La Universiada cambia de consejero y revisa sus planes

La Universiada de invierno que está previsto que se celebre en Granada en 2015 vive desde ayer una nueva etapa. Después de dos años, el consejero delegado, el profesor de Historia Francisco Sánchez Montes, presentó su dimisión por motivos familiares y profesionales. También abandona el proyecto Rosana González, secretaria de la Asociación Universiada, compuesta por el Ayuntamiento de Granada, la Diputación, la Junta de Andalucía y la Universidad de Granada (UGR)

El decano de la Facultad de Ciencias del Deporte de la UGR, Aurelio Ureña, sustituye a Sánchez Montes en el cargo y será el responsable de «redimensionar» definitivamente un proyecto que debe «ajustarse» al momento de crisis actual y que debe contar, sobre todo, con el apoyo institucional para garantizar su celebración que aún ve «viable y esencial» el comité rector. «No habrá marcha atrás», sentencia Ureña para atajar incertidumbres.

Desde la elección de Granada, -era la única aspirante-, el proyecto ha ido modificándose, a menos, y el nuevo consejero no descarta «replantear» algunos aspectos. Se barajaron varios espacios (primero El Serrallo y luego la zona norte) para la villa olímpica que se proyectó con 600 viviendas para acoger supuestamente a los 3.000 deportistas que al final ocuparán las plazas hoteleras.

Pendientes de conclusión y decidirse están el palacio de hielo y la adaptación del Puerto de la Ragua para determinadas competiciones. La pista Universiada de Sierra Nevada sí está terminada.

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