Los funcionarios absorben la cuarta parte de los presupuestos
La plantilla del personal al servicio de las administraciones ha crecido el 27% en los diez últimos años (más de medio millón adicional de personas). Sus remuneraciones representan la cuarta parte del gasto público total (el 10,8% del PIB).
Además, existe una fuerte disparidad entre comunidades autónomas, en las que el número de empleados públicos por cada 1.000 ocupados oscila entre los 106,48 de Catalunya y los 243,35 de Extremadura. Datos como estos, incluidos en un estudio publicado ayer por la Fundación de las Cajas de Ahorros, llevan a formular la necesidad de «replantear la política de empleo público y su remuneración», según Miguel González Moreno, autor del análisis y catedrático de la Universidad de Granada.
El estudio hace notar el drástico recorte, del 34%, del empleo público en la administración central (302.600 puestos menos desde 1998) por el traspaso de competencias a las autonomías. Mientras, el empleo de las comunidades autónomas se ha duplicado (670.000 más). En la administración local, la plantilla ha crecido en 186.000 personas (el 42% más) y en las universidades, en 13.020 personas (el 14%). En total, el avance asciende al 27%, hasta 2.659.010 empleados públicos, para un censo de población que ha crecido el 17% desde 1998, por encima de los 46,5 millones de personas.
El último número de Cuadernos de Economía, que ayer publicó Funcas, incluye también una amplia encuesta sobre la percepción de la crisis entre los ciudadados y un estudio sobre el impacto de la recesión en las cuentas públicas.
Uno de los autores de este último artículo, Ángel Laborda, estimó ayer que el déficit del conjunto de las administraciones públicas se situará en torno al 12% del PIB en el 2009 y el 2010, muy lejos de las estimaciones oficiales, del 9,5% y el 8,1%, respectivamente. Así, Laborda considera absolutamente imposible lograr el objetivo de reducir el desfase de las cuentas públicas al 3% en el 2013, como impone Bruselas, «a no ser que suceda una revolución, en el sentido literal del término», afirmó; «eso no quiere decir que no haya que intentarlo», matizó después.
UNA DÉCADA PERDIDA EN EL EMPLEO / De los 12 puntos de déficit, Funcas calcula que entre 4 y 5 son atribuibles a la crisis económica (por la caída de la recaudación y el mayor gasto por desempleo y para estimular la economía). El resto, entre 7 y 8 puntos, se considera que es déficit estructural; es decir , esta sería la brecha real entre lo que cuesta prestar los servicios públicos que marcan las leyes y los ingresos que reporta el sistema de impuestos en España en un momento de normalidad.
En relación al empleo, el jefe de coyuntura de Funcas vaticinó que el paro llegará a 4,5 millones de personas –el 19,5% de la población activa– este año y que no empezará a haber recortes «significativos» hasta el 2012 y el 2013. En su opinión, no bastarán cinco años para volver a las tasas de paro previas a la crisis (en torno al 8%), como dice el secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa. «Hay que pensar en una década», lamentó Laborda. «No digo esto para meter miedo a nadie, sino para que nos demos cuenta a qué tenemos que enfrentarnos», se justificó el economista.
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