Inicio / Historico

‘Si hay que reducir docentes, primero se irán los que tienen otro trabajo’

Si hay que reducir personal, que es el capítulo del gasto en el que más dinero se emplea del presupuesto, la Universidad de Granada comenzará por el profesorado que ya tiene otro trabajo. Todavía no hay nada en firme de las medidas que tendrá que afrontar esta institución para reducir el gasto, pues quedan directrices de la Junta de Andalucía que deben aclarar la envergadura del ‘tijeretazo’ que le toca asumir a cada universidad, pero el rector, Francisco González Lodeiro, apuntó ayer por dónde van a ir los recortes.

El decreto nacional de contención del déficit insta al Gobierno andaluz a reducir en 130 millones de euros el montante que reciben sus universidades públicas y cada una de ellas está ya haciendo números.

Entre las medidas planteadas está la de centralizar el sistema de compras mancomunadas para conseguir precios más asequibles, que van a asumir todas las universidades. Sin embargo, las que más preocupan son las relativas a las tasas y precios públicos y a la de reducción del personal.

Respecto a los precios públicos, la subida decretada por el Ministerio de Educación de entre un 15% y un 25% tiene en un mar de dudas a los responsables de las enseñanzas superiores. «No sabemos cuál es el punto de partida o de referencia para calcular la tasa impuesta», explicó ayer el rector de la Universidad de Granada. Si hasta ahora la media de lo que pagaban los estudiantes de la UGR por matrícula rondaba los 732 euros, a partir del próximo curso podrían pagar entre 915 y 1.525 euros, según el porcentaje que se aplique.

Y sobre la segunda medida, la de reducción de personal, González Lodeiro dijo que «el objetivo es tocar lo menos posible a la plantilla». Pero también advirtió que «si hay que reducir docentes, primero se irán los que tienen otro trabajo». Es decir, los profesores asociados. En la UGR trabajan un total de 1.275 profesores con contrato laboral (que les cumple el 31 de septiembre) y la mayoría tienen otro trabajo.

«La idea es aplicar el decreto del Gobierno de la forma que haga el menos daño posible», dijo el rector. El próximo mes de junio se aclarará cuáles van a ser las medidas adoptadas.

Descargar