Joaquina Eguaras fue un personaje polifacético, una de las primeras licenciadas por la Universidad de Granada y la primera mujer docente en la Universidad de Granada (UGR). Una de las principales calles que atraviesa la ciudad lleva su nombre, pero poco se conocen sus méritos.
“Celebrando el aniversario de la incorporación de la mujer a la Universidad (1910), hemos elegido a Joaquina Eguaras como figura de este comienzo de curso en el Centro de Lenguas Modernas”, ha señalado Inmaculada Sanz, directora del centro en Granada que, junto a Concha San Martín, directora del Museo Arqueológico de Sevilla, ha contado la historia y méritos de este personaje “poco investigado”.
Concha San Martín ha destacado de Joaquina Eguaras que “fue una gran conocedora del pasado islámico y ella tradujo el ‘Tratado de Agricultura’ de Ibn Luyun. “En 1918 se matricula en la Facultad de Letras, que compartía edificio con Derecho. Fue una de las pioneras. En 1897 el analfabetismo en mujeres rondaba el 70%. Una mujer universitaria era una rareza extravagante en aquella época hasta la llegada de la Segunda República, ha relatado San Martín”.
“Joaquina Eguaras, aunque poco conocida en la actualidad, fue muy conocida en su época, apreciada y querida en los círculos culturales de la ciudad. Fue una profesora muy apreciada”, ha señalado la directora del Museo Arqueológico de Sevilla. “Poco después de licenciarse Joaquina, lo hizo su amiga Elena Martín Vivaldi”, ha dicho.
La promoción de centros de estudios, la defensa de la formación de la mujer, la difusión y protección del patrimonio arqueológico o la traducción del ‘Tratado de Agricultura de Ibn Luyun’ son algunos de los méritos que Concha San Martín ha citado de la “infatigable” Joaquina Eguaras que, a pesar de las incomodidades y dificultades, “no dejó que éstas influyeran en su formación y obtuvo quince matrículas de honor”.