Los palentinos son los contribuyentes de la región que pagan menos impuestos municipales.
Cada empadronado en la ciudad tributa al año 222,99 euros, según un estudio de la Universidad de Málaga León es la capital castellano y leonesa con la presión fiscal más alta, alcanzado los 340 euros anuales.
Los palentinos pagaron durante el año pasado una media de 222,99 euros en impuestos municipales, lo que sitúa a Palencia como la capital de provincia de la comunidad autónoma de Castilla y León con menor carga fiscal para sus vecinos. A la cabeza de la región, se sitúa León, que al año obtiene 340 euros por cada ciudadano. Así, cada leonés paga a su Ayuntamiento 118 euros más en impuestos municipales que los palentinos.
Estos datos aparecen recogidos en el Análisis de la presión fiscal municipal elaborado por Daniel Carrasco Díaz, catedrático de la Universidad de Málaga y por los profesores de la Universidad de Granada Andrés Navarro Galera y Dionisio Buendía Carrillo. Los autores del estudio han recogido datos sobre los impuestos directos e indirectos que los Ayuntamientos recaudan entre sus vecinos y contribuyentes. Así, atienden al dinero obtenido a través del impuesto de bienes inmuebles, el de vehículos de tracción mecánica, el incremento de valor de los terrenos de naturaleza urbana o el de actividades económicas (en aquellos sectores en los que aún está vigente). El estudio también añade los impuestos indirectos, basados en los recargos sobre los tributos de otras administraciones. De acuerdo con la suma de todos ellos, cada ciudadano empadronado en Palencia ha de desembolsar al año una cifra media de 222,99 euros, muy inferior a la de otras capitales con un nivel de población similar, como Gerona (400,50 euros) o Toledo (313,23 euros).
Así, Palencia ocupa el puesto 310 en el ránking de los 500 municipios españoles que más carga fiscal demandan a sus ciudadanos. Pero también aparece como una de las capitales de provincia más baratas para vivir, ya que solamente Teruel, Santa Cruz de Tenerife, Cáceres, Pontevedra y Las Palmas de Gran Canaria cobran menos impuestos que el consistorio palentino.
A la cabeza de las capitales se sitúan las ciudades catalanas. Por ejemplo, los vecinos de Barcelona pagan al año 402,62 euros en impuestos municipales. La localidad más gravosa de España es San Roque (en Cádiz) que requiere a sus residentes un desembolso anual de 988,36 euros. A continuación se sitúan núcleos turísticos como Salou, Calafell, Calviá, Mogán, La Oliva, Marbella, San Bartolomé de Tirajana, Pájara y Benicasim, todos ellos por encima de los 650 euros de presión fiscal municipal.
Los autores del estudio explican que estos municipios se sitúan a la cabeza en la recaudación porque «existe una importante población flotante que, si bien paga impuestos, no se encuentra empadronada en el municipio, lo que hace que el indicador de presión fiscal municipal utilizado se dispare».
La población es uno de los factores que, según los expertos redactores del informe, contribuye a incrementar la cuantía de los impuestos. «Cuanto más grande es un municipio, más es la cantidad de impuestos que deben pagar», concluye el estudio. Sin embargo, matiza que este criterio es válido para los municipios con menos de 20.000 habitantes -el 96% de los pueblos de España responden a otro patrón- y para las comunidades autónomas de Andalucía, Asturias, Castilla La Mancha, Extremadura, Galicia y Castilla y León. En el resto de regiones, la relación entre ambas variables carece de significación estadística.
Paro y dependencia
Cuando se analizan ciudades de mayor tamaño intervienen otras variables. Por ejemplo, el grado de personas dependientes. En aquellos municipios muy envejecidos o con un elevado porcentaje de población joven (menos de catorce años), crece la presión fiscal. Esto explica, por ejemplo, que los zamoranos paguen de media más impuestos que los vallisoletanos, a pesar de que Valladolid tenga alrededor de 255.000 habitantes más que Zamora.
También incide el nivel económico de los ciudadanos, la tasa de paro o el grado de independencia financiera de los Ayuntamientos.
Por su parte, la concejal de Hacienda de Palencia, Elisa Docio, explica que la baja carga fiscal que soportan los palentinos se debe a la adecuada gestión de los recursos de la ciudad. «Los resultados del estudio se pueden traducir en que el Ayuntamiento de Palencia hace un gestión eficiente, que permite ofrecer a los ciudadanos unos servicios de calidad a un bajo precio», explicó la edil socialista, quien recordó que el objetivo del equipo de gobierno municipal ha sido aumentar la presión fiscal de año en año, pero siempre por debajo del incremento del IPC, «y podemos decir que lo hemos conseguido», indicó.
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