CARTAS
Universidad disgregada
Ayes Tortosa./Granada.
Imprimir Enviar
Sr. Director de IDEAL: Don Jose Enrique Granados Torres, de Atarfe, manifestaba el pasado 15 de Octubre, en esta misma sección su discrepancia con mi artículo de La Redonda titulado Universidad, en el que yo defendía que el campus universitario no se dispersara en el extrarradio de la capital. Quisiera contestarle a este señor en los mismos términos de respeto que él lo hace, aunque de desacuerdo:
El señor rector de la universidad de Granada ha crispado a mi entender los ánimos de los ciudadanos, enfrentándonos en una polémica que no tiene ninguna razón de ser (algo que es moneda común los tiempos que corren, pues nuestros representantes están haciendo que nos cuestionemos lo incuestionable). Es de sentido común comprender que una Universidad atomizada y desperdigada no puede funcionar. De hecho la universidad de Granada ya está disgregada desde hace tiempo, le remito a un plano de la ubicación de los distintos centros universitarios. Acaso eso haya motivado que en la actualidad nuestra universidad ocupe uno de los últimos puestos del país en I+D (investigación y desarrollo), mientras que la Autónoma de Madrid, concentrada básicamente en un solo campus, va a la cabeza.
Por otra parte, esa dispersión es contraria a las propias leyes universitarias. En la Ley de Reforma Universitaria (LRU) promulgada por el PSOE y retocada más tarde por el PP, queda patente que la unidad de funcionamiento es el Departamento Universitario, y los departamentos no pertenecen a un sólo centro sino que son interfacultativos, hay por tanto muchos profesores que por su materia imparten clases en distintos centros; imagínese a un docente que tuviera que dar clase a las diez en La Zubia, a las once en Atarfe y a las doce en Las Gabias. Es más, la investigación universitaria hoy se realiza mayoritariamente en áreas interdisciplinares, hay grupos de investigación formados por matemáticos y biólogos, informáticos y lingüistas etc. etc. y eso requiere una cercanía entre las facultades.
Además de las expuestas hay muchas otras razones. Por ejemplo, los estudiantes no sólo desean ir del piso a la clase y de la clase al piso. Quieren también enriquecerse en otros aspectos culturales y sociales, una diseminación universitaria los aísla y va claramente en contra de esta necesidad. Se quejan, por ejemplo, los alumnos de la Escuela de Informática, ubicada en Cerrillo de Maracena, del poco ambiente universitario que tienen a su alrededor.
Para finalizar, opino que esta polémica sobre la ubicación de la Universidad es un problema de especulación, pura y dura, pues allá donde se edifique un centro universitario, los terrenos de alrededor se revalorizarán para la construcción de más bloques y más pisos. Atentamente.