cookies técnicas, cookies de personalización, cookies de análisis, cookies publicitarias y cookies de publicidad comportamental.
Para más información a este respecto puede consultar la Guía sobre el uso de las cookies de la Agencia Española de Protección de Datos.
Cookies utilizadas en la web
A continuación se identifican las cookies que están siendo utilizadas en este portal así como su tipología y función.
La página web de la Universidad de Granada utiliza Google Analytics, un servicio de analítica web desarrollada por Google, que permite la medición y análisis de la navegación en las páginas web. En su navegador podrá observar cookies de este servicio. Según la tipología anterior se trata de cookies propias, de sesión y de análisis.
A través de la analítica web se obtiene información relativa al número de usuarios que acceden a la web, el número de páginas vistas, la frecuencia y repetición de las visitas, su duración, el navegador utilizado, el operador que presta el servicio, el idioma, el terminal que utiliza y la ciudad a la que está asignada su dirección IP. Información que posibilita un mejor y más apropiado servicio por parte de este portal.
Para garantizar el anonimato, Google convertirá su información en anónima truncando la dirección IP antes de almacenarla, de forma que Google Analytics no se usa para localizar o recabar información personal identificable de los visitantes del sitio. Google solo podrá enviar la información recabada por Google Analytics a terceros cuanto esté legalmente obligado a ello. Con arreglo a las condiciones de prestación del servicio de Google Analytics, Google no asociará su dirección IP a ningún otro dato conservado por Google.
Por último, se descarga una cookie denominada cookie_agreed, propia, de tipo técnico y de sesión. Gestiona el consentimiento del usuario para el uso de las cookies en la página web. El objetivo es recordar aquellos usuarios que las han aceptado y aquellos que no, de modo que a los primeros no se les muestre información en la parte inferior de la página al respecto.
Cómo modificar la configuración de las cookies
Usted puede restringir, bloquear o borrar las cookies de la Universidad de Granada o cualquier otra página web, utilizando su navegador. En cada navegador la operativa es diferente, la función de 'Ayuda" le mostrará cómo hacerlo.