El Universidad de Granada desafió a la lógica contra el CAU, pero esta se revolvió y golpeó con crudeza a los de Manolo Conde. Derrota con consecuencias ya que los arlequinados dependerán de Industriales y Liceo Francés para saber si pueden llegar a la última jornada de Liga, dentro de dos semanas, con opciones de lograr la permanencia matemática en la cancha del Sanse Scrum. Lo de ayer fue un cúmulo de errores propios, oportunismo de un buen equipo, y un recital arbitral que, dentro del perjuicio causado en los dos contendientes, los granadinos se sienten más perjudicados (17-29b).
En los compases iniciales ya se pudo comprobar qué tipo de partido iba a verse. El CAU, en plena lucha por meterse en la fase de ascenso a División de Honor B, era consciente de que en Granada no podía pinchar. Jugadores recios, muy grandes que prometían problemas en delantera, pero cuyo antídoto es juego abierto, dinámico y a la mano. Y ahí fue donde el ‘Uni’ falló. Arremetió demasiadas veces con el pick and go en vez de imprimir velocidad al oval. Pero es que, cuando lo hacía, aparecieron los fallos de control y recepción de este. Muchos balones caídos, muchos adelantados y desesperación porque las cosas no salían.
Tras varios minutos de conocimiento mutuo, el ‘Uni’ se adelantó en el marcador con una gran jugada de delantera, que con una formación móvil (maul), recorrió casi diez metros hasta que Fernan se escapó y ensayó. El viento jugó una mala pasada a Forest, que no transformó (19′, 5-0).
Gascón recortó con un golpe de castigo de los muchos que sancionó Riera en contra del ‘Uni’, más permisivo con el CAU que con los locales (5-3). Tantas penalizaciones acabaron con las exclusiones temporales de Clément y Quitián (31′ y 34′). Así, jugando con dos menos, los madrileños lo tuvieron más fácil para hollar en dos ocasiones la zona de marca local. Demasiado castigo al descanso (5-17).
El ‘Uni’ insistió tras la charla del intervalo, jugando más metido en el campo visitante. Pero de nuevo la lió Riera a diez del final, cuando otorgó un ensayo de delantera del CAU desde el lado contrario en el que estaba y sin poder verlo (5-24). Los granadinos se rompieron.
En la recta final, el Universidad buscó una hombrada como las del Helvetia o Sanse Scrum. Fernan recortó para poner el 10-24, pero acto seguido Mariano pescó un oval tras un gran placaje y, marchándose por el ala, ensayó sin problemas. Juan Hernández, en una jugada de rabia colocó el 17-29 pero, aunque se jugaron dos minutos más, el milagro no sucedió esta vez.
Ahora todo depende de que Industriales y Liceo no alcancen los 28 puntos (tienen 27 y 25) en los tres partidos que les quedan, el primero entre ellos este mediodía. Sólo de esa forma llegará vivo el ‘Uni’ a la última jornada.
