Decenas de personas se concentran en repulsa por el asesinato de la mujer militar en La Chana
La Diputación muestra su «más enérgica repulsa» por la muerte de la militar de Cádiar
La Audiencia Provincial acoge hoy en Vigo el juicio por el asesinato de una mujer en el barrio de Candeán en 2004
Selección realizada automáticamente por Colbenson
Decenas de personas se concentraron hoy en el barrio de la Chana para mostrar su repulsa por el asesinato ayer en Granada de la militar, Encarnación G.A., el primer caso de violencia de género registrado en la provincia en 2008, según confirmó hoy el subdelegado del Gobierno, Antonio Cruz, quien indicó que el sepelio se celebrará con un acto institucional que en estos momentos ultima el ejército.
Cruz condenó «sin paliativo alguno» este nuevo caso de violencia de género y manifestó su solidaridad con los familiares de la víctima, un gesto al que se han unido diversas instituciones de la provincia como la Diputación, el Ayuntamiento de la capital –que guardó un minuto de silencio en repulsa por el asesinato– y la Universidad de Granada.
A la concentración del barrio de la Chana, convocada por la Federación de Mujeres María Lejarraga y el Grupo Motor de Mujeres, asistieron numerosos vecinos y miembros de la Asociación Convive, que guardaron un minuto de silencio en repulsa por el asesinato sosteniendo pancartas violetas con mensajes como «por una vida digna y sin miedo» o «¡Contra la violencia!».
Una de las portavoces de la Asociación Grupo Motor Mujeres de la Chana, Gloria Jiménez, leyó un manifiesto en el que mostraron su protesta «por el brutal asesinato de una vecina de nuestro barrio», una mujer que, según dijo, «pasa a engrosar la larga lista de mujeres asesinadas a manos de su parejas cada año».
«Por eso queremos gritar a los cuatro vientos, para que se acaben los casos de violencia de género y que estos sinvergüenzas dejen de existir», comentó Jiménez, que hizo un llamamiento a las administraciones, ciudadanos, Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, jueces y fiscales» para que se impliquen en el cambio de nuestra sociedad», de forma que «se renueve la forma en que el género masculino y femenino se enfrentan a la convivencia en igualdad».
Tras la lectura del manifiesto, que se cerró con un emotivo aplauso, las personas concentradas recorrieron las principales calles del barrio para mostrar su repulsa por el asesinato de E.G.A. de 34 años, natural de Cádiar (Granada) y que trabajaba en el Acuartelamiento Cervantes de la capital.
Su cuerpo fue encontrado en la cama de su dormitorio, en su domicilio del barrio de La Chana, con indicios de estrangulamiento, según ha informado la Policía Nacional.
Fue las 08,10 horas de ayer, cuando la Guardia Civil descubrió en el puente de la A-44, conocido como puente de Dúrcal –entre los términos de Cozvíjar y Dúrcal–, un vehículo con las llaves puestas y nadie en su interior, presumiendo que el conductor se había arrojado por el mismo.
Los agentes comprobaron que al pie del puente se encontraba el cadáver de un hombre, que fue identificado como J.H.S., de 35 años, natural de Madrid, cabo primero del Ejército, destinado en la UME, aunque de baja en los últimos tres meses, a disposición de Personal.
Al objeto de informar a su compañera sentimental, domiciliada en la ciudad de Granada, la Guardia Civil comunicó estos extremos al Cuerpo Nacional de Policía y una patrulla se personó en el domicilio, donde, tras realizar las oportunas gestiones con sus padres, se accedió al domicilio.
Allí fue encontrada muerta con síntomas de violencia por estrangulamiento, vestida y en la cama del dormitorio. La finada era E.G.A., de 34 años y natural de Cádiar (Granada), también militar de profesión en el Acuartelamiento Cervantes de la capital.
A la espera de ultimar las investigaciones y de la práctica de la autopsia, la Policía cree que la víctima falleció en la noche del 30 al 1 de octubre, presuntamente por la acción violenta de su compañero sentimental, que permaneció en el domicilio toda la noche, hasta que en la mañana tomó el vehículo de la joven y se trasladó hasta el lugar en que se suicidó. También la Policía subrayó que no constan denuncias previas por violencia de género.