33333 La Universidad de Granada, a partir del Centro de Investigación de Mente, Cerebro y Comportamiento ha realizado una investigación acerca de las prácticas sexuales (vaginales, anales y orales) que realizan los jóvenes hoy en día y que ha sido financiada por el Ministerio de Economía y Competencia.
Los estereotipos y los roles marcados por la sociedad delinean los hábitos de los adolescentes en función de su género. Las conductas entre chicos y chicas varían en este contexto, puesto que cada género se rige por lo que se espera de ellos.
Con una muestra de más de 4.600 jóvenes, el estudio confirma que los chicos son más proclives a realizar sexo oral y anal con anterioridad y suelen tener mayor experiencia sexual de manera más temprana que las chicas. Al parecer, la sociedad espera que sean los hombres quienes tomen la iniciativa en el ámbito sexual, mientras que las mujeres mantienen una conducta discreta o ligeramente más reprimida.
HÁBITOS SEXUALES
Los datos recogidos concluyen que los adolescentes comienzan sus relaciones orales y vaginales a la edad de 15 años, siendo el preservativo el método anticonceptivo más empleado. Los menores utilizan protección durante las prácticas sexuales, pero no en el sexo anal ni oral, lo que muestra su intención de protegerse ante un embarazo pero no ante las enfermedades de trasmisión sexual.
A pesar del uso de mecanismos profilácticos, el 11% de las chicos ha realizado la ‘marcha atrás’, mientras que el índice de chicas es mayor (16%) debido a la carencia de planificación de sus relaciones sexuales o a la falta de confianza para negociarlo con sus parejas durante el acto. Además, alrededor del 15% de jóvenes ambos géneros no ha utilizado el preservativo en su primera relación vaginal.