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El desafío del continente helado

SOCIEDAD
El desafío del continente helado
El Parque de las Ciencias de Granada acoge la mayor de las muestras dedicadas a la Antártida que se han organizado en Europa
08.07.08 –
JUAN LUIS TAPIA
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El desafío del continente helado
BAJO CERO. Un visitante toca el iceberg instalado en el Parque de las Ciencias. / FOTOS: GONZÁLEZ MOLERO
¿Podrán soportar temperaturas de diez grados bajos cero, el pútrido olor de los excrementos de los pingüinos y la oscuridad durante meses? Estos y otros muchos desafíos son los que propone la exposición Antártida estación polar, la más grande de las celebradas en Europa, con más de dos mil metros cuadrados, dedicada al continente helado. La muestra coincide con la celebración del Año Polar Internacional y ha sido organizada entre el Parque de las Ciencias de Granada y el Natural History Museum de Londres. Ernesto Páramo, director del Parque, destacó que las claves para explicar «los momentos complicados que vive el planeta se encuentran en la Antártida, y para saber cómo funciona este continente está la presente exposición».

La muestra tiene un fin didáctico y está destinada a todos los públicos. Al visitante se le da a la entrada una tarjeta que contiene un código que deberá utilizar para enfrentarse a los muchos desafíos de su particular expedición antártica; y si los supera recibirá el consiguiente diploma acreditativo. Pero la aventura no acaba en la visita, porque el expedicionario podrá seguir comprobando su capacidad para sobrevivir en el continente austral a través de un portal de Internet.

Cámara frigorífica

Entre las muchas pruebas que deberá superar el aspirante a cadete polar se encuentra la de soportar en una gran cámara frigorífica temperaturas de diez grados bajo cero, la conducción en un simulador de una moto de nieve, preguntas sobre la convivencia en espacios tan reducidos, cómo soportar la oscuridad polar, el buceo bajo hielo y soportar el pestilente olor de los vómitos y excrementos de los pingüinos. Además, en otro de los apartados deberá elegir la ropa adecuada para iniciar la aventura en la Antártida y descubrir cómo llevar a cabo una acampada en pleno hielo.

Junto a todo este tipo de pruebas y desafíos didácticos, la muestra exhibe más de 400 piezas, algunas de ellas de gran importancia histórica como el material científico de la expedición de Malaespina a la zona austral en el siglo XVIII, diversos libros originales de las expediciones y un meteorito original descubierto en el siglo XVI.

Los visitantes también podrán ver varias especies de pingüino antártico, un esqueleto original de calderón, un oso polar y un buey almizclero. Asimismo se exhiben objetos que pertenecen a expediciones a la Antártida como un robot submarino, globos estratosféricos, sedimentos marinos, redes de plancton e iglús antárticos. No falta tampoco el típico iceberg, en este caso de sólo ocho metros cúbicos, y que se mantiene helado gracias a las últimas tecnologías en refrigeración.

En el área de Los extremos de la Tierra se recrean a través de elementos naturalizados de fauna y flora y otras figuraciones como un esquimal, los hábitats del Ártico y la Antártida. En Vivir en la Antártida el visitante podrá examinar las pertenencias reales del personal de la base antártica y conocer el día a día de los expedicionarios.

La muestra incluye una experiencia agobiante porque los aventureros tendrán que emular a los investigadores que tiene que pasar hasta seis meses de oscuridad, pero en menos tiempo, en el interior de una cámara que reproduce una situación claustrofóbica de frío y oscuridad. Cabe también la reivindicación ecologista con la explicación en uno de los talleres de la destrucción de la capa de ozono. Si hemos sido buenos aventureros, recibiremos nuestro diploma.

jltapia@ideal.es

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