78584 La profesora Minerva Alganza Roldán, del Departamento de Filología Griega y Filología Eslava de la Universidad de Granada, es la autora de un descubrimiento de gran alcance para la transmisión de la Literatura griega, que ha sido publicado en Emerita, la principal revista de Filología Clásica en el ámbito hispano y una de las más prestigiosas a nivel internacional.
Se trata del descubrimiento, tras una investigación muy compleja, en la Biblioteca del Monasterio de Iviron, en el Monte Athos, de un nuevo manuscrito de dos tratados de mitografía griega (uno del siglo II d.C. y otro varios siglos posterior), que hasta este hallazgo solo eran conocidos por un códice del siglo XIV conservado en la Biblioteca Vaticana.
Este trabajo es el primer resultado del Proyecto de Investigación Transmisión y Tradición de Paléfato y la exégesis racionalista de los mitos, que ha obtenido financiación del Plan Propio de Investigación de la Universidad de Granada y del Programa Estatal de Fomento de la Investigación Científica y Técnica de Excelencia (Ministerio de Economía y Competitividad, 2014), dirigido por la doctora Alganza Roldán y con participación de investigadores españoles, de Francia y Australia.
Según señala la profesora Minerva Alganza «lo más importante es que el trabajo supone un pequeño, gran descubrimiento para los que nos dedicamos a estos estudios eruditos y minoritarios, y el sueño dorado de cualquier filólogo: ser el primero en describir, analizar y publicar un texto, que, además, aporta algunas novedades que deberán incorporarse en ediciones futuras de estos autores».
Monte Athos es el nombre que recibe el área montañosa en una península, situada en Macedonia Central, al norte de Grecia. En él se asientan veinte monasterios ortodoxos en los que sólo pueden vivir monjes de sexo masculino.
Al estar prohibida la entrada a todas las mujeres al Monte Athos, la profesora Minerva Alganza no pudo comprobar en persona los resultados de su investigación y fue Morchos Morfakidis, también profesor del Departamento de Filología Griega y Filología Eslava de la Universidad de Granada, el que tuvo que realizar las comprobaciones in situ, en el monasterio de Iviron.
El trabajo se ha realizado a lo largo de un año, a partir de copias digitales conservadas en el Institut de Recherche et d’Histoire des Textes y de fotografías del original.