AUTILLO DE CAMPOS
Presente en la distancia
El historiador Marcial Castro recuerda su infancia durante los veranos transcurridos en Autillo
S. DE LAS SÍAS/AUTILLO
Presente en la distancia
Marcial Castro muestra la urna que se ha diseñado en la fábrica La Cartuja-Pickman para los restos de Diego Colón. / EL NORTE
Imprimir noticiaImprimirEnviar noticiaEnviar
Población 2006: 180 habitantes.
Comarca: Tierra de Campos.
Distancia de la capital: 33 kilómetros.
Cómo llegar: N-610 desde Palencia hasta Villarramiel, desde allí acceder por la carretera P-942. También se puede llegar por la N-610 hasta Mazariegos y coger el desvío de Fuentes de Nava. Desde allí acceder por la P-942.
Actividades principales: Agricultura y ganadería.
Gentilicio: Autillanos.
Lugares de interés: Iglesia de Santa Eufemia. Torre.
Fiestas: Virgen del Castillo (viernes anterior a Pentecostés). Santa Eufemia (16 de septiembre).
Alcalde: Carlos Castro Sánchez (Agrupación de Electores de Autillo de Campos).
Concejales: Carlos Herrador y Sonia Herrador, por Independiente. Jesús Enríquez y Abilio Hernández, por el PP.
Historia: Fernando III, de Gonzalo Martínez Díez, aclara el pasado histórico de la localidad, en la que se anunció la proclamación de Fernando III como rey de Castilla.
Personajes: El historiador Marcial Castro Sánchez ha publicado el libro Vida de Don Francisco de Reinoso, donde se reproduce una biografía publicada en 1617 por Gregorio de Alfaro sobre Don Francisco, abad de Husillos y obispo de Córdoba.
Publicidad
Nació en Autillo de Campos y cuando apenas tenía tres años su familia se trasladó a Canarias. La distancia y la lejanía no se impusieron en el corazón de Marcial Castro Sánchez, que cada verano regresaba a tierras palentinas. De sus andanzas en el pueblo recuerda las tardes de juegos y risas en las eras, esparciendo las parvas de grano o subidos en los carros de paja. También guarda imágenes más serias o desabridas, como las estampas de los velatorios y funerales. «Para un niño que vivía en una ciudad aquello era algo insólito. Ver cómo se velaba a la persona fallecida, cómo seguía el ritual funerario o la solemnidad con la que todos los vecinos asistían al cementerio fue una de las imágenes que más me impactó», recuerda Marcial.
Años más tarde, la adolescencia dejaba paso a otras aficiones. Las tardes ya no eran para ganarse una regañina de los mayores, sino para coger el autobús de Palencia y acudir a la Casa de la Cultura y Biblioteca -entonces ubicada en la actual sede de la Fundación Caneja- e indagar acerca del pasado de Autillo. Entre estantes, libros y documentos, Marcial sucumbía a la pasión de la historia y al deseo de responder numerosas interrogantes hasta el punto de matricularse y cursar la licenciatura de Historia en la Universidad de Valladolid.
Uno de sus retos por entonces era indagar qué había de cierto en los relatos que se habían trasmitido generación tras generación y que aseguraban que Autillo había sido el escenario de la coronación de Fernando III y de la unificación definitiva de los reinos de Castilla y de León.
Su empeño por contrastar los datos y certificar con rigurosidad el pasado de su pueblo le llevó a saber y a asegurar después a los autillanos que de todo aquello lo único que era cierto es que Autillo fue el lugar donde en 1217 se le anunció a Fernando III que iba a ser proclamado rey con todos los honores en Valladolid y que la unión de los dos reinos tuvo lugar 13 años después, en 1230, tras el fallecimiento del padre del monarca.
Esta postura le llevó a enzarzarse en una agria polémica con el sacerdote Germán García Ferreras. Un enfrentamiento al que se sumaron otros vecinos sin saber que los contrincantes de fondo eran en realidad la literatura popular de relatos y leyendas contra la precisión científica y escrupulosa de documentos oficiales y archivos. «Fue algo desafortunado, de lo que hoy no queda nada, ni enemistades ni rencor, todo lo contrario. Con el tiempo he llegado a comprender los beneficios como historiador que me reportó aquel acontecimiento y he valorado todo lo positivo que Don Germán hizo por Autillo», agrega Castro Sánchez.
Otro calado y trascendencia muy diferente han tenido las investigaciones que el historiador ha llevado a cabo con otros compañeros de la Universidad de Granada, averiguando el lugar en el que había sido enterrado Cristóbal Colón. Un proyecto en el que ha estado imbuido los últimos cinco años, consiguiendo importantes avances y al mismo tiempo dudas y retrocesos que entorpecían el estudio para esclarecer si los restos que se albergaban en la catedral hispalense eran o no del navegante que descubrió América. «Ha sido muy difícil y costoso, pero muy gratificante y provechoso, un gran avance para la historiografía», destaca Castro Sánchez, que relata cómo gracias al hallazgo de los restos de Diego Colón, hermano del almirante, se puede cerrar definitivamente el estudio. «Aparecieron en una caja de cinc enterrados cerca de fábrica de cerámica de La Cartuja. Gracias a su análisis de ADN mitocondrial, supimos que compartían los mismos genes y pudimos certificar que los restos de Colón reposan en Sevilla», concluye el historiador.
Un logro aún más aplaudido si se tiene en cuenta que durante este tiempo Castro Sánchez ha tenido un hueco para seguir estudiando la historia de Autillo, para escribir un libro sobre uno de sus personajes más ilustres, Don Francisco de Reinoso, y para seguir acudiendo cada verano al pueblo, que sigue presente a pesar de la distancia. Próximo pueblo: Autilla del Pino