El incremento de las tasas universitarias impuesto por el Gobierno se va a notar mucho en los bolsillos de los estudiantes granadinos. Si hasta ahora la media de lo que pagaban por matrícula rondaba los 732 euros, con la subida decretada por el Ministerio de Educación los alumnos de la Universidad de Granada van a tener que pagar el próximo curso entre 915 y 1.525 euros de media. El incremento más drástico obligaría a la UGR a doblar el precio de sus matrículas en un momento difícil para la economía de las familias.
Todo dependerá de lo que decida la Junta de Andalucía. Dado que las competencias en materia universitaria están transferidas a las comunidades autónomas, las directrices del departamento de Wert, que exigen que el universitario pague ahora entre un 15% y un 25% del coste que supone su plaza para las arcas del Estado, deja en manos del Gobierno andaluz la última decisión.
Pero la subida no se aplica sobre el coste actual de cada matrícula, sino sobre el total de lo que le cuesta un alumno al Estado, que en Andalucía ronda los 6.100 euros. Los estudiantes de las universidades andaluzas cubren hoy por hoy el 12% del coste real de una plaza, así que si se aplicara una subida del 15%, al estudiante granadino le supondría 915 euros de media en la matrícula, un 25% del gasto; pero si se impone la máxima, del 25%, el abono de 1.525 euros implicaría un 108% respecto a la tasa actual, más del doble.
Los repetidores tendrán también que tomar nota. En la UGR el coste de un crédito de segunda matrícula está en 14,10 euros, pero el Gobierno exige que los repetidores paguen ahora entre un 30% y un 40% del precio real (un 65%-75% para las terceras y un 90%-100% para las cuartas).
Y los másteres, el medio millón de euros. Hoy cuesta de media en la UGR unos 1.716 euros, pero si se impone una subida al 50% rondaría los 3.050 euros.
